Ayer os mostrábamos los resultados financieros de una sobria Sony, que conseguía beneficios mínimos en algunos de sus departamentos importantes, al menos históricamente, ya que la compañía japonesa está equilibrando bien sus fuerzas para seguir siendo una compañía sana en el mercado. Hoy os podemos contaros algo más sobre el departamento encargado de los Xperia.
En el periodo de tres meses que termina en diciembre de 2015, se han vendido 7,6 millones de teléfonos. Si son muchos, pocos o está bien, es fácil comprobarlo al ver el histórico de ventas de los últimos trimestres: no se crece en cuota, se venden menos unidades. Por lo pronto decir que es un número inferior al que se esperaba en las expectativas más moderadas.
Con esa cifra se espera que el año fiscal termine con 25 millones de dispositivos Xperia vendidos, lo que supone una reducción del 7% con respecto al año anterior, en el que se vendieron unos 27 millones de teléfonos. En las expectativas de Sony estaba cruzar la barrera de 30 millones de teléfonos en un año.
Desde aquí valoramos cada producto que lanzan, tanto en gama alta como en segmentos más asequibles, y nos parece que las ventas no corresponden con lo que ofrecen, pero el mercado es caprichoso. Es demasiado complicado incluso para el que mejor posicionado está, dejando a un lado a Huawei, pocas pueden decir que su 2015 es mucho mejor que años anteriores.
Al menos es rentable
Los ingresos disminuyeron un 14,7% en comparación con el mismo período del año pasado. Al menos los recortes les han llevado a tener una división rentable: 201 millones en beneficios.
2016 no parece muy diferente para los teléfonos
El cuarto trimestre fiscal de Sony no va a ser boyante, se pronostican unas 3,5 millones de unidades vendidas, para encontrarnos con algo parecido nos tendríamos que ir hasta 2011.
Sony no quiere ser el líder en el hardware como ha sido con anterioridad, tiene que ser una empresa más sobria que sepa aprovechar mejor los negocios en los que realmente puede marcar diferencias.
Parece claro que PlayStation es su nuevo centro de actividades, y a partir de él hay que darle la mejor superficie de aterrizaje a la realidad virtual de PlayStation VR.
2016 va a seguir como el año pasado, con reducciones en el marketing y en la investigación desarrollo de la parte móvil. No apostaría por una venta de la división móvil, pero parece complicado que se vaya a echar más leña en un fuego que nunca ha conseguido crecer tan alto como Sony creía que merecía. Samsung, Apple y las empresas chinas quedan muy lejos para Sony.
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