Aunque la sensación que nos deja el nuevo Windows Phone 7 Series es el de mejora muy importante del sistema operativo para móviles de la empresa, Microsoft puede que esté de nuevo llegando tarde. Se esperaba una reacción por su parte frente a la experiencia de usuario que ha instaurado el iPhone de Apple y la potencia de futuro que representa Android, pero la llegada de Windows Phone 7 Series deja la sensación de respuesta más que de acción.
Pero Microsoft puede permitirse esta llegada tardía a los nuevos sistemas operativos porque es precisamente Microsoft. Al igual que pasa con el mundo de los ordenadores, el apoyo que obtiene por parte de los fabricantes es de notable alto, y ya se han pronunciado varios de ellos anunciando que trabajan mano a mano con Redmond. HTC ha sido uno de los primeros en anunciar que ya tiene planes para traer al mercado antes de que acabe el año teléfonos con Windows Phone 7 Series. Apoyo importante, como era de esperar, de uno de los fabricantes que antes de la llegada de Android, era un socio incansable de Microsoft, habiendo logrado incluso personalizar la interfaz de los antiguos Windows Mobile hasta el extremo de no poder casi reconocerlo en sus terminales. Dell, Asus, Samsung, Sony Ericsson … todos los grandes pondrán a disposición del nuevo sistema operativo de Microsoft parte de su catálogo de terminales.
Qualcomm es otro de los fabricantes que ya se está encargando de avisar de que sus chips, concretamente el famoso Snapdragon, serán la base de muchos de los nuevos teléfonos que salgan con el nuevo sistema operativo, del cual hemos visto vídeos de presentación, sus pilares básicos pero todavía no conocemos todo lo que nos podrá ofrecer cuando llegue al mercado a finales de este año.
La integración con redes sociales, todo lo que tiene que ver con multimedia y con su sistema Xbox Live es un acierto, y el lavado de cara y nombre seguro que le sienta bien. Pero es que además Microsoft se pone exigente y no todo el que quiera podrá contar con el nuevos sistema operativo de la empresa. Habrá requerimientos mínimos para garantizar que todo va como ellos han pensado que debe ir.
Habrá que ver ahora si el enfoque más ocioso y menos profesional no le pasa factura, aunque la mayoría de fabricantes, incluso el omnipresente RIM, ha ido evolucionando sus equipos a un campo más neutral, a quitarse la etiqueta de solo profesional.
Aunque personalmente me quedo con la espina de no haber tenido un terminal made in Microsoft, pues han demostrado con creces que su parte hardware (Zune HD o periféricos) resultan ser grandes productos.
Más información | Windows Phone 7 Series.
Ver 30 comentarios