Los mejores smartphones de 2015: así son y compiten entre ellos

Con la llegada del Xperia Z5 hace unos días y la del iPhone 6s justo ayer, el ejército de terminales que conforman la primera línea del mercado, la gama alta, está lista para luchar por convertirse en el mejor smartphone del año. Y esto está más reñido que nunca.

Si hace poco más de un año vivimos una igualdad muy centrada en las especificaciones que provocó que casi todos los fabricantes - especialmente los de Android - vendieran menos, en este 2015 hay terminales de referencia que quieren salirse del camino marcado en algunos apartados para precisamente que esa diferenciación les haga ganadores absolutos. Comparemos con detalle y mirando más allá de puras especificaciones a los mejores smartphones de 2015.

La complicada búsqueda del diseño que enamore

En dimensiones, dentro de la gama alta, hay una guerra abierta por reducir grosor y peso, aunque ello suponga sacrificar otros aspectos del terminal. El más afectado por esta carrera por la delgadez extrema es el que se refiere a la capacidad de la batería. Pero de eso hablaremos más adelante.

Al nivel de tamaño de pantalla en el que se ha establecido la gama alta, de entre las 4,7 pulgadas y las 5,2 (con la excepción del LG G4 y el nuevo Mate S), resulta clave ofrecer un buen equilibrio entre dimensiones, primando que el terminal no tenga marcos excesivos así como poco peso y grosor adecuado. Si eso se consigue, los terminales grandes serán más manejables.

El ganador de esta comparativa creo que es claramente el Galaxy S6 Edge. Pese a tener una pantalla por encima de las 5 pulgadas, es el que menos grosor presenta, el más ligero con bastante diferencia (aquí el iPhone ha salido penalizado en su última revisión) y no abruma en ninguna de las otras dimensiones, especialmente en grosor, que es bastante contenido. Mención especial merece el LG G4 que, sobre todo en peso, no desentona con rivales de bastante menos diagonal.

¿Y qué pasa con los materiales? Salvo el Lumia 930 que mantiene la carcasa de plástico, el resto de gamas alta ya han pasado al metal o el cristal de forma definitiva.

En materiales el más díscolo en la actualidad es el LG G4 y su carcasa de piel natural, una manera diferente de conseguir exclusividad sin pasar por el metal o el cristal. En cuando a resistencia, solo el Sony Xperia es realmente sumergible hasta 1.5 metros, mientras que el mate S permite salpicaduras gracias a un recubrimiento especial.

Otro apartado que las compañías están mimando al máximo es el del color. Jugando con materiales como el cristal se han abierto las posibilidades y nos alegra ver que, si quieres, hay vida más allá del blanco, negro o metálico que ha imperado en casi toda la historia de los smartphones.

A continuación las posibilidades de colores que nos deja cada terminal de la comparativa:

• Lumia 930: Blanco, negro, verde y naranja.
• Sony Xperia Z5: Negro grafito, blanco, oro y verde.
• HTC One M9: metal en dos tonos (plata y oro)
• LG G4: dos acabados, uno en plástico que simula el metal, y otro en piel natural.
• iPhone 6s: metal con tonos plata, oro, gris espacial y oro rosa
• Galaxy S6 Edge: Negro, blanco, oro y verde
• Huawei Mate S: dorado, gris titanio y champagne

Pantalla: entre resolución y tacto está el juego

Con la calidad de los paneles ya superada a este nivel de gama alta, salvo detalles muy pequeños podemos decir que entre los modelos comparados nadie se llevará una decepción por calidad general de estas pantallas. Con tecnología IPS o AMOLED, habrá detalles de brillo máximo o contraste que afecte a la visibilidad en exteriores, pero podemos decir que estamos ante excelentes pantallas.

Las diagonales rondan ya las cinco pulgadas sin temor, salvo las 4,7 pulgadas del iPhone 6s o las 5,5 de dos atrevidos como el LG G4 y el Mate S que por diagonal estarían en el segmento de los phablet pero que por dimensiones y apuesta de sus marcas, entran en esta liga de los mejores del momento.

Si nos fijamos en los datos de la siguiente tabla y nos ceñimos a la densidad de píxeles de sus pantallas, hay dos smartphones que destacan por encima de los demás y uno que queda claramente retrasado. Los líderes son aquellos dos que han metido resolución 1440p en su panel, es decir, pantallas QHD, lo que los lleva a situar su densidad de píxeles por encima de los 530 ppp fácilmente. El Galaxy S6 Edge con sus 577 ppp queda también en este apartado a la cabeza, con una calidad de pantalla también excelente como vimos en su análisis.

Apple, que en cierta manera inició la era de las pantallas con alta densidad de píxeles, se ha quedado en la cola con su nuevo iPhone 6s. Su panel de 4,7 pulgadas supera por poco los 320 ppp.

La carrera de Apple se ha concentrado ahora en la resistencia de la pantalla, con un nuevo cristal, pero sobre todo con la tecnología 3D Touch. Es cierto que el Huawei Ascend S la presentó su Force Touch con una idea similar, pero ahora mismo mientras en el modelo de Huawei nos suena a prueba con poco recorrido, en Apple parece que será un elemento importante dentro de iOS9 si los desarrolladores se lo toman en serio.

La cámara de los mejores smartphones: nunca habíamos tenido tanta igualdad

Junto con la pantalla, la cámara suele ser uno de los detalles que más se miran en un smartphone de gama alta en la actualidad. En este 2015 creo que nos encontramos con la máxima igualdad en 3-4 terminales, aunque habrá que comprobar con su correspondiente comparativa fotográfica dónde queda cada apuesta en la realidad. No sobre el papel.

La carrera de los megapíxeles no debe ser obviada ahora que con tecnologías propias y procesadores de imagen muy avanzados los resultados son más que buenos en muchos terminales, los cuales también se han afanado en que el enfoque sea preciso a la vez que veloz, y que el usuario cada vez tenga más control sobre lo que puede hacer con la cámara del smartphone que le ha costado un buen pico.

Veamos ahora en una tabla cómo quedan las cámaras de cada protagonista de la comparativa a nivel de datos:

Además de estos datos, hay que tener en cuenta la interfaz y opciones que nos da cada fabricante. Tanto LG como Samsung dejan bastante control para el usuario a nivel de controles manuales, contando además el LG G4 con la posibilidad de almacenar el archivo RAW junto con el jpg cuando hacemos una foto. Su interfaz y posibilidades de control manual son las más completas de todos los que enfrentamos aquí.

Rendimiento y batería: mucho más que datos

Tanto la capa de personalización que cada fabricante, hablamos de Android, incluye sobre el sistema operativo como las especificaciones puras son las que determinan la experiencia de uso con un terminal, así como la fluidez. En esta gama nos encontramos con los últimos componentes del mercado y una apuesta diferente en términos de autonomía según qué fabricante.

Este 2015 la elección de procesador, memoria interna, capacidad de batería y RAM ha sido bastante dispar, así que hay lucha que resumimos en esta tabla final:

El gran duelo de phablets de gama alta

En la gama alta no solo juegan modelos que no disparan sus dimensiones. También hay smartphones que podemos considerar phablets por pantalla o su largo. Y en este 2015, los dos grandes referentes y que lucharán por hacerse con la mayor cuota de mercado en los princiales territorios son el iPhone 6s Plus y el Samsung Galaxy S6 Edge Plus, al menos hasta que el Note 5 de los coreanos sea ofrecido en todo el mundo. Veamos cómo compiten entre ellos: