Aunque los navegadores GPS más habituales están pensados para funcionar dentro de nuestro coche, existen otros modelos diseñados para distintas situaciones: para motos, para peatones, para caminar por la montaña,... El Garmin Edge 500, en cambio, está enfocado a los que hacen rutas en bicicleta.
Ahora bien, no se trata de un navegador GPS convencional, pues su función no es la de indicarnos la ruta, sino la de recoger una serie de datos acerca de esta y de nuestros ritmos vitales. Así, podremos conocer el tiempo que llevamos rodando, la distancia que hemos hecho, la velocidad o la altura que hemos ascendido y descendido.
Pero juntándolo con otros sensores, también irá almacenando la potencia desarrollada o nuestro ritmo cardíaco, además de las calorías consumidas. Para ello podremos usar unos sensores de Garmin, que se pueden adquirir junto al dispositivo, u otros, siempre que sean compatibles con ANT+.
La autonomía del Garmin Edge 500 es de 18 horas y se recarga a través de un puerto USB, mediante el cual también podemos enviar los datos a nuestro ordenador. Se pondrá a la venta durante este otoño a un precio de 250 dólares si lo queremos sin accesorios o de 350 dólares con un par de sensores.
Vía | Electronista.
Más información | Garmin.