Hoy toca analizar el Grab'n'Go CM3PVR, un disco duro multimedia de 500 GB que hemos estado probando durante un par de semanas y que puede convertirse en un buen compañero en nuestro salón.

Los discos duros multimedia llevan ya un par de años en las estanterías de las tiendas, aunque en general no han tenido un gran éxito y seguramente algunos de vosotros desconozca su existencia. Son dispositivos que reciben la señal de la antena de televisión, y permiten grabarla en formato digital directamente en el disco interno del dispositivo. A su vez, permiten reproducir el contenido almacenado (que podemos ir modificandolo a nuestro antojo con simplemente conectar el disco al ordenador), y no sólo vídeos: fotografías (perfecto para quedadas familiares) y música suelen ser los contenidos más usuales.

El Grab'n'Go CM3PVR, con 500 GB, tiene un montón de posibilidades basadas en tres tipos de almacenamiento: disco duro interno, puerto USB y slot para memorias flash compatibles, y un montón de diferentes formas de conexión con la televisión y/u otros dispositivos: por antena (señal analógica o digital), a un vídeo, una consola...

Es interesante saber que el CM3PVR tiene un montón de salidas (audio/vídeo con adaptador de euroconector incluido, componentes y S-Video), aunque se echan en falta salidas de vídeo HD, que no tiene ninguna. Las diferentes posibilidades de conexión están bien explicadas en el manual, totalmente en castellano y en otros idiomas europeos.

El dispositivo contiene un disco duro de 3.5 pulgadas, con lo que la las dimensiones de la carcasa son ligeramente superiores. Dispone de una serie de botones en la parte frontal que se iluminan (en azul o en rojo, dependiendo del estado) y tienen unas funciones asociadas, aunque es mucho más sencillo utilizar el mando a distancia, que a su vez dispone de un abanico de posibilidades mucho más amplio.

Instalación

La instalación es algo compleja. Son muchas las posibilidades que el dispositivo permite, muchos cables contenidos en el paquete, y a su vez muchas las posibilidades de conexión con otros dispositivos de televisión (DVDs, vídeos VHS, sintonizadores digitales...). Lo bueno es que en el manual todas las posibilidades vienen muy bien explicadas.

Una vez instalado y conectado a la corriente, hay que iniciar un configurador para presintonizar los canales, las salidas de vídeo y demás. En este punto ya se vislumbra el primer problema: el mando a distancia tarda en responder, como si el firmware del aparato fuese lento en comparación con la velocidad de nuestras pulsaciones. Es como un retardo de un par de segundos, pero resulta muy molesto, más aún a la larga.

Uso

Una vez ejecutado el paso de la configuración, el menú principal es bastante sencillo y básico, con seis opciones muy fáciles de entender. A su vez, mediante el mando a distancia podemos acudir a las acciones algo más avanzadas como 'grabar', algo tan simple como pulsar el botón 'REC', el único de color rojo en todo el mando. Para hacernos una idea, el formato de grabación predeterminado es MPEG4, y ocupa unos 2 GB cada hora de grabación (720x576 píxeles a máxima calidad) permitiendo un total de 228 horas en los 500 GB de disco, dato que puede aumentar si seleccionamos otra de las 2 calidades que permite.

A su vez, este disco multimedia permite programar las grabaciones del futuro de forma bastante sencilla, mediante una interfaz a modo de calendario en la que pondremos el canal a grabar, día, hora de inicio, hora de fin de la grabación, y calidad que deseemos. Una vez hecho este paso, el resto es automatizado.

Otra opción interesante es la posibilidad de ver el contenido del disco, ya sea vídeo, audio o imágenes. Para ello hay que seleccionar en el menú principal una de las tres opciones que permite (movies, music o photos), y entonces se inicia un visualizador de las carpetas del disco. Se selecciona el archivo a ejecutar, y a funcionar.

También se puede ver el contenido de otras memorias o discos duros externos por USB, o el de una tarjeta de memoria (compatible con SD/MMC/MS), y su funcionamiento es muy parecida exceptuando que hay que pulsar un botón del mando para cambiar de almacenamiento.

La interesante opción de transferir archivos de un ordenador al disco es muy sencilla. Para ello, tenemos que conectar el CM3PVR al ordenador mediante un cable MiniUSB-USB, y el dispositivo funcionará como cualquier disco duro externo. Transferimos los archivos al disco, y listo.

Conclusiones

Desde mi punto de vista, los discos duros multimedia son unos dispositivos perfectos para cualquier salón. Podemos grabar el contenido de la televisión o reproducir en la televisión del salón cualquier otro contenido propio que tengamos en el ordenador, lo cual es perfecto, por ejemplo, para reuniones familiares en las que queramos enseñar las fotografías de nuestras últimas vacaciones.

Sin embargo, este Conceptronic Grab'n'Go CM3PVR tiene algunos fallos, como no podía ser de otra forma. El principal, y bastante grave, es el retardo que el mando a distancia ofrece de apenas dos segundos, pero que puede llegar a ser muy, muy cansino.

Otro aspecto que se echa en falta son las conexiones HD, totalmente desaparecidas en el dispositivo. A día de hoy y con el auge que tienen los televisores HD, no se termina de entender cómo no existen estas conexiones. Un HDMI no estaría nada mal.

Por lo demás, el disco funciona perfectamente, los menús son sencillos y las posibilidades, amplísimas. El precio, de unos 250 euros, no es tan alto como puede ser un reproductor/grabador, y además este Grab'n'Go tiene una enorme capacidad. Juzgad vosotros mismos.

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