La presencia de niños con canales propios en YouTube ya no es una novedad. Algunos de forma más humilde, otros convertidos en estrellas para un público que se cuenta por cientos de miles. En algunos casos, no solo ellos acaparan el protagonismo.
A veces, toda la familia es quien forma parte de un show que puede desde suponer unos pocos euros a final de mes para el hogar hasta llegar a sostener la economía doméstica. En cualquier caso, son proyectos que implican a todos. Son las familias convertidas en un reality de YouTube.
Partos y confesiones frente a la cámara
Nohemí García es quien está al frente del canal Familia Carameluchi. Aunque lo inició ella a nivel personal y con su propio nick inicial, hoy cuenta las peripecias de toda su familia, compuesta por su marido, Fran, sus dos hijos, Elaia y William (nacido cuando el canal ya estaba en marcha) y ella misma. Todo para sus 772.000 suscriptores.
Sus primeros vlogs contaban la vida de la familia en Estados Unidos, más tarde se desplazaron a España y después acabaron en Reino Unido. Durante los cuatro años de vida del canal, los Carameluchi han mostrado con todo lujo de detalles su día a su día, incluyendo cuando Nohe rompió aguas antes de dar a luz a William y la cámara enfocó al agua turbia en el suelo para luego ir al hospital en coche. No hay muchas cosas que se queden fuera del canal.
Algunos otros vídeos del canal que sirven como ejemplo de esta transparencia total:
- � ¡ESTAMOS en CRISIS! & ESTO resume NUESTRA VIDA...
- WILLIAM está muy RARO � & RECONOZCO mi ERROR + COMPRAS
- ¡SUSTO de MUERTE! � & CRISIS de LACTANCIA � & RECUPERANDO TRADICIONES �
- ¡HE ROTO AGUAS! | cámara oculta y BROMA a mi marido
- ¡LA BROMA MÁS BRUTAL A ELAIA! | SUSTO + CÁMARA OCULTA
En una línea parecida está Verdeliss, el pseudónimo de Estefanía Unzu, una pamplonesa que hace público el día a día de su familia, compuesta por ella misma, su marido Aritz, y sus seis hijos. El primero, Aimar, lo tuvo a los diecinueve años.
Sus vídeos son principalmente vlogs en los que cuentan los detalles de cotidianidad familiar. Los ocho haciendo la compra, cada uno haciendo los deberes, a una niña se le ha caído un diente de leche, nos hemos cambiado de casa, una broma nos sale mal, nos ha parado la Guardia Civil.
Hablando de monetización
La relación de Verdeliss -1,1 millón de suscriptores- con la monetización de sus vídeos es especial. Los vídeos patrocinados directamente por una marca suelen ser muchísimo más rentables que andar dependiendo de los anuncios que coloque YouTube, además de que se tiene asegurada una cantidad que no depende de tantas variables como con la publicidad tradicional. Es lo que nos han confirmado varios youtubers en el pasado, reacios a hablar de cifras concretas públicamente como suele ocurrir con los youtubers y con prácticamente cualquier profesión.
Hace unos años, cuando su alcance empezó a ser realmente grande, algunas marcas empezaron a interesarse por estos vídeos patrocinados. Verdeliss hizo un ejercicio de transparencia: antes de aceptar ningún acuerdo, lo consultó a sus suscriptores, les dijo que no sabía bien qué hacer y pidió que comentaran con su opinión al respecto. La campaña salió adelante, la monetización del canal se disparó y no solo dio cobijo a esos vídeos, también se convirtió en la imagen de la campaña de la vuelta al colegio para Carrefour.
En una ocasión, Verdelis habló en una entrevista con Mi bebé y yo sobre su opinión respecto a la exposición pública de su familia:
"No creo que [la exposición pública de la imagen de sus hijos] vaya a afectar negativamente. Al final lo que nosotros publicamos son momentos cotidianos súper naturales y espontáneos que vive cualquier familia de hoy en día. No siento que haya nada por lo que ellos tengan que avergonzarse. A parte que los estamos criando en la tolerancia y el respecto y para que sean lo que son con lo que tienen."
Sobre sus vídeos, también dijo que tanto ella como su pareja, Arix, "quieren conservar vídeos con los gestos de sus hijos como lo viven y transmitirlo tal y como ellos lo sienten".

La Familia Balenchana -108.000 suscriptores- es otro ejemplo de familia que lleva la transparencia y la exposición de sus momentos colectivos hasta unas cotas muy altas. Belén, de 53 años, es la madre de la familia. También tiene su propio canal, Belén te cuenta, en el que publica vídeos más personales, tanto suyos en exclusiva como junto a su pareja, Luis. Igualmente muy transparentes, como en una ocasión en la que explicó que se quedó viuda a los 33 años de una relación en la que no era feliz.
Los otros protagonistas de esta familia son Diego y Julia, que ahora tienen 15 y 16 años. Son hijos de Belén, Luis tiene otros tres hijos que no forman parte del canal. Lo que hace especial a Diego es que tiene síndrome de Down, así que el canal también es utilizado para dar difusión a este síndrome y acercarlo a la sociedad a través de vídeos de su cotidianidad, los cuales publican martes, jueves y sábados a las 19.00 h (hora peninsular).
El camino de los Balenchana en YouTube comenzó hace algo más de un año. Se pusieron como objetivo llegar a 10.000 suscriptores en sus primeros 365 días y acabaron multiplicando por diez la meta. Así nos lo cuenta la propia Belén:

"Empezamos por cambiar la imagen de familia perfecta que hay en los vlogs de YouTube. Nosotros dijimos 'oye, también tenemos lugar aquí'. El padre de los niños no vive con nosotros, yo tengo otra pareja, mi hijo tiene síndrome de Down... Queremos que la gente vea que se puede ser diferente y ser feliz".
Otro motivo para empezar a publicar vídeos fue la idea de "que haya un canal familiar sin tacos. Mucha gente dice palabrotas incluso con niños al lado. Nosotros no, ni en los vídeos ni en el día a día".
Para Belén, los vlogs en YouTube por parte de familias aportan la sensación de cercanía, de contacto directo. "En la tele vemos gente que no tiene nada que ver con nosotros, pero luego cuando vemos en YouTube a alguien mucho más afín, gente normal como nosotros, con quien además podemos contactar vía correo o por los comentarios...". El lado negativo, los comentarios que a veces se vierten en los vídeos. "Hay que leer cada burrada... Julia y yo llevamos eso un poco mal". ¿Y lo mejor? "Sobre todo, cuando gente de todo el mundo nos escribe diciendo que les encanta ver a Diego, o que han tenido algún familiar con discapacidad y Diego les recuerda a él".
El nivel de transparencia varía según el canal, en alguno incluso podemos ver momentos delicados durante un parto o confesiones personales
Con un formato bastante profesionalizado (grafismos, edición, periodicidad) está también la Familia Coquetes, que publica un vídeo nuevo cada día de lunes a viernes a la misma hora, las 18:00 h (hora peninsular). El nombre viene de 'Just Coco', el pseudónimo de Verónica Díaz (28 años), la madre, que junto a su marido Javi y su hija Gala forman la plantilla de este canal. Viajes, momentos cumbre del crecimiento de su hija trucos de maternidad y crianza, bautizos, reflexiones...
Hay vídeos incluso de momentos especialmente sensibles, como cuando Verónica se grabó a sí misma llorando tras una caída en la que se golpeó en el vientre mientras estaba embarazada de Gala. "No ha sido un golpe muy fuerte, me he dado en el lado, creo que la bolsa se ha roto, no paraba de salirme agua. Voy a ver qué pasa, quería contároslo. Creo que se me ha roto la bolsa, espero que Gala esté bien, soy una liante. Debe ser una fisura, porque me he puesto unas braguitas y las he empapado ya".
El parto (que también fue grabado en algunos tramos y publicado después), por suerte, salió bien. Aquel vídeo superó los cuatro millones de visitas, aunque normalmente en el resto de vídeos se cuentan por cientos de miles, igual que su número de suscriptores: 369.000.
La inmensa mayoría de vídeos son variaciones de unos pocos formatos: vlogs, 'challenges' y 'tags'
Un formato similar tiene el canal Escupiendo Purpurina, en el que muestran las andanzas de lo que ellas mismas llaman la 'Familia Bichete'. "Retos, challenges, lo que nos apetezca", dicen ellas mismas. A sus 13.000 suscriptores muestran nuevos vlogs varias veces a la semana. Las protagonistas son Maribe y Danna, madre e hija, junto a al bebé de Danna, de siete meses.
Es un canal satélite de El Mundo de Mia, que cuenta con 68.000 suscriptores. La única diferencia es que en este se da más protagonismo a la pequeña, mientras que en el otro los vídeos se centran más en Danna y Maribe.
Los Mundos de Nico es un canal que inicialmente estaba centrado en Nico, el hijo de una pareja catalana, David y Vanesa, pero la presencia de sus padres en los vídeos, especialmente la de David, fue intensificándose hasta prácticamente equipararse a la del hijo. Vlogs, challenges y aperturas de sobres de cromos a cuatro manos son lo que más abunda en este canal. Casi 350.000 suscriptores
Cotilleando.com
Este subtítulo no es una concesión literaria para hablar del cotilleo que se produce online: es una web real en la que prácticamente cada youtuber, cada canal, y en este caso, cada familia, tiene detrás a toda una legión de comentaristas que opinan y debaten sobre cada detalle que gira en torno a los protagonistas de esos canales.
Los canales familiares no se salvan de cierta audiencia compartida con la de la prensa rosa: sus andanzas también son fruto de comentarios y opiniones
Así, podemos ver cómo entre unos y otros opinan sobre la relación de Danna y su madre, sobre el día a día de Verdeliss o sobre las finanzas de los Carameluchi. Son solo unos pocos ejemplos, pero nadie se queda sin su conversación.
Esta web no es el único punto de encuentro. Los foros de Vogue, por ejemplo, son otro nido para el comentario acerca de estas familias. La exposición a la que se someten conducen a estos comentarios, no solo en los de su propio canal, que a la postre pueden moderar.
Sobre esto hemos preguntado a Alberto Soler, psicólogo especializado en educación y crianza que también tiene solera en YouTube: los 20.000 suscriptores de su canal Píldoras de Psicología lo corroboran.

"Muchas veces compartimos aspectos de nuestra vida en la red sin pararnos a pensar en las consecuencias que puede tener a corto, medio o largo plazo. Y pensar en esto puede ser más importante todavía cuando estamos compartiendo aspectos privados de la vida de otra persona, aunque sea nuestro propio hijo.
Por lo general lo que se comparte suele ser bastante “inofensivo”, pero en algunos casos se llegan a compartir imágenes o comentarios que en un futuro a nuestro hijo quizá no le gustaría ver, o que podrían resultar vergonzosos o humillantes. En todo caso, sean los contenidos que sean, la pregunta es, ¿es realmente necesario compartirlo?, ¿qué aporta de positivo al menor?"
La clave a la hora de exponer detalles de la cotidianidad de menores de edad, aún sin madurar, está pensar en el futuro, en el momento en que crezcan. Todos hemos vivido situaciones de adolescentes o jóvenes que se avergüenzan cuando alguien rescata un álbum con sus fotos del pasado o un vídeo. "Esto viene a ser algo parecido, pero en lugar de enseñárselas a familiares o vecinos, se las están enseñando a cientos o miles de 'amigos y seguidores'", dice Soler.
Para el psicólogo Alberto Soler, el "peligro" principal de estos canales está en si en un futuro el niño se avergüenza de esos contenidos del pasado expuestos a cientos de miles de personas
Sobre qué beneficio puede haber para los niños que forman parte de estos canales, Soler lo tiene claro: "en la mayor parte de los casos el mayor beneficio es que no haya daño, es decir, no le veo un claro beneficio para el menor". En todo caso, para él el beneficio puede llegar a través de la monetización que logran los canales mayores.
Subraya que en el caso de los Balenchana hay un matiz que sí puede aportar un beneficio, tanto para la familia como para el menor: "al tratarse de una familia con un hijo con síndrome de Down, el compartir su vida en un vlog está dando visibilidad a una realidad que no es muy conocida, y pueden contribuir a la aceptación e integración de estas personas, así como ayudar a otras familias en esta misma situación".
Desde Xataka nos pusimos en contacto con todas las familias que aparecen en este reportaje para conocer su opinión al respecto y, excepto los Balenchana, ninguno de ellos nos ha respondido. Verdeliss lo hizo en primera instancia pero terminó dejando de responder.
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19 comentarios
cefalopodo
Vidas patéticas elevadas al extremo, las de los creadores y las de la gente que lo ve.
aswered
¡¡¡Ay dios!!! ¿ Pero a qué niveles estamos llegando ya? . Luego nos quejamos de la falta de privacidad , que si las empresas nos tienen "fichados"....para que luego monten este tipo de espectáculos en Youtube y ellos mismos sean los propios causantes de esa falta de intimidad, privacidad o llámalo X.
Yo que pensé que con el Salvame Deluxe ya habíamos caído bajo en este país, ahora aparece gente de este tipo. Lo peor es que la gente lo mira.
darknast
Y esto señoras y señores es internet en 2017, un espectaculo mas lamentable que Salvame Deluxe y Gran Hermano juntos.
daniel3241
Jamas vería un canal de estos porque me parece lo mas penoso que ha salido de Internet. Por cosas como esas son por las que querria que YouTube hiciera mas estricta la monetización y solo permitiese que se lucren los canales que fomentan cosas como la ciencia, la tecnologia.
jaimejames
Hay un par de mexicanas que viven en Japon que muestran a sus hijos y cuentan su dia a dia, situaciones muy comunes que vivimos todos en nuestros paises de origen, es un poco de ¿que les ve la gente si lo unico extraordinario es que estan en otro pais?
Estan kira sensei y Japatonic que hablan y muestran otros aspectos de Japon, y eso si vale la pena verlos porque hablan y muestran otro pais, pero como no muestran su vida privada no tienen tantas vistas como deberian.
Youtube se ha convertido en el internet que idiotiza a la gente.
rennoib.tg
No se que clase de sociedad será creada siendo espectadora asidua de esta gente. Las imágenes de los vídeos ya me producen nauseas con sus clickbait sin sentido y sus exageraciones de situaciones que todos vivimos.
Famosos 2.0, no han logrado nada pero tienen miles de followers y likes.
Usuario desactivado
"Así, podemos ver cómo entre unos y otros opinan sobre la relación de Danna y su madre, sobre el día a día de Verdeliss o sobre las finanzas de los Carameluchi."
Que asco, he potado al leer esto. Malditos carameluchi...
manuel.serranofernan
madre mía, si hay algo que disfruto es de mi vida privada con mi familia alejado de gente que no conozco y no soy un ermitaño, me encanta la tecnología pero intento cada vez mas tener a raya la vida privada.
arabulie
La parte de Verdeliss tiene varios errores.
1º: Es Aritz, no Arix.
2º: Es Estefanía Unzu, no Urzu.
3º: No se han afincado recientemente en Madrid sino todo lo contrario. Vivieron varios años en Madrid pero ya hace mucho que volvieron a Pamplona y de hecho están construyendo su nueva casa allí.
asanchezg
La verdad que no se que gracia tiene ver a familias haciendo cosas de su vida cotidiana. Para eso ya tienes a tu familia y si no la tienes y tanto te interesa fórmala.
De sobras son conocidos los problemas con los que crecen las estrellas infantiles en el mundo del cine y la televisión. Youtube no va a ser una excepción, y ojalá no pase, pero con el tiempo veremos a estos chavales en las portadas de las revistas de cotilleos del futuro aireando trapos sucios.
ohlala908
Me parecen patéticos tanto la gente que ve estos vídeos como los "creadores" (coger una cámara y grabarte haciendo la compra no es crear nada, pero bueno...)
Dejando de lado la clara falta de privacidad a la que ellos se exponen, me llama más la atención el hecho de que cuando crezcan, esos "youtubers bebés" lo van a pasar MUY mal. Si la gente "corriente" ya sufrimos bullying por un mal corte de pelo, unas deportivas feas o cualquier chorrada, estas criaturas, que han estado expuestas al público desde antes de nacer, van a tener más problemas que Macaulay Culkin. Por mucho que eduques a tus hijos en el respeto y la tolerancia (lo cual apoyo 100%), no quita deje de haber abusones que van a usar cada mínimo detalle para hacer su vida miserable.
Reconozco que alguna vez he pecado (y picado) y he visto alguno de los vídeos. Sobre todo de la familia coquete, a los cuales empecé a ver porque me parecían una pareja joven de recién casados viviendo en Málaga, etc etc (identificable sus primeros vídeos). Sin embargo, fue parir (aunque el embarazo ya fue un poco tortura también) y se convirtió en hablar de la bebé 24/7. Qué asquete me dan esos padres que una vez tienen al bebé parece que dejan de ser persona.
En un vídeo de preguntas y respuestas, comentaron que si ella, en el futuro (claro, si lo dice cuando tenga 4 añitos no le harán caso) decide que no quiere salir más, respetarán su opinión. ¡Ja! Su canal se ha disparado desde que parieron y no creo que vayan a parar (voluntariamente) de recibir esos jugosos ingresos mensuales sólo porque se ríen de la nena en el cole porque una vez su madre subió un vídeo bañándola de bebé y quejándose de tener que cambiar el agua porque "había un zurullo flotando". Y eso sin contar que en el mismo vídeo ya hacían mención a tener más hijos (lo que significa €€€ dinero, dinero!)
Igual que en EEUU ya quitaron la custodia a unos padres por los daños morales que les causaban sus padres, algo me dice que en unos años tendremos bastantes casos de estos en España. Empiezan por enseñarte cómo cocinar pollo o cómo tienen decorado el salón, y acaban enseñando al mundo detalles TAN privados que no sólo hacen pensar a sus subscriptores que son de la familia (genial estrategia de marketing, por cierto) sino que sabes sus horarios, donde viven, trabajan... (aterrador). Y la sobreexposición, tarde o temprano, acaba pasando factura.