¿Qualcomm, Intel o AMD? La batalla en los convertibles promete un gran impacto en consumo y rendimiento

Qualcomm ha elegido un momento de lo más emocionante para aterrizar en el mercado de los PC con su plataforma Snapdragon. Y es que cuando lleguen los primeros convertibles y ultraligeros equipados con este SoC se verán obligados a enfrentarse no solo a los nuevos Ryzen Mobile y Ryzen PRO Mobile que AMD acaba de presentar en el CES, sino también a los primeros Intel Core dotados de una GPU AMD Radeon RX Vega M.

Los datos que hemos recabado hasta ahora nos permiten hacernos una idea de lo que nos deparará cada una de estas propuestas. Aunque, claro está, no podemos dar nada por sentado hasta que tengamos la oportunidad de probar a fondo los primeros equipos que contarán con estos microprocesadores. Eso sí, podemos estar seguros de que este segmento de mercado está a punto de animarse más de lo que preveíamos hace muy poco tiempo.

Sí, ARM y Windows 10 se llevan bien

Y el mérito no pertenece solo a Qualcomm, sino también a Microsoft, como os adelantamos en su momento. Trabajando juntos han logrado que determinados componentes de Windows 10 (algunos de los más importantes, como el núcleo o los controladores de dispositivo) se ejecuten de forma nativa en los núcleos ARM de los SoC Snapdragon, mientras que otras partes del sistema operativo y las aplicaciones x86 se procesan utilizando el modo de emulación x86 implementado por Microsoft en Windows 10.

Algo a lo que merece la pena prestar atención dada su relevancia es que los equipos Snapdragon que incorporan este último sistema operativo pueden ejecutar tanto aplicaciones construidas sobre la plataforma UWP (Windows Universal Platform), que son las diseñadas específicamente para que corran correctamente en todo el ecosistema Windows 10, como programas Win32, que son los de siempre, los que hemos utilizado tradicionalmente en Windows.

De esta forma, el abanico de aplicaciones que es posible ejecutar en una máquina con SoC Snapdragon y Windows 10 es virtualmente ilimitado, lo que la coloca en este escenario en igualdad de oportunidades frente a los equipos que incorporan un microprocesador x86 de Intel o AMD.

Qualcomm, RISC y una autonomía de hasta 25 h

A diferencia de los microprocesadores x86 de Intel y AMD, que utilizan una arquitectura de tipo CISC (Complex Instruction Set Computer), los Snapdragon de Qualcomm recurren a una arquitectura RISC (Reduced Instruction Set Computer). La principal diferencia entre ambos modelos de diseño consiste en que ARM utiliza un conjunto de instrucciones relativamente sencillo, y, por tanto, no muy extenso, mientras que CISC sigue una filosofía de diseño opuesta que se caracteriza por contar con un conjunto de instrucciones muy amplio.

La divergencia de estos dos enfoques provoca que el número de transistores que es necesario utilizar en el proceso de fabricación de un microprocesador RISC sea netamente inferior al de un chip CISC. Aunque, lógicamente, la cantidad total de transistores no depende únicamente de la arquitectura utilizada, sino también de otras características de cada microprocesador, como son la complejidad de su microarquitectura o el número y tamaño de las memorias caché, entre otros factores.

Los procesadores RISC usan un conjunto de instrucciones reducido, mientras que los CISC recurren a uno mucho más extenso

La mejora constante de las tecnologías de integración, o litografía, introducida por los fabricantes de microprocesadores permite que el consumo de estos chips se reduzca aunque se mantenga el mismo número de transistores. Pero si comparamos dos chips con distinta arquitectura, uno CISC y el otro RISC, fabricados con la misma tecnología de integración y concebidos para ser integrados en un mismo tipo de dispositivo, lo natural es que el RISC incorpore una cantidad de transistores muy inferior al CISC.

Buscando la máxima eficiencia

El consumo de un microprocesador está en gran medida condicionado por el número de transistores que incorpora, aunque hay otras características que también contribuyen de una forma importante a reducir su consumo, al margen de la arquitectura que utiliza. Una estrategia utilizada habitualmente por los diseñadores de microprocesadores consiste en, grosso modo, desactivar aquellas unidades funcionales y elementos del SoC que no están siendo utilizados en un instante determinado, lo que, obviamente, contribuye a ahorrar energía.

En cualquier caso, a pesar de los matices que acabamos de repasar y de las distintas estrategias abordadas por los fabricantes de procesadores, lo más llamativo en el escenario que nos ocupa es que los SoC con arquitectura ARM suelen consumir sensiblemente menos que los que recurren a la arquitectura CISC. De ahí que hayan tenido tanto éxito en el mercado de los dispositivos móviles, como los smartphones y las tabletas.

Qualcomm es plenamente consciente de que sus chips Snapdragon cuentan con esta ventaja competitiva al ser comparados con los chips x86 de Intel y AMD, por lo que cabe esperar que su desembarco en el mercado de los convertibles y los ultraligeros nos depare unas autonomías muy superiores a las que estamos acostumbrados. Pero, ¿en qué medida serán superiores? Según Qualcomm, los equipos que incorporan sus SoC y Windows 10 nos ofrecerán una autonomía de hasta 25 horas, aunque esto no significa que todos los dispositivos alcancen esta cifra.

Aun así, es evidente que, si la llegada de los primeros convertibles y ultraligeros confirma esta promesa, la mejora frente a lo que tenemos hoy en día en lo que concierne a la autonomía será muy notable. Es en este terreno en el que Qualcomm tiene un as en la manga, pero no debemos pasar por alto que, el hecho de que sus SoC consuman menos energía y disipen menos calor, también tiene otras implicaciones.

Y es que cabe esperar que algunos de los equipos con Windows 10 que incorporarán un SoC Snapdragon sean más finos y estilizados que los modelos similares con chip de Intel o AMD. Eso sí, tendremos que esperar para comprobar si los fabricantes de ordenadores realmente aprovechan esta característica y le sacan partido en sus diseños.

Como colofón a todo lo que acabamos de ver podemos concluir que, sobre el papel, los convertibles y ultraligeros con SoC Snapdragon parecen ser muy atractivos para aquellos usuarios que, ante todo, necesitan una máquina que cuente con una autonomía lo más dilatada posible. Un apunte más: los SoC Snapdragon 835 incorporan un módem x16 4G LTE y WiFi 802.11ac 2x2 MU-MIMO, por lo que los dispositivos que contarán con este chip estarán a la última en conectividad.

Intel quiere dar el do de pecho en rendimiento

Ayer mismo os contamos que Intel y AMD han comenzado a colaborar para poner a punto los nuevos microprocesadores Intel Core con lógica gráfica Radeon RX Vega M. Su objetivo está muy claro: colocar en el mercado un producto capaz de aunar el rendimiento de un procesador Intel Core i5 o i7 con TDP de 45 vatios y hasta 4,2 GHz, y la potencia de la lógica gráfica Radeon, que oscilará entre 2,6 y 3,7 TFLOPS en operaciones de precisión simple. Ahí es nada.

Aunque estos chips han sido concebidos para ser integrados en convertibles, portátiles convencionales, ultraligeros y mini-PC, parece poco probable que puedan competir en términos de autonomía con las propuestas similares que se decantarán por un SoC Snapdragon (lo confirmaremos tan pronto como tengamos la oportunidad de analizar en nuestro laboratorio las primeras unidades de estos equipos).

La lógica gráfica de los procesadores Intel Core con VPU Radeon RX Vega alcanzará los 3,7 TFLOPS en operaciones de precisión simple

Aun así, los nuevos Intel Core con lógica gráfica Radeon RX Vega M destacarán, de eso no cabe duda, por su rendimiento global, y, probablemente, también por una relación rendimiento/vatio muy interesante. Esto significa que, sobre el papel, se consolidarán como una propuesta muy atractiva para aquellos usuarios que quieren hacerse con un convertible o un ultraligero cuya potencia, aun sin rivalizar con la de un PC de sobremesa de gama alta o un equipo para jugones, les garantice una enorme flexibilidad a la hora de ejecutar aplicaciones.

Y es que es en el escenario en el que es necesario recurrir a uno de estos equipos para ejecutar aplicaciones de diseño gráfico, retoque fotográfico, infografía, o, sencillamente, juegos, en el que los ordenadores equipados con uno de estos microprocesadores deberían brillar.

Eso sí, un factor que no debemos perder de vista es su precio. Aún no lo conocemos, pero es evidente que su aceptación dependerá en gran medida de la diferencia de precio existente entre los equipos dotados de uno de estos nuevos microprocesadores y sus competidores, especialmente de los chips de los que vamos a hablar a continuación.

Ryzen Mobile: la apuesta de AMD

La estrategia para 2018 de Qualcomm e Intel en el mercado de los convertibles, ultraligeros y mini-PC está claramente afianzada, como hemos visto. Y AMD no puede quedarse atrás, algo que, obviamente, nos beneficia a nosotros, los usuarios. Y es que, como os contamos hace unas horas, la compañía de Sunnyvale ha presentado nuevos modelos de las APU pertenecientes a las familias Ryzen Mobile y Ryzen PRO Mobile, que son sus propuestas para equipos portátiles de consumo, la primera, y profesionales, la segunda.

Las nuevas APU representan un paso más por parte de AMD hacia su consolidación en un mercado en el que los primeros microprocesadores Ryzen Mobile demostraron ser una opción muy sólida. Y el futuro para esta compañía pinta muy bien si tenemos en cuenta que AMD planea introducir la litografía de 7 nm en sus próximos Zen 2 y 3, aunque en principio tendremos que esperar hasta 2020 para poder hacernos con un equipo dotado de una de estas APU.

AMD espera dar un paso hacia delante importante cuando introduzca la litografía de 7 nm en Zen 2 y 3, probablemente en 2020

En cualquier caso, lo que nos interesa ahora es que las APU Ryzen Mobile y Ryzen PRO Mobile cuentan con lógicas gráficas Radeon Vega similares a las que podremos encontrar en breve en los equipos que se decantan por chips Intel Core con lógica gráfica Radeon RX Vega M. De aquí podemos concluir que, a priori, competirán de forma directa en el segmento de mercado de los convertibles y ultraportátiles de alto rendimiento, mientras que los equipos con SoC Snapdragon deberían desmarcarse en el segmento de equipos con muy elevada autonomía.

Todo lo que hemos abordado en este post puede deducirse de la información de la que disponemos, y también de nuestra experiencia con los dispositivos que hemos probado de estos tres fabricantes durante los últimos años. Aun así, por supuesto, no podemos dar nada por sentado hasta que las primeras unidades de esta nueva generación lleguen a nuestro laboratorio y tengamos la oportunidad de probarlas a fondo.

Casi listos para desembarcar

Los primeros en llegar serán, probablemente, los nuevos convertibles Envy x2 de HP y NovaGo de Asus, que Qualcomm y Microsoft dieron a conocer hace un mes en el evento que celebraron en Hawái. No obstante, estos equipos no incorporarán un SoC Snapdragon 845, que, como sabéis, será el próximo tope de gama de esta firma, sino el Snapdragon 835.

Aun así, su llegada será muy interesante porque nos permitirá anticipar con mucha precisión qué nos depararán los equipos que contarán con los nuevos Snapdragon 845, que, según Qualcomm, aterrizarán a principios del segundo semestre de este año.

Por otra parte, se espera que los primeros ultraligeros y convertibles equipados con los nuevos Ryzen Mobile y Ryzen PRO Mobile de AMD desembarquen en el segundo trimestre de 2018, por lo que se verán las caras con los primeros equipos con SoC Snapdragon 835, y, poco después, con las propuestas con Snapdragon 845 debido a que parece que llegarán al mercado en un lapso de tiempo relativamente breve.

El tercero en discordia en este segmento de mercado, Intel, también está preparando el aterrizaje de las primeras propuestas equipadas con sus nuevos Intel Core acompañados de las GPU Radeon RX Vega M. Como os hemos contado, la compañía de Santa Clara ya ha presentado sus nuevos NUC con Radeon RX Vega, que, al parecer, estarán disponibles a lo largo de la próxima primavera.

Este anuncio nos permite intuir que los primeros convertibles, portátiles y mini-PC equipados con los nuevos Intel Core con Radeon RX Vega M llegarán al mercado en una fecha muy próxima a la de sus rivales de Qualcomm y AMD. Toca seguir atentos.

En Xataka | Es oficial: Microsoft confirma el soporte de Windows 10 y aplicaciones x86 sobre ARM de la mano de Qualcomm

Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com

VER 18 Comentarios

Portada de Xataka