Las filtraciones se sucedían incluso ayer mismo, el día de la presentación de los Samsung Galaxy S8 y s8+, pero eso no quitó que hubiese expectación y ganas de verlos por fin materializados (oficialmente). Quizás algunos aún tenían la mínima esperanza de que el mellizo mayor sorprendiese en cuanto a cámaras, pero finalmente ni el S8 ni el S8+ integran doble cámara.
Esta tendencia ha ido formándose sobre todo desde que LG y Huawei lo integrasen en sus buques insignia de 2016. No fueron ni mucho menos los primeros, pero sí quizás los que lograron que quedase como reclamo y que posteriormente otros siguieran la estela (incluso Apple). Pero Samsung ha puesto una pausa y, dentro de la evolución que han supuesto los S8 en algunos aspectos, no ha entrado la doble lente, aunque alguna pista sí nos ha dado para el futuro.
Que vuelva el Note con fuerza
Los daños económicos quizás cicatricen antes que los que hubo a nivel de reputación con lo sucedido con el Note 7. De eso se hablo, se habla y se hablará, ayer mismo ya vimos innumerables referencias con el incendio que hubo en una tienda Samsung y bromas acerca de si los S8 explotarán, y la propia Samsung dedicó los pertinentes minutos en la presentación a recordar la mejora en los controles de calidad tal y como hizo con la del Galaxy S3 Tab y el Galaxy Book.
A nivel de marca es vital recuperar la confianza que hayan podido perder, pero también a nivel de gama. Y puede que además de recordatorios en presentaciones y la habitual explosión de publicidad uno de las tácticas haya sido retardar la inclusión de una doble cámara para el que seguirá siendo la otra mitad de los buques insignia de Samsung (si no cambia nada).
Ya hablamos aquí de lo que Samsung publicó desde la cuenta de Twitter de Exynos acerca de la doble cámara y el Exynos 8895 (y la serie Exynos 9), procesador que monta una de las variantes de los S8 (además del Snapdragon 835). En el tweet mostraban** un doble procesador de imágenes** para una doble cámara en un teléfono genérico, jugando a decirnos al mismo tiempo que ya han estado trabajando en ello pero que no lo íbamos a ver en los S8, como ayer comprobamos.
Teniendo un tope de gama con dos variantes con distinto procesador, pudiendo ambos dar soporte a una doble lente, ¿por qué no lo hemos visto en los S8? De momento no hay una explicación clara y/u oficial para ello, pero quedando pendiente ese "mejor, más seguro y muy innovador" Note 8 sería un excelente reclamo que fuese éste quien estrenase la doble cámara en los Samsung de primera línea.
Una espera de tanteo
La evolución de la doble cámara, hablando de esta segunda fase aparentemente más asentada (y no de los inicios con el LG Optimus 3D, el HTC Evo 3D o incluso el más reciente HTC One M8), está recorriendo un camino curioso si lo vemos en la corta perspectiva que tenemos desde 2016.
Por un lado tenemos la democratización de la doble cámara en gamas inferiores y no sólo en los buque insignia. La tendencia en estos casos es el uso orientado a lograr un desenfoque mayor (bokeh), aquí algunos ejemplos:
- Energy Sistem puso doble lente trasera en el Energy Phone Pro 3, un terminal de gama media por 269 euros. En este caso son dos lentes de 13 megapíxeles, una para un primer plano y otra para distintas distancias, con el fin de crear fotografías en 3D y desenfoque selectivo.
- ZTE es otro ejemplo de fabricante que apuesta por democratizar la doble cámara, con ejemplos como el ZTE Blade V8 (para bokeh) o el anterior ZTE Axon Elite (también para desenfocar en las macro).
- Reenfoque también en el caso de Xiaomi con el RedMi Pro, con sensores de 13 y 5 megapíxeles.
Los fabricantes que sacaron pecho con una doble lente en sus buque insignia y este año han mantenido la apuesta se han mostrado algo conservadores en cuanto al uso de la misma. Tenemos un Huawei P10 y P10 Plus con un sensor monocromo como el Huawei P9 y un LG G6 con un gran angular como el LG G5 (y el LG X Cam, de gama inferior), y por otro lado un iPhone 7 Plus que es primero en la casa en incorporar dos cámaras traseras y que ha optado por una segunda cámara con zoom óptico y un bokeh que parece estar teniendo bastante buena acogida.
Todo esto hace que en el caldo de cultivo que Samsung ha puesto con la no inclusión de la doble cámara en los S8 y el guiño con la capacidad para la misma del Exynos 8895 germine algo más de interés, por ver qué camino toma finalmente la compañía si como cabe pensar incorpora dos cámaras en su(s) terminal(es). Por ahora lo que vemos en la industria es que la inclusión de las dobles cámaras ha tenido apenas repercusión en el diseño para bien (en el caso del G6, de hecho, ha ido a mejor sin sobresalir), así que cabe esperar que aquí Samsung esté a la altura tras el trabajo que ha mostrado con el frontal de los S8.
El futuro de las ¿dobles? cámaras
Al Note 8 (o a los Galaxy S9) los esperamos con doble lente, pero ya ha habido fabricantes cuya ambición parece ir más allá. Tras un LG V10 con doble lente frontal está la posibilidad del doble combo y lanzar un smartphone con cuatro cámaras. Se apuntó a que el X10 de LeEco, aunque eso de momento sigue siendo un misterio sin confirmar.
Más allá de cuatro cámaras ya ha habido otra propuesta y en 2015, aunque haya quedado en un plano más discreto. Light nos mostró su L16 con ni más ni menos que 16 cámaras.
De momento parece que a la tendencia aún le quede tiempo y que los fabricantes estén sacándole partido a lo que permite una combinación de cámaras (y qué tiene más marketing). Tras haber dejado a un lado aparentemente aquella carrera por los megapíxeles, parece que la evolución de los smartphones en cuanto a cámaras vaya a seguir el camino de los núcleos del procesador, como dijeron en The Verge; tras tocar techo con la velocidad en los de núcleo simple se pasó a multiplicar su número, y ahora parece que toque multiplicar las cámaras. Veremos cómo lo hacen los coreanos y si Apple repite en su aplicación.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 21 Comentarios