Motorola no ha mostrado solo productos destinados al consumidor de la calle. También algunos pensados para un público más profesional, como el Motorola M930, destinado al sector del transporte. Es un teléfono móvil clásico pero con un interfaz especial que lo hace mucho más sencillo de usar mientras se está conduciendo.
Vaya, yo no aconsejaría a nadie que usara el teléfono mientras conduce, pero por lo menos con este hacerlo es mucho más sencillo. Por supuesto, viene provisto de mandos libres y sus teclas son mucho más grandes de lo habitual para facilitar la pulsación.
Por si necesitamos algo de privacidad, y siempre que estemos parados, podemos usar el auricular que incorpora y con el que hablaremos como se hace desde un móvil clásico. Y es que no todo lo que encontramos en el 3GSM lo veremos después en las tiendas al alcance de cualquiera.
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