¿Es Linux suficiente argumento para que un portátil de un fabricante minoritario triunfe?

Poco a poco parece que cada vez vemos a más fabricantes apostar por comercializar portátiles que recurren a GNU/Linux como sistema operativo por defecto. Marcas como System76 son de sobra conocidas por usar Linux de forma exclusiva, Dell tiene varios portátiles linuxeros, y en España tenemos a Slimbook. Ahora, este año tenemos que añadir a los británicos Star Labs Systems a la lista.

Y es que parece que el equipar Linux se ha convertido en un reclamo para que pequeños fabricantes puedan hacerse un hueco entre las decenas de empresas que lanzan sus productos al mercado. ¿Pero es suficiente con meterle GNU/Linux a tu portátil para que un fabricante minoritario consiga triunfar?

Vamos a poner como ejemplo a esta nueva empresa, que tras lanzar en 2015 un portátil para uso casi exclusivamente interno, este 2017 se ha lanzado con una nueva línea de productos que incluye cuatro portátiles. Los ensamblan en el propio Reino Unido y los envían gratis a toda Europa, pero analizando su catálogo vamos a ver hasta qué punto Linux es suficiente para hacerse un hueco.

La propuesta de Star Labs Systems

La empresa británica sólo cuenta con 4 portátiles en su catálogo, pero cubren diferentes necesidades partiendo de un equipo básico de 300 libras de precio a uno con pantalla UHD dirigida al ámbito profesional de edición con un precio de 2199 libras. Los portátiles vienen con un sistema operativo GNU/Linux de serie, que puede ser Ubuntu, Elementary OS, Linux Mint o Kali Linux.

El primer dispositivo en lid es el Star Lite, un ultrabook con procesador Quad Core y pantalla de 11.6 pulgadas con resolución HD a 1366×768. Parte con un disco duro HDD de 320 GB a 5400 RPM, 4 gigas de memoria RAM DDR3L y un peso de 3 Kg. Parte de un precio de 299 libras que irá creciendo según decidas cambiar su configuración de memoria.

En segundo lugar está el Star LabTop, un ultrabook con un chasis de aluninio de 18,6 milímetros de grosor, procesadores Intel Core i5, disco duro SSD de 250 GB y 8 GB de memoria RAM DDR4. Su pantalla es de 13.3 pulgadas con resolución QHD de 3200×1800, y su precio parte de 999 libras que irán creciendo según lo configuras para mejorar el procesador, el disco duro o la RAM. También permite poner un teclado en español sin coste añadido.

Después está el Star LabTop Pro, un portátil bastante más grueso pero potente. Parte de una pantalla Full HD de 14 pulgadas, un procesador Intel Core i7 de séptima generación, disco duro SSD de 250 GB y 16 GB de memoria RAM DDR4. El precio parte de 1.249 libras que irán aumentando según lo configuras, y en este caso sólo tiene teclado británico.

Y por último está el LabTop Pro X, la joya de la corona. Cuenta con un monitor de 15.6 pulgadas y resolución UHD de 3840×2160, procesador Intel Core i7, disco duro SSD de 250 GB y 16 GB de memoria RAM DDR4. Todo ello acompañado de un diseño fino y una gráfica NVIDIA GeForce GTX 1070 Max-Q con 8 GB GDDR5. Una bestia cuyo precio empieza en 2.199 libras que irán creciendo dependiendo de tu configuración.

¿Es Linux suficiente argumento?

Esta nueva gama de dispositivos, como hemos dicho al principio, se va a promocionar en la red como una gama dirigida a los linuxeros, y como no hay muchos fabricantes que hagan esto la estrategia les hará destacar inmediatamente. Pero claro, eso no es garantía de éxito a largo plazo si no tienes en mente otras cosas al diseñar tus portátiles.

La primera cosa a tener en cuenta, evidentemente, es adaptar bien el sistema operativo. No vale con instalar GNU/Linux y listo, tienes que asegurarte de que tu hardware no de problemas de compatibilidad y de que todo funcione correctamente.

Uno de los aparentes aciertos que esta empresa parece tener está en que sus cuatro portátiles son todos muy diferentes y parece que han pensado muy bien para quién va dirigido cada uno. Lo tienen básico, "normal", y gamer. Eso también es muy importante, porque les da un valor añadido que también les ayuda a destacar entre la propia competencia linuxera.

En este aspecto parece que han seguido el camino de System76, un fabricante estadounidense que tras varios años comercializando portátiles con Linux se ha convertido en una referencia. Es importante no caer en la trampa de los portátiles clónicos que no aportan nada entre los diferentes modelos más allá de unas cuantas especificaciones.

Los gastos de envío también son un argumento de peso a la hora de conseguir promocionarte a nivel internacional. Por ejemplo, vemos que Star Labs Systems envía gratis a todo Europa, y eso hará que sea más fácil que los usuarios europeos apuesten por ellos antes por ejemplo que los mencionados System76.

En ese aspecto también suman otras ventajas como los teclados con diferentes configuraciones de idiomas. Para muchos usuarios avanzados este no es un problema excesivo, pero estoy seguro que por ejemplo a los Xiaomi Mi Notebook Air les iría mucho mejor en países como España si incluyesen la opción de tener un teclado en español.

Tampoco hay que perder de vista el precio. Puedes instalar GNU/Linux en prácticamente cualquier portátil Windows. Sí, es atractivo comprar un portátil con el sistema operativo adaptado y preinstalado, pero si el precio es demasiado elevado los usuarios preferirán recurrir a otras alternativas aunque eso suponga tener que complicarse la vida cambiando de sistema operativo.

Pero nada de esto servirá para nada a largo plazo si no se cumplen otros dos de los requisitos más importantes para que los pequeños fabricantes puedan hacerse un hueco gracias a comercializar portátiles con GNU/Linux. Por una parte está el apartado de los acabados, y por otra el servicio postventa.

Si tienes un portátil atractivo en fotos y que destaque por precio y sistema operativo puede que convenzas a unos cuantos para comprarlo aún siendo una nueva marca. Pero si el acabado final y los materiales no cumplen con las expectativas las primeras críticas serán negativas, y eso supondrá un obstáculo importante a la hora de comercializar un nuevo fabricante.

Volviendo al caso de Star Labs Systems esa es por ejemplo una de las grandes incógnitas. Si es un fabricante nuevo muchos preferirán esperar a que otros se arriesguen a comprarlo primero, y no darán el paso de apostar por ellos a no ser que las primeras reseñas sean buenas.

Y por último está otra de las claves a largo plazo, el servicio postventa. La gente quiere que si surge un problema el fabricante no te deje a la aventura. Y si eso puede decidir comprar una u otra marca incluso en los fabricantes de renombre, los fabricantes minoritarios tienen que esforzarse el doble para ganarse la etiqueta de fiables.

Por lo tanto, volviendo a la pregunta original, Linux puede ayudar a un pequeño fabricante a corto plazo, ya que te hace destacar rápidamente entre la competencia. Pero a medio y largo plazo, si quieres tener éxito vas a necesitar cumplir también con muchas otras cosas si te quieres convertir en una marca de referencia.

En Xataka | Linux también quiere conquistar tu coche: debuta en Toyota para ganarle la partida a Android Auto y Carplay

Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com

VER 83 Comentarios

Portada de Xataka