Tal y como me ocurió con la alfombrilla de gel, al final terminaré comprando uno de estos dispositivos que permiten recargar el ratón con sólo usarlo sobre la superficie de la alfombrilla.
Y es que lo mio con los ratones inalámbricos es una verdadera odisea.
Esta noche volveré a intentarlo, pero odio quedarme sin el ratón en los peores momentos. Menos mal que tengo uno con cable alerta las 24 horas.
Si no me funciona correctamente, probaré a buscar uno de estos Sanwa Supply, que se conecta al puerto USB y de esos me sobran bastantes en el ordenador.
Vía | gadgetoblog. En Xataka | Ratón inalámbrico sin batería ni pilas.