Uno de los principales inconvenientes de muchos de los ultraportátiles que hay en el mercado es que las posibilidades de encontrar algo distinto o personalizar un poco sus especificaciones son escasísimas. El Dell Mini 9 ha sido de los mejores ejemplos de lo que comento … hasta ahora.
El Dell Mini 9 ya podemos comprarlo en España con una mayor gama de configuraciones y opciones que lo hacen un elemento más flexible. Hemos pasado de no poder escoger más que un equipo con Ubuntu y poca RAM a tener en la mano decidir el sistema operativo y ampliar opciones interesantes como la RAM o el disco SSD de serie, que era bastante pequeño.
Que los fabricantes no nos limiten tanto con sus modelos de ultraportátiles es una de las tareas que tienen por delante. Porque es lo que pedimos los consumidores, ¿verdad?
Ahora bien, si nos quieren cobrar las mejoras a un precio muy alto, las ventajas ya no lo son tanto. Veamos cómo lo ha hecho Dell. Si adquirimos el modelo más básico, que sale por 299 euros, nos llevamos lo siguiente:
Procesador Intel Atom N270 a 1.6 Ghz
512 MB de RAM, a todas luces ridículo dar esa opción.
Ubuntu 8.04.
Sin webcam.
Disco SSD de 4 GB.
Como vemos habría que mejorar bastante el equipo para obtener algo decente. Para dejarlo medio decente, le ampliamos la RAM a 1 GB y el disco SSD a 16 GB. Se nos queda entonces en 424 euros.
Ahora bien, podemos llegar a mejorar el equipo Dell Mini 9 hasta obtener lo siguiente:
Mismo procesador.
Windows XP SP3.
1 GB de RAM
64 GB de SSD
Webcam de 1.3 megapíxeles
Carcasa personalizada con un dibujo distinto.
Bluetooth
En este caso, el precio del equipo que nos llevaríamos sería de 582 euros, demasiado alto para ser un ultraportátil. Por ese precio preferiría acudir a un HP Mini 700 con la garantía de una pantalla y sobre todo teclado mejor. Además, en el modelo con Windows XP me limitan la memoria RAM a 1 GB, pero lo curioso es que, al igual que pasa con el modelo de HP, se trata de una limitación que impone el sistema operativo. Ridículo.
Como vemos, hay mucho que mejorar, y al final, si personalizamos a nuestro gusto el ultraportátil o nos llevamos un precio no aceptable, o nos limitan ciertos aspectos por la elección de uno u otro sistema operativo.
Más información | Dell (gracias Andreu)