Si los lectores de Xataka estuvieran divididos en team café y team té, habría que empezar advirtiendo que el dispositivo que hemos probado está destinado a los primeros, a todos aquellos que pueden sentirse representados por la frase "Yo no soy persona hasta que me tomo el primer café". Sin embargo, dada la alta carga tecnológica que incorpora, es fácil que despierte el interés de unos y otros.
Como buena marca italiana, De'Longhi ha cuidado hasta el extremo su diseño, recompensado con el premio Red Dot 2024 y tres premios iF 2024 en las categorías de diseño de producto, experiencia de usuario e interfaz de usuario
Los muy cafeteros suelen ser gente que recuerda con nostalgia ese expresso que tanto los deleitó en una plaza de Roma o Florencia, por ejemplo. Y que luego, de vuelta a casa, han buscado (¿infructuosamente?) reproducir ese aroma y sabor probando con todo tipo de granos y cafeteras, desde las italianas de toda la vida a las de cápsulas, pasando por las de goteo o las menos habituales de prensa francesa.
Con la superautomática Rivelia, De'Longhi da un paso más en esa evolución y presenta una cafetera pensada al milímetro para maximizar la experiencia y que los sibaritas del café (Brat Pitt incluido) encuentren, por fin, el dispositivo que estaban buscando.
Las mayores sorpresas de la cafetera De’Longhi Rivelia: ¡las vas a amar!
Como buena marca italiana, De'Longhi ha cuidado hasta el extremo su diseño. Desde las líneas rectas y los remates curvilíneos a la calidad y el acabado de sus distintos componentes, todo indica, nada más sacarla de la caja, que estamos ante un producto prémium.
Una sensación que se ve corroborada cuando se pone en marcha, se descubren las muchas posibilidades que brinda a través de la pantalla táctil y, por supuesto, se disfruta de los primeros cafés. De todo ello vamos a hablar a continuación tras probar la Rivelia durante dos semanas.
¿Quieres hacer café y descafeinado? Con la tecnología Bean Switch con dos tolvas intercambiables ¡es facilísimo!
Empezamos con la primera característica que diferencia a la Rivelia de otros dispositivos top. Uno de los mayores inconvenientes de los modelos de cafeteras superautomáticas es que solo permiten hacer el café con un tipo de grano. Y si, por ejemplo, queremos cambiar de café normal a descafeinado, hay que vaciar el depósito y, ni aún así, la operación es limpia, porque puede quedar algún grano por el camino. Los diseñadores de De’Longhi Rivelia han resuelto este problema.
El sistema Bean Switch permite intercambiar las tolvas o contenedores de grano de café de manera muy sencilla. Así se puede cambiar de café normal a descafeinado en un momento
El sistema que han ideado se llama Bean Switch y permite intercambiar las tolvas o contenedores de grano (el pack incluye dos con capacidad para 250 gramos cada una), que se enroscan en la parte superior de la cafetera, en función del gusto del consumidor en cada momento. Así, podemos prepararnos un capuchino con la variedad arábica y, a continuación, tras cambiar la tolva, hacer un descafeinado de la variedad robusta para nuestra pareja.
Pero aún hay más. Para asegurarse de que no queden granos en el molinillo cuando se cambia un depósito, la cafetera, a través de la pantalla táctil, nos da la opción de hacer un café con esos restos, y así aprovecharlos, o molerlos para deshacernos de ellos.
Frescura y sabor en cada taza gracias al molinillo que muele el café en grano al instante
El café, una vez molido, pierde propiedades, aroma y sabor. Es un lujo tener una cafetera que muele el grano en tiempo real y te prepara una de las 16 bebidas disponibles en poco más de un minuto
El café, una vez molido, pierde propiedades, aroma y sabor. Por eso, tener una cafetera como De’Longhi Rivelia, que para cada café muele el grano en tiempo real, es un lujo. Además, lo hace con un molinillo con dientes de acero (y no de plástico) y en tiempo récord. Así, en poco más de un minuto desde que encendemos la máquina, estará lista nuestra taza con una de las 16 bebidas diferentes que elabora.
Para personalizar la experiencia, en un lateral se puede ajustar el nivel de la molienda, que va de uno a siete. Siendo uno la opción que deja el molido más fino, y siete el más grueso. Si los granos llevan tostados mucho tiempo, la recomendación es llevar el molinillo a un nivel más fino (3, por ejemplo). Y si se trata de un grano descafeinado, pues también, para evitar la acidez. Aunque es cuestión de ir probando y que seamos nosotros quienes decidamos lo que más nos gusta. Lo que sí hará la Rivelia, gracias a la tecnología Bean Adapt, es ayudarnos a configurarla de acuerdo a los granos utilizados, ajustando la temperatura, el ajuste de la molienda y la intensidad.
También se han acordado de los olvidadizos y, aunque su "gracia" es moler los granos en el instante, es posible prepararse una taza con café molido a través de un compartimento que hay en la parte superior del dispositivo.
Características de la cafetera superautomática Rivelia por las que vas a quererla en tu cocina
Disponible en cinco colores (blanco ártico, negro onyx, marrón arena, gris guijarro y verde jade), es una cafetera muy compacta que combinan con los estilos de cualquier cocina moderna.
Presume de cafetera con su espectacular diseño ganador de varios premios y disponible en varios colores
Los ingenieros de De’Longhi han logrado el tamaño más reducido para una máquina de café superautomática. Son menos de 10 kilos y unas dimensiones muy ajustadas: 245x430x385 mm.
Todas las piezas encajan a la perfección y no hay que forzarlas en ningún momento, siendo realmente sencillo quitar cualquiera de los recipientes cuando tengamos que rellenarlos o limpiarlos
Se aprecia desde el primer momento la calidad de sus componentes, desde el plástico resistente (pero suave al tacto) de la cafetera y los depósitos transparentes de café, agua y leche, hasta el acero del molinillo o los acabados metalizados del surtidor del café, la leche o la bandeja de desagüe. Además, todas las piezas encajan a la perfección y no hay que forzarlas en ningún momento, siendo realmente sencillo quitar cualquiera de los recipientes cuando tengamos que rellenarlos o limpiarlos.
Se trata de una cafetera top, que ha sido recompensada con el premio Red Dot 2024 y tres premios iF 2024 en las categorías de diseño de producto, experiencia de usuario e interfaz de usuario.
¿Eres de crema en el café? Su tecnología LatteCrema te deleitará en cada taza con la crema perfecta
La tecnología LatteCrema Hot ofrece una crema de leche fina y rica, a la temperatura caliente adecuada. Nuestra taza o vaso estará rematado con ese característico aspecto nevado
Llegamos a una de las prestaciones que más aprecian los amantes del café y que más asemejan esta cafetera a las que se podemos encontrar en cafeterías y restaurantes. La tecnología LatteCrema Hot que incorpora ofrece una crema de leche fina y rica, a la temperatura caliente adecuada. Y lo puede hacer con leche de vaca o con alternativas vegetales, como las leches a base de soja, avena, arroz o coco, entre otras.
De la variedad de formas de preparar el café que ofrece la De’Longhi Rivelia (hasta 16 tiene en el menú), son varias las que recurren a la tecnología LatteCrema para rematar la taza o el vaso con ese característico aspecto nevado. Son, por ejemplo, el cappuccino, el late macchiato, el caffelatte o el espresso macchiato.
Fácil de usar gracias a su interfaz de usuario inmersiva
El buen hacer de De'Longhi radica en que ha conseguido desarrollar una cafetera ultratecnológica sin complicar para nada la vida de sus usuarios, porque es posible utilizarla desde el minuto uno
La cafetera Rivelia está pensada para sacarle todo el partido a su tecnología sin que haya que hacer un máster para ello. Por eso, su pantalla táctil de 3,5 pulgadas a todo color presenta una interfaz muy intuitiva. Y la misma máquina nos va guiando por el menú y las distintas opciones, con explicaciones muy claras y mensajes que siempre tienen un tono muy cercano y amistoso.
Ahí radica el buen hacer de De'Longhi. Ha conseguido desarrollar una cafetera ultratecnológica sin complicar para nada la vida de los usuarios, porque es posible utilizarla desde el minuto uno simplemente siguiendo las indicaciones que aparecen en pantalla.
Desde ella, podremos configurar hasta cuatro perfiles de usuarios, elegir entre las 16 bebidas disponibles (intensidad y longitud incluidas), pero también nos avisará de que llega el momento de enjuagar o meter en el surtidor de leche, o de limpiar la bandeja con los posos. Otra pantalla a la que deberemos estar bien atentos.
¿Quieres una cafetera que haga cafés a tu medida? La Rivelia tiene múltiples posibilidades de personalización
A una cafetera superautomática y con tanta tecnología encima, se le suponen muchas opciones de personalización. Y, efectivamente, la Rivelia de De’Longhi no decepciona en este aspecto.
La lista es larga: permite ajustar el café y la leche en cada toma, añadir más café sobre la marcha, con la función Extra Shot, y, además, crear perfiles para cada miembro de la familia y recordar las preferencias de cada uno, dependiendo de cada momento del día.
Puede con 16 bebidas de café totalmente personalizables con función Extra Shot
Cada una de las formas de preparar el café que tiene la máquina puede ser personalizada pulsando el botón verde de la parte inferior. Desde ahí le podremos decir qué intensidad tendrá el café que queremos y qué cantidad de leche lo acompañará. Y guardar esa combinación pulsando en la función My, para la próxima vez.
Además, esta cafetera permite crear hasta cuatro perfiles de usuario, que pueden ser totalmente personalizables, con avatares diferentes, y que guardará las preferencias de cada miembro de la familia.
También es posible añadir una dosis extra de café con la función Extra Shot. Al seleccionarla, Rivelia preparará un espresso adicional de 30 mililitros con intensidad fija al final de la entrega. En el caso de las bebidas con leche, esta inyección adicional siempre es administrada justo después de la fase de café.
Con función de rutina de café para preparar tus bebidas favoritas de forma automática
Cada uno tiene una rutina con el café. Hay quien por la mañana lo toma fuerte y doble, y luego se mantiene con un par de descafeinados. Pero también los hay que prefieren ir ingiriendo esta bebida durante el día a dosis más constantes. Y en cada toma, hay mucho donde elegir: con leche o negro puro, largo o corto, intenso o ligero…
En fin, hay un café para cada momento del día, y lo mejor es que la superautomática Rivelia de De’Longhi es capaz de aprender nuestra rutina y ajustar el menú para sintonizarlo con nuestros gustos. Digamos que se comporta como un Spotify del café, y con el uso se adelanta a nuestras preferencias.
Para ello, solo hay que pulsar el icono que aparece junto a nuestro avatar. Se mostrará el momento específico en que vamos a tomar el café (por la mañana, a la hora de comer o a media tarde) y grabará la información.
Luego, cada vez que pulsemos ese icono, automáticamente la cafetera estará preparada para volver a preparar la bebida registrada. Igualmente, desde este mismo menú se podrá desactivar sin problema, y en cualquier momento, esta función.
Bean Adapt: para la personalización más avanzada de temperatura, molienda, intensidad… ¡y mucho más!
Los usuarios más exigentes de esta Rivelia disponen de la tecnología Bean Adapt, que ayuda a configurar la cafetera directamente desde la pantalla para que sea posible sacar el mayor partido a cada tipo de grano, y que actúa sobre la temperatura de preparación del café, la finura de la molienda o la intensidad de la bebida.
En el menú indicaremos, entre otras cosas, el nivel o color del tostado, porque cada variedad de grano y su proceso de preparación son un mundo. Con Bean Adapt puedes guardar información referente a seis tipos de café y cómo hay que preparar la bebida en cada caso.
Como vemos, la personalización es máxima y, además, sin que repercuta en la usabilidad de una cafetera que nos guiando a la hora de prepararnos un café, pero también cuando llegue el momento de rellenar el depósito con agua fresca, enjuagar el circuito, limpiar el surtidor de la leche, vaciar la bandeja de los posos, etc. Todo ello pensado para prolongar su vida útil y que disfrutemos de un café como el que nos tomamos aquella vez en la piazza Navona de Roma o della Signoria de Florencia. Pero ahora sin salir de casa.
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