Creado por el estudio de diseño ruso Man Works, lo que ves se llama Saint B y no es más que un prototipo, de momento.
Y me gusta, no por sus connotaciones religiosas, de las que paso de opinar, sino porque me parece que está muy bien diseñado y que puede usarse a la vez como adorno.
Como habrás imaginado se lleva colgado e imaginamos que si alguna vez se fabricara, que nos extrañaría, los auriculares irían integrados en el cordel.
Vía | Crave.