Delgado, muy delgado. Tan solo 9.9 mm de grosor. Así es el Nokia E55, un nuevo terminal de la gama ejecutiva ESeries de la marca finlandesa, y que quiere ser un equipo de comunicación pero con un factor de delgadez no muy visto.
Como vemos, el Nokia E55 lleva un teclado QWERTY completo pero no deslizante. Nokia ha dotado al equipo de tecnología de deducción de las palabras que vamos a escribir para dotar de más agilidad a este proceso. El sistema sugiere las palabras y va aprendiendo de sus errores según le vamos corrigiendo. Con esa ayuda, los correos electrónicos deberían de ser más agradables de escribir. La Blackberry Pearl podría ser su rival más directo.
El sonido en el Nokia E55 no se ha olvidado e incorpora sistema de cancelación de ruido. Así podremos hablar largo y tendido, y si no lo hacemos, el teléfono dice poder aguantar hasta 1 mes en espera, increíble si es cierto.
La pantalla del nuevo terminal tiene una tamaño de 2.4 pulgadas, discreto, pero suficiente para gestionar los correos electrónicos con el servicio OVI de la compañía, por ejemplo. De hecho esos nuevos servicios en la nube los trae el Nokia E55 integrados de serie. Los podremos aprovechar por ejemplo para dar información a las redes sociales de nuestra posición en todo momento gracias a que incorpora sistema A-GPS.
El dato más sorprendente de este teléfono de Nokia es que integra la plataforma N-Gage. Sí, esa que convierte los móviles en videoconsolas portátiles. Parece más una extravagancia que realmente una funcionalidad que vayan a apreciar los potenciales clientes de este teléfono.
El precio del Nokia E55 estará, libre, por debajo de los 250 euros.
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