Los pilotos de Air Europa irán a la huelga los días 1, 2, 4 y 5 de mayo, siempre y cuando no se llegue antes a un acuerdo entre sindicatos y compañía. La decisión llega después del fracaso de unas negociaciones en las que se está jugando un nuevo convenio colectivo.
El parón llega a mitad de camino entre el Puente de Mayo y el Día de la Madre. La huelga afectaría por tanto a unas fechas señaladas. Además del Día del Trabajador (1 de mayo), el 2 de mayo también es fiesta en la Comunidad de Madrid, un puente que en la capital mueve a muchos viajeros. Los paros del jueves y viernes (4 y 5 de mayo), llegan justo antes del mencionado Día de la Madre y de la Final de Copa del Rey que se celebra en Sevilla.
El conflicto laboral ha aireado los ánimos entre compañía y trabajadores. La empresa acusa a los sindicatos de una actitud "irresponsable" con la huelga, mientras que los trabajadores aseguran que las propuestas del nuevo convenio colectivo ocultan, en realidad, una pérdida de derechos de los que disfrutan con el acuerdo actual.
Cómo nos puede afectar como viajeros
La decisión de convocar la huelga por parte del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) llega después de que compañía y trabajadores acudieran al Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) con el objetivo de alcanzar un acuerdo.
Desde Sepla defienden que los trabajadores reclaman recuperar la pérdida de poder adquisitivo de los últimos años y aseguran que la compañía disfraza de productividad lo que es, en realidad, una revisión salarial, generando "peores condiciones laborales y salariales a corto y medio plazo".
En cuanto a cómo afectará a los viajeros, la huelga ha sido convocada "en todas las bases y centros de trabajo en España", por lo que tendrán que establecerse servicios mínimos. El mínimo indispensable es ofrecer vuelos de conexión y un vuelo de ida y vuelta por destino.
En el caso de que nuestro vuelo esté afectado, podremos reclamar la devolución del dinero o solicitar un cambio de fecha para el mismo. En el caso de que el trayecto sea cancelado sin previo aviso, la compañía tendrá que hacerse cargo de la manutención del viajero y el alojamiento si es necesario hasta el próximo vuelo donde sea posible recolocarnos.
Además, se podrá imponer una reclamación a la compañía por los gastos derivados del viaje, como el alojamiento o servicios de alquiler (como un coche). En el caso de viajar por trabajo, es posible solicitar un justificante que certifique que nuestro vuelo ha sido cancelado.
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