El Nokia N81 se presenta como un teléfono para divertirnos con él. No en vano, dispone de una serie de funciones multimedia, además de la compatibilidad y el diseño pensados para ser usados como consola con la plataforma N-Gage.
¿Cumple con estas características que promete? Pues vamos a verlo en este análisis que le hemos hecho. El modelo que nosotros hemos probado es el Nokia N81 8 GB, que como indica su nombre, incluye 8 GB de memoria interna para almacenar música, vídeos,... mientras que el otro modelo existente cambia esta memoria interna por un lector de tarjetas microSD, que no existe en el 8 GB. Nos vemos, por tanto, limitados a la memoria con la que viene.
Características físicas
A primera vista, el Nokia N81 8 GB tiene buena pinta, con un color negro brillante, pero una vez en la mano el terminal parece mal acabado, como de plástico barato. Es una sensación extraña en un teléfono de ese precio y de este fabricante, que solo destacar por el acabado de sus terminales. Pero es algo que con el uso se acaba olvidando.
Repasando sus características físicas, nos encontramos con una pantalla de 2.4 pulgadas con resolución de 320 x 240 píxeles que ofrece una buena calidad, una cámara de 2 megapíxeles, desastrosa y de la que ya hablaremos después, y, muy destacado, un teclado tipo slider con teclas de acceso directo en la parte frontal, una de las peores decisiones que ha hecho Nokia con el N81.
Justo debajo de la pantalla nos encontramos con hasta 16 teclas, entre las de acceso directo a música, el pad direccional, acceso a aplicaciones,... Evidentemente, en un espacio tan pequeño esto hará que nos equivoquemos pulsándolas, apretando muchas veces la tecla que no toca. Grave fallo de usabilidad por este lado.
Por otra parte, el teclado numérico mejora bastante, siendo bastante cómodo de utilizar y rápido para escribir mensajes y teclear números, a pesar de que a primera vista parecía lo contrario por lo juntas que están las teclas.
Reproductor de audio
El sistema operativo es Symbian S60, lo que garantiza una buena cantidad de aplicaciones y nos ha ofrecido un buen rendimiento, sin cuelgues ni ralentizaciones. Pero vamos a uno de los apartados más interesantes, el reproductor de audio.
Para cargar la música en el teléfono lo haremos a través de la conexión USB que incorpora. Una pega es que el conector del teléfono es microUSB en lugar de miniUSB, aunque al menos viene con el correspondiente cable. Una vez copiada la música ya tendremos acceso a ellas, con una clasificación similar a la que ofrece iTunes: artistas, discos, tipo de música,...
Y es que el reproductor de música es una de las mejores partes de este teléfono. Unido a que incorpora un conector de auriculares estándar de 3.5 milímetros, donde podremos conectar los auriculares que queramos, siempre llevaremos encima un potente reproductor, lo cual se agradece bastante y hace que nos olvidemos del peso del terminal, algo más elevado de lo habitual.
Incomprensiblemente, el N81 tiene desactivada una de sus mejores funciones, el funcionamiento del pad como rueda de desplazamiento, al estilo del iPod, que nos permite navegar por la música de forma rápida. Su funcionamiento no es tan preciso como el del reproductor de Apple, pero como apaño sirve y resulta más cómodo que moverse con flechitas. Lastima que no lo hayan implementando en otras partes como en la lista de contactos.
Además de los auriculares, también podemos escuchar música a través de los altavoces estéreo incorporados, que ofrecen una calidad de sonido bastante decente y un volumen relativamente elevado para el tamaño que tiene. Punto extra por este apartado.
Conectividad
Aunque el teléfono dispone de conectividad 3G, que funciona perfectamente, el disponer de Wi-Fi nos debería permitir podernos conectar a Internet de forma sencilla y sin gastar en las habitualmente ruinosas tarifas de datos de la mayoría de operadoras. Por desgracia, el buen funcionamiento del Wi-Fi parece depender de la alineación de los astros o del pie con el que nos hayamos levantado.
En algunas redes funcionaba perfectamente, sobretodo si no estaban protegidas con contraseña, pero en otras, como la de mi casa, lo hacía cuando quería. A veces cargaba una página y después dejaba de funcionar, otras funcionaba perfectamente,... todo ello a menos de un metro del router inalámbrico. Mal asunto cuando lo que se requiere en estos casos es fiabilidad.
El funcionamiento de N-Gage ya os lo mostramos cuando se lanzó y lo dejaremos en bastante bueno, a falta de que saquen juegos que aprovechen las características de la plataforma y del teléfono, puesto que la mayoría de los que probamos usaban el teléfono en vertical en lugar de la más adecuada posición horizontal.
Cámara de fotos
Tema aparte resulta la cámara de fotos, que nos ha decepcionado sobremanera, por la ya no poca calidad que ofrece, sino los desastrosos resultados de esta, especialmente en sitios cerrados, donde es imposible tomar una foto decente, además de tener una tendencia al verde, resultado de un balance de blancos defectuoso que, de poderse cambiar, no conseguimos encontrar entre las opciones.
Ejemplos de fotos tomadas con el N81
Conclusión
En resumen, un gran móvil si lo queremos para escuchar música o navegar por Internet (siempre que tengamos suerte con el Wi-Fi). El precio es elevado, pero se corresponde a la excelente capacidad de memoria de la que dispone. Lástima de toda esa serie de detalles que dejan un mal sabor de boca tras su uso.