El código QR es una tecnología de sobra conocida por todos. Utilizado popularmente para acceder rápidamente a determinadas webs, alcanzó un nuevo auge con la pandemia y hoy parece afianzado como alternativa a la carta tradicional de los restaurantes. Pero el valor del código QR puede ir mucho más allá, pudiendo ayudar a salvar vidas, a pesar de lo que podemos llegar a pensar por su sencillez. Precisamente en la simplicidad de su uso está su secreto. Veamos un claro ejemplo.
Una carrera contra el tiempo para salvar vidas
Ya hemos explicado en este artículo el papel de los bomberos en los accidentes de tráfico y siniestros viales. Como servicio de emergencia, su cometido más conocido es socorrer los vehículos incendiados y sofocar las llamas que se puedan producir en ellos (explosión de algún componente, incendios de bosques cercanos, actos vandálicos…).
Pero los cuerpos de bomberos también intervienen en la excarcelación de pasajeros que puedan quedar atrapados en el vehículo siniestrado. Incluso pueden encargarse de la asistencia médica y psicológica de las víctimas durante la liberación. El traslado inmediato a un hospital para ser atendido debidamente, también es fundamental.
Toda la actuación de los bomberos supone una auténtica carrera contra el tiempo (de ahí el documental de Renault denominado "TimeFighters”). Cada minuto que se tarda en socorrer a una víctima puede ser determinante para salvarle la vida: se estima que, si transcurren más de 60 minutos entre que se produce un accidente y que la víctima es atendida en un hospital, sus posibilidades de sobrevivir disminuyen un 50%. Esos 60 minutos es lo que los expertos denominan la “Golden Hour” u “Hora Dorada”.
Como cualquier otro servicio de emergencia o rescate, el proceso llevado a cabo por los cuerpos de bomberos sigue un protocolo preestablecido y diseñado para que la actuación sea lo más eficaz posible. El entrenamiento de bomberos con vehículos reales cobra gran importancia para que estos adquieran las destrezas y automatismos necesarios. Se estima que, en los últimos 30 años, los bomberos han conseguido reducir el tiempo de actuación en accidentes de tráfico a la mitad.
"Hojas de rescate" para ayudar a los bomberos
El entrenamiento con vehículos es muy importante para que los bomberos conozcan la “anatomía” del coche accidentado. Pero incluso pudiendo entrenar con modelos reales donados por Renault, cada modelo de cada fabricante puesto en circulación, puede ser muy diferente entre sí. Y es físicamente imposible que los bomberos los conozcan todos de memoria. Por eso, una parte importante de su protocolo de emergencia en un accidente de tráfico, es consultar los datos técnicos del vehículo.
En el rescate después de un accidente, es muy importante que los bomberos conozcan la “anatomía” del coche accidentado
Toda esta información técnica del vehículo se recoge desde hace ya varios años en las llamadas Fichas de Apoyo a la Decisión (FAD). Recogen aspectos como la ubicación de sus elementos principales, como motor, batería, depósito de combustible, elementos inflamables… así como la forma de retirarlos o desactivarlos para realizar la extracción de la víctima de forma segura. Constituyen una auténtica radiografía y una guía sobre cómo proceder con cada modelo, algo que cobra una especial relevancia con la llegada de las nuevas mecánicas híbridas y eléctricas.
La mayoría de los fabricantes elaboran estas FAD y las entregan a los servicios de emergencia, siendo Renault uno de los referentes al tener en cuenta a estos profesionales en la elaboración de documentos. En total, se estima que un cuerpo de bomberos puede contar con unas 1.600 fichas distintas, una elevada cifra que dificulta su acceso. Hasta hace unos años, las FAD se guardaban en carpetas en formato papel, y los agentes pocas veces tenían tiempo de consultarlas durante el fragor de una operación de rescate.
QRescue: la llave que da acceso al conocimiento en el lugar del siniestro
Los bomberos además contaban con una dificultad añadida: identificar el vehículo siniestrado o en llamas. Hay que tener en cuenta que cada fabricante cuenta con varios modelos, cada modelo con varias generaciones y cada generación con varias versiones de motorización y acabados. Entre cada una puede haber diferencias de estructura y elementos sustanciales. Por eso, era necesario contar con una forma rápida y efectiva de identificar el vehículo y acceder a su FAD.
La solución para identificar de forma rápida los vehículos, vino de un viejo conocido de la industria automotriz: el código QR
La solución para identificar de forma rápida los vehículos, vino de un viejo conocido de la industria automotriz: el código QR. Aunque hoy en día lo utilizamos para acceder rápidamente a una dirección web con nuestro smartphone, el Quick Response code se creó en 1994 como una evolución del código de barras para la administración de inventarios y registro de repuestos en automoción. Formado por una matriz bidimensional de módulos en dos colores (generalmente blanco y negro) permite leer datos vertical y horizontalmente y albergar una mayor cantidad de datos.
Renault lleva utilizando códigos QR para la identificación de vehículos desde 2014. Lo ofrecían en pegatina autoadhesivas para ser escaneadas por dispositivos lectores y dar acceso a fichas de intervención detalladas. Actualmente, el fabricante francés ha estandarizado este proceso con el nombre de QRescue, y todos sus vehículos lanzados al mercado cuentan con él de serie y desde fábrica. El código QRescue es incluido en los parabrisas delantero y trasero, en una ubicación concreta que ha sido consensuada y validada por los propios cuerpos de bomberos.
De esta forma, los servicios de emergencia personados en un accidente pueden localizar el QRescue rápidamente. Escaneándolo con un dispositivo digital (generalmente una tablet), consiguen acceder rápidamente a la FAD específica del vehículo, así como a información valiosa sobre cómo liberar a las víctimas atrapadas y limitar el riesgo de lesiones. Con respecto al código QR tradicional, el código de Renault cuenta además con la ventaja de que puede ser leído en zonas sin cobertura de red móvil.
Se estima que gracias al QRescue, los bomberos pueden ahorrar hasta 15 minutos en la determinante Hora Dorada, consiguiendo así salvar un incontable número de vidas. Los servicios de emergencia se valen cada vez más de la tecnología para hacer su trabajo más eficaz, y la colaboración con fabricantes como Renault cobra gran valor para innovar y desarrollar nuevas aplicaciones. Otras innovaciones propias de la marca del rombo, como el SD Switch o el Fireman Access, permitirán mejorar los tiempos en el futuro.
