Id marcando con rojo el próximo 25 de marzo. ¿Por qué? Porque HTC nos va presentar su próximo buque insignia. Como el año pasado, la compañía taiwanesa hará un lanzamiento simultáneo en Nueva York y Londres. Allí conoceremos su nuevo smartphone de referencia.
Las filtraciones de las últimas semanas nos han dado muchas pistas de cómo será el nuevo smartphone de referencia: continuista respecto al HTC One, con pequeñas modificaciones en apariencia pero con algunos detalles curiosos como el detector de huellas o un doble sensor en la cámara trasera.
Escapando del MWC para atraer a los medios
Este evento nos hará salir, por fin, de dudas tanto en los detalles de su próximo smartphone así como cuál será la estrategia de HTC para este año. ¿También saltarán al mercado de las pulseras cuantificadoras? ¿Veremos smartphones de gama media con los que, de verdad, se harán el hueco que han ido perdiendo en los últimos años?
Se le agotan las balas a HTC al mismo ritmo que la paciencia a sus inversores. Necesitan dar un cambio de una vez por todas para remontar una mala racha que no para de extenderse cada vez que la compañía tailandesa revela sus resultados financieros cada tres meses.
La fecha suena lejana pero no es baladí: recordemos que la semana que viene Samsung presentará su nuevo tope de gama. HTC es consciente de que el Galaxy S5 va generar mucho ruido mediático y prefiere alejarse del ruido del Mobile World Congress para tener más protagonismo a posteriori. ¿Qué esperáis del próximo smartphone de HTC?
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