Acer era el protagonista que faltaba para unirse a la fiebre ultrabook de este final de año y ya ha hecho oficial su gama Acer Aspire S3 con pantalla de 13.3 pulgadas y resolución de 1366×768 píxeles.
El diseño de los Acer Aspire S3 es tremendamente atractivo, con carcasa de aluminio y aleación de magnesio, trackpad extragrande para lo que suele hacer la compañía y su punto fuerte, el grosor, de solo 13 mm (17 mm en la parte más gruesa), con un peso de 1.4 kg. SU precio, que arrancará en los 799 euros, con un modelo superior que costará 1.199 euros, cumple con lo prometido.
Esta nueva gama de portátiles delgados vendrá motorizada por toda la gama de chips de Intel dentro de sus Core i3, i5 e i7 ULV, además de contar con la inestimable colaboración de los discos SSD para mejorar tiempos de arranque, autonomía y calor en funcionamiento. Acer promete puesta en marcha desde reposo en solo 1.5 segundos gracias a tecnologías propietarias.
La configuración que podemos escoger está protagonizada por un SSD de 240 GB o un disco tradicional de 750 GB al que se ha incorporado, soldado a la placa base, una pequeña SSD para mejorar tiempos de acceso al equipo.
Del apartado gráfico se encargará la integrada Intel HD 3000, y en conexiones encontramos dos puertos USB, bluetooth 4.0, ranura para tarjetas de memoria SD y puerto HDMI. Menos la ranura SD, el resto de conexiones van en la parte trasera del porátil. Y respecto a la batería, aguantará oficialmente siete horas en funcionamiento, aunque en modo navegación deberemos de pensar en las cinco y media más o menos.
Como sistema operativo tendremos Windows 7 a partir de su versión doméstica. Y en unos minutos, nuestra primera toma de contacto con este equipo en Berlín.
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