Conocíamos que estaba listo, y que se llamaría Samsung Z1, pero hasta hoy no se ha hecho oficial en la web de la compañía coreana. Nos encontramos ante su primer teléfono con sistema operativo Tizen, que ya utilizaron en wearables, cámaras, y pronto estará en televisores.
Por ahora, como esperábamos, es un producto ideado para mercados emergentes. De hecho su comercialización inicial tendrá lugar en la India, donde se venderá a un precio muy bajo - para lo que se estila por aquí -, alrededor de 90 dólares.
Sus especificaciones no son para tirar cohetes, se trata de un terminal con pantalla de 4 pulgadas y resolución WVGA, con unos números que bien podríamos encontrar en teléfonos Android de hace varios años. Así lo prueban su chipset de doble núcleo, o los 768MB de RAM.
Otros datos a repasar, aunque los tenéis recogidos en la anterior imagen, son sus cámaras, de 3,1 megapíxeles para la principal, y sensor VGA para la frontal. Es interesante que cuente con ambas, y que no se hayan olvidado del flash.
En cuanto a conectividad, tenemos WiFi b/g/n y Bluetooth 4.1, pero no pasa de 3G a la hora de conectar a redes de operadoras. La memoria interna es de 4GB, pero como viene siendo norma en Samsung, ampliable vía microsSD. Las dimensiones completas del equipo son de 120,4x63,2x9,7 milímetros, pesando 112 gramos. Hay espacio para una batería de 1.500mAh.
Unos números muy por debajo de lo que nos dieron a conocer con el Samsung Z, presentado a mediados del año pasado, con la intención de ser su primer teléfono con la nueva plataforma. También hemos visto terminales de desarrollo más capaces que este Z1, queremos entender que con el tiempo habrá productos en gamas superiores.
La version Tizen con la que comienza su andadura es la 2.3, nos dan a entender que es un sistema muy ligero, que no necesita un hardware muy potente para funcionar. Nos encantará informar sobre más, cuando tengamos acceso a ello, especialmente sobre el tema de la ejecución de aplicaciones Android.
Como podéis ver en la imagen introductoria, se venderá en tres colores: blanco, negro y rojo. Ahí tenéis una galería completa del producto:
Camino a la India
Lo interesante del producto, además de estar claramente orientado a mercados emergentes, es el estreno de la plataforma Tizen en el mercado, en teléfonos. Lo hace además en la India, donde Google arrancó con Android One de forma descafeinada, y otros como CyanogenMod quieren hacerse un hueco.
Se espera que todas estas plataformas jóvenes - Android One, Firefox OS, Tizen - van a crecer de forma significativa en 2015.
En definitiva, un teléfono compacto y asequible con la aspiración de entrar en los bolsillos de la gran mayoría del pueblo indio. Una buena prueba para volver a comprobar – nos dejamos a bada en el camino – si Samsung es capaz de triunfar sin la ayuda de Google, o la cosa se queda en una prueba.
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