La carrera por conseguir componentes cada vez más pequeños pero con la mayor calidad posible continúa en el terreno de los sensores para cámaras fotográficas en dispositivos de bolsillo. Toshiba acaba de lanzar un nuevo sensor bautizado como BSI (Backside illumination) CMOS.
Se trata de un sensor fotográfico con una tamaño de un cuarto de pulgada y un tamaño de píxel de 1.2 micrómetros. La retroiluminación es necesaria porque Toshiba ha redistribuido el orden de la óptica respecto al sensor, ubicando el grupo óptico detrás del sensor en vez de delante. Este cambio permite, en teoría, mejorar la sensibilidad de la cámara a la luminosidad ya que se eliminan las conexiones que restan la entrada de luz al sensor.
El nuevo sensor, cuyo nombre comercial es T4K05, ya ha entrado en producción y estará disponible para las compañías que quieran instalarlo en sus equipos a comienzos de 2011 a un precio de 15 euros. En cuanto a prestaciones el BSI CMOS T4K05 ofrece 8 megapíxeles y grabación de vídeo 1080p a 60 frames por segundo.
Vía | PR NewsWire