Desde que en el año 2000 se produjeran las primeras pruebas de animación suspendida con cerdos, se ha especulado en cómo se podría utilizar esta técnica para los humanos. Se habla de que podría ser el futuro para los astronautas que tengan que hacer viajes de meses pero parece que su aplicación más inmediata serán los pacientes con heridas muy graves.
A finales de este mes, en el hospital UPMC Prersbyterian de Pennsylvania en Estados Unidos se aplicará esta técnica para intentar salvar la vida de diez pacientes con heridas mortales con el objetivo de ganar un poco de tiempo para que los cirujanos puedan salvar la vida de esta decena de personas.
Ralentizando la vida para poder salvarla
La animación suspendida es una técnica en la que se extrae la sangre del paciente para introducir en su lugar una solución fría de salina que reduce la temperatura del paciente y hace que el cuerpo consuma menos recursos como por ejemplo oxígeno. Es un proceso similar a cuando en los 70 se inducía a algunos pacientes a la hipotermia para realizar con éxito operaciones a corazón abierto.
Aunque comúnmente se le conoce como animación suspendida, el doctor que lidera esta iniciativa no quiere que se le llame así sino que están “suspendiendo la vida” en un proceso de preservación y resurrección. En las pruebas publicadas en 2006 con cerdos el 90% de los animales que se sometieron a este proceso sobrevivieron sin ningún problema.
Una vez más parece que la medicina alcanza a la ciencia ficción con algo que hace años nos parecía algo más propio de una película de viajes en el espacio. Habrá que estar atentos para ver cómo progresa este proyecto y si los médicos son capaces de salvar la vida de estas diez personas. La tecnología está dando grandes saltos en el mundo de la medicina.
Vía | NewsScientist
Más información | ACUTE Care Research
Ver 21 comentarios