El MWC 2012 fue el escenario en el que Panasonic anunció que volvía a Europa. Lo hizo presentando el nuevo Panasonic Eluga, un teléfono de exquisito diseño y el extra de aguantar agua y polvo como si nada.
A punto de salir al mercado en España, es el momento adecuado para qué me ha parecido el Panasonic Eluga que he estado probado para Xataka en las últimas semanas.
Panasonic Eluga, el regreso a Europa
Panasonic ha decidido que quiere traspasar su fama en su país natal a Europa … de nuevo. Tras unos años desaparecidos del mercado de terminales móviles en el viejo continente, el Panasonic Eluga elegido para reencontrarse con el usuario de smartphones.
El momento en el que busca su hueco Panasonic es complicado, y ellos lo deben saber. Android no es precisamente un sistema operativo en el que sea fácil hacerse un hueco a estas alturas, pero el Panasonic Eluga se ha propuesto la “machada“.
Sus argumentos los vas a conocer en este análisis a fondo, pero te adelantamos que el diseño y su resistencia al agua y suciedad son dos de las armas que va a esgrimir en el mercado.
Diseño
No hay que exprimirse mucho la cabeza para comprender nada más ver y tocar el Panasonic Eluga que el diseño es una de sus características estrella. Como por ahora no está a la venta, os lo voy a contar yo que ya lo he probado.
Imagina que piensas que un teléfono es delgado y ligero. Luego lo coges y te sorprendes de que lo tengas en la mano. Así es el Panasonic Eluga.
Con un grosor de 7.8 mm (todavía más en los extremos, que acaban en un bisel muy agradable al tacto) y un peso de apenas 100 gramos, es toda una gozada usar y tener entre las manos este nuevo teléfono de Panasonic.
Pese a su pantalla de 4.3 pulgadas, el Panasonic Eluga puede deciros que es pequeño y manejable, y la completa integración de la pantalla es un añadido estupendo.
El minimalismo del Eluga se lleva hasta el extremo con los controles. Los hay específicos para Android, pero no son físicos sino táctiles capacitivos, iluminados por unos LEDs blancos muy brillantes y que es lo único que altera la visión del infinito liso en cristal que es su frontal.
En la parte superior encuentran su lugar el puerto microUSB, la ranura para la tarjeta microSIM y el conector de audio de 3.5 mm. Los dos primeros son puertos cerrados con tapa de buena consistencia, algo importante para un terminal que va a presumir de poder sumergirse en agua.
La parte trasera del Eluga está ocupada por la cámara de fotos en exclusiva (sin flash) y ha sido fabricada en plástico mate que resulta agradable al tacto y resiste bien las huellas y suciedad. Además, ofrece un buen agarre.
En este apartado el Eluga rozaba el 9.5 de nota hasta que con el terminal en la mano, me puse a encenderlo. El control correspondiente junto con el de volumen sabía que estaban en su parte derecha, pero aun así, su activación me pareció desde ese momento incómoda. Es cierto que con el bisel en el que acaban los laterales era complicado darle otro diseño que el que tienen finalmente, pero el tacto y configuración final de estos controles no nos han convencido. La incomodidad es muy palpable cuando tratamos de coger el teléfono con la mano derecha, con la izquierda no hay problemas.
Pantalla
Con semejante grosor, no era complicado adivinar que la pantalla del Panasonic Eluga iba a ser AMOLED.
Concretamente estamos hablando de una SuperAMOLED de 4.3 pulgadas con resolución de 960×540 píxeles y que tiene la ventaja del grosor y luminosidad (y consumo), pero también el inconveniente de la saturación de los colores y algún que otro defecto no deseado pero que no todos los usuarios logran identificar ni mucho menos. No ayuda tampoco el fondo de pantalla por defecto que ha colocado Panasonic.
Dicho esto, lo mejor de la pantalla del Eluga es lo bien integrada que está en el diseño del terminal y lo conseguido del tamaño del terminal en conjunto. Estamos hablando seguramente del teléfono con pantalla de 4.3 pulgadas de menores dimensiones del mercado, al menos en la gama en la que compite.
Rendimiento y batería
Aunque por acabado y pantalla el Panasonic Eluga estaría dentro de la gama de smartphone de gama alta, la versión 2.3 de Android combinada con su procesador de doble núcleo a 1 Ghz (1 GB de memoria RAM) dejan sobre el papel a este teléfono como uno de gama media.
En los test sintéticos (Quadrant de 1523 y Vellamo de 672) queda demostrado que no puede competir con los grandes terminales de este año en la gama alta. Esos datos se corroboran en el uso diario, que si bien es suficientemente fluido, no te deja el buen sabor de boca de un teléfono Android bien afinado.
La batería, con una capacidad de 1.150 mAh, ha mantenido el tipo sin problemas, y es sencillo llegar a casi una jornada y media de uso habitual del teléfono, lo que sería un poco más de un día completo. El software y medidas de conservación de autonomía de Panasonic ha funcionado.
En lo que respecta al almacenamiento, su memoria interna es de 8 GB y no es complicado quedarse sin espacio para aplicaciones y datos, por lo que nos parece que una ranura para tarjetas microSD era obligatoria y sin embargo no está.
Sistema operativo
La combinación del procesador incluido en el Eluga con la versión por debajo de ICS (sale con Android 2.3) hacen una combinación que es lo más mejorable del termial sin lugar a dudas.
Si no existiera Android 4.0 estaríamos bastante contentos con el rendimiento general del sistema operativo del Eluga, con una personalización discreta de la compañía sobre Android y alguna que otra aplicación exclusiva a reseñar.
Pero ello no debe impedirnos comentar que este teléfono ganaría mucho con ICS en su interior. Al menos nos queda la esperanza de que en verano ha prometido Panasonic esa necesaria actualización.
Respecto a las aplicaciones exclusivas que incluye Panasonic en el Eluga nos quedamos con la que convierte el teléfono en mando a distancia de los televisores Panasonic de este año (ya está disponible también la correspondiente aplicación para iOS con las mismas funcionalidades). Una vez descargada la aplicación y emparejado el teléfono con el televisor, tenemos la posibilidad de manejar tanto las funciones básicas (entradas, programas, volumen …) como las opciones de menú o incluso el sistema Smart Viera.
A destacar que además de los controles básicos tenemos opción de touchpad, teclado y un curiosa forma de enviar contenido para reproducir en el televisor: arrastrando a la parte superior de la pantalla.
Cámara de fotos
Nadie puede dudar de que la cámara de fotos se ha convertido en uno de los valores a los que más importancia le da el usuario en un teléfono avanzado.
De un smartphone de Panasonic tenía que esperar lo máximo de entrada. Y en las pruebas que le he realizado al Eluga, la cámara de 8 megapíxeles de este terminal ha mantenido el tipo especialmente en imágenes en buenas condiciones de luz (sin hacer saltar la banca ni ponerse en el podium de una hipotética olimpiada de cámaras de fotos en smartphones) pero me parece que tiene que ofrecer más en calidad de imagen en todas condiciones y en software.
Con la competencia que hay ahora mismo en el ecosistema Android, incluir las palabras Lumix junto a las especificaciones de la cámara (pero que no se quede solo en el nombre) y un esfuerzo en la parte del software creo que es completamente necesario para un futuro Eluga 2 si quiere diferenciarse de la competencia en este campo.
Ver galería completa » Panasonic Eluga cámara de fotos (7 fotos)
Sorprende por cierto que Panasonic haya dejado de lado la cámara de fotos secundaria. Hay usuarios que seguro que le dan algún uso, aunque no sea mi caso.
Respecto a la grabación de vídeo, la calidad máxima es de 720p y es aceptable.
Resistencia al agua
Aunque no es una funcionalidad determinante en un smartphone, es de alabar que Panasonic le haya dado una protección IP57 a este Eluga, especialmente habiéndolo logrado sin que se note en absoluto. Deja el Eluga en manos de un usuario cualquier, dile que lo sumerja o se duche con él y seguramente te dirá que estás loco. Su gran diseño lo delata.
Pero he podido comprobar que su resistencia es real. Ducha, algún rebozado en arena y lavado posterior, e incluso un atrevido baño han sido parte de mi análisis de este Panasonic Eluga. Y en todos los casos el terminal ha funcionado a la perfección tras su húmeda experiencia, para alegría mía e imagino que de Panasonic, que tiene que recoger el terminal una vez que acabe la prueba y estoy seguro de que querrán que siga funcionando.
Como son muchos años ya y nos vamos conociendo, os tengo que advertir que bajo el agua (ya sea completamente o en la ducha) la respuesta táctil no es que no sea precisa, sino que prácticamente no existe. Cosas de la tecnología capacitiva. Eso sí, tras tenerlo a remojo, apenas hay que quitarle unas gotas de la superficie porque el Eluga prácticamente repele el líquido de su superficie.
La opinión de Xataka
Panasonic ha conseguido en su regreso a Europa que su Eluga sea muy observado. No es para menos. El ejercicio de diseño (especialmente en grosor, peso y sensación en mano) en este terminal es de alabar y mucho (si obviamos el tema de los controles en el bisel), así como la pantalla, que para la inmensa mayoría de consumidores resultará espectacular.
Pero dos de los apartados que están más en la mira de los consumidores – sistema operativo y cámara de fotos – se han quedado por debajo de nuestras expectativas, especialmente la correspondiente a Android. No dudamos de que este terminal tenga mucho más que decir cuando reciba su dosis de ICS, pero tendría que haber sido hoy. A día de hoy, dos meses para tener una actualización (y con las experiencias negativas en general en ese aspecto) se antojan demasiado.
Más información | Panasonic.
El teléfono ha sido cedido para la prueba por parte de Panasonic. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas