Puede resultar muy raro el título de este artículo, la cosa es así de sencilla.
En el mercado ya existen sensores que se sitúan en los parachoques de los coches, tanto traseros como delanteros, y que dependiendo la distancia que haya entre tu coche y el coche o pared que haya situado junto a nosotros pitan con una frecuencia mayor o menor para informarnos.
El Garage Parking Sensor es de gran utilidad para los que tenemos poca experiencia conduciendo, y aun nos cuesta aparcar en determinados sitios. Envía una señal de ultrasonidos que dependiendo del tiempo que tarde esta en volver, te lo dice mediante una luz en un semáforo que tienes que tener a tu vista. Muy sencillo: verde, continúa con la marcha, amarillo, con cuidado, y rojo, frena. Funciona con tres pilas AA, y el aparato se apaga a los pocos segundos de ver que no hay movimiento.
Su precio es una minucia comparado con lo que puede costar añadir la opción a un coche nuevo, por 30 euros ya lo tendremos y comenzaremos nuestras clases para aprender a aparcar.
Vía | Gizmología Más información | Gadgets.co.uk