Con el sueño de tener muebles que recarguen sin cables nuestro gadgets seguro que nos levantamos más de uno. Ese pequeño gra milagro ocurrirá cuando la recarga por inducción esté más desarrollada y parte de ese éxito dependerá de los chips internos que los gadgets a recargar incluyan en su diseño. Si, como en la mayoría de casos actuales, necesitamos enfundar el teléfono en un aparatoso traje inductivo, poco atractivo le queda a la tecnología.
El nuevo chip de Texas Instruments ha despejado un poco más el cielo de la recarga sin cables gracias a su tamaño de 0.12 pulgadas, cifra que por si misma no nos dice mucho pero que si indicamos que es un 80% más reducida que los que hay en la actualidad, seguro que mejora tu sonrisas.
Lo mejor de esa reducción de tamaño es que la eficiencia no se ha visto mermada, y sigue en un 93%, con la misma potencia de 5 W y tiempos de carga exactamente iguales a los que obtendríamos conectando el cable al gadget en cuestión.
Vía | Electronista.