Para mi próxima visita a Madrid ya tengo seleccionado el hotel. Se llama Puerta de América. Y lo he escogido por dos plantas en concreto: la 10, obra de Arata Isozaki, y la 8, de la escocesa Kathryn Findlay.
La primera elección es a nivel personal, mientras que la planta 8 la escojo por motivos de trabajo para con este blog de gadgets.
Y es que la arquitecta ha pretendido en esta planta interactuar con sus huéspedes.
Para ello, en colaboración con el diseñador de iluminación Jason Bruges, ha elaborado un sistema que responde al paso de las personas, cambiando las paredes de color dependiendo de la ropa que lleven los huespedes, todo ello gracias a una instalación con leds de colores y proyección de sombras.
Vía | Artilugios.
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