Ayer nos acercamos hasta las oficinas de Sonos en España para probar de primera mano el Sonos Play:3, último especimen de esta familia de altavoces inalámbricos. En el pasado Mobile World Congress ya os hablamos de las virtudes del ZonePlayer S5, un contundente equipo HiFi con la simplicidad de manejo por bandera.
El Play:3 es, por decirlo de alguna manera, el hermano menor del Zoneplayer S5, un pequeñín que, pese a su reducido tamaño de 132 × 268 × 160 y a sus 2.6 kilos de peso es capaz de proyectar un sonido nítido y potente con un ángulo de dispersión realmente bueno.
En el interior del Play:3 encontramos tres altavoces, dos de medios de tres pulgadas y uno de agudos. Cada uno de estos conos está amplificado de forma independiente por amplificadores digitales clase D. Los graves corren a cargo de un radiador pasivo que aprovecha el reducido espacio de la carcasa para proyectar, de manera bastante convincente, las frecuencias más bajas.
Toda la ecualización corre a través de circuitos DSP que también gobiernan la posición del Play:3, que puede instalarse en horizontal o en vertical sin que el sonido varíe lo más mínimo. En la parte trasera tan sólo encontramos una toma de red que da la alternativa a la conexión WiFi, el auténtico alma del sistema Sonos.
El lanzamiento del Sonos Play:3 coincide con la actualización del software de control para PC, Mac, IOS y Android que, entre otras funciones, ahora permite configurar los altavoces para que actúen como canales izquierdo y derecho de un único sistema estéreo. El precio del Play:3 es de 299 euros, un listón muy bajo si hablamos de equipos HiFi, sobre todo teniendo en cuenta que basta con este pequeño dispositivo para llenar de buen sonido una habitación grande.
Si lo que estamos buscando es equipar el audio de una casa entera, el sistema Sonos es escalable y podemos ir añadiendo nuevos altavoces mediante un emisor propio, el Sonos Bridge, que se conecta directamete al Router WiFi. El Sonos Bridge cuesta 49 euros.
Más información | Sonos
Ver 5 comentarios