Tras haber oído tantas veces hablar de ella hace tiempo me compré una libreta Moleskine, y la verdad es que no me ha defraudado. Cómoda y elegante, además de fácil de transportar. Lo que no pensaba es que también sirviera como caja para un disco duro externo.
Es en lo que la ha convertido un manitas, después de darse cuenta que su disco externo y la libreta tenían un tamaño parecido. Hombre, la verdad es que prefiero utilizarla como libreta, pero no se puede negar que es original, además de no muy complicado de construir.
Vía | Pocket Lint.