Hasta hora lo más habitual ha sido encontrarnos con PDAs cuya pantalla es más alta que ancha, al contrario de los monitores de ordenador, lo que, a veces, descoloca un poco pues no estamos acostumbrados a este tipo de orientación. Si preferimos la clásica, podemos optar por Acer n300, una PDA con una pantalla de 3.7 pulgadas que ofrecen resolución VGA a 640x480.
Está gobernada por Windows Mobile 5.0 corriendo sobre un procesador a 400 MHz. Incorpora 64 MB de RAM y 128 de ROM, con conectividad por Bluetooth, Wi-Fi y USB. Su tamaño es de 11x7 centímetros y su peso de 135 gramos, que no está mal para un aparato que es casi más un portátil que una PDA.
Vía | Gizmodo.