En 2001, Jimmy Wales y Larry Sanger revolucionaron el concepto de enciclopedia que existía hasta ese momento al crear una herramienta de conocimiento libre, en la que cualquier usuario podía contribuir con contenido, y completamente gratuita: Wikipedia. Tal fue su impacto que pronto desbancó a otros proyectos con más experiencia y recursos que lanzaron en aquellos años sus versiones web, como la Encarta de Microsoft.
Wikipedia se consolidó rápidamente en internet porque su filosofía se adaptaba perfectamente a la naturaleza del medio: gratuita, rápida y podía ser actualizada en el acto por cualquier usuario. Sin embargo, casi 20 años después de su nacimiento y algo más de diez desde que se afianzase como el mayor repositorio de conocimientos de la red, esa idiosincrasia que le dio la primacía amenaza con dejarla obsoleta.
Y es que la enciclopedia libre está teniendo problemas para adaptarse al formato estrella de internet en estos momentos, el vídeo. “Nos hemos dado cuenta de que Wikipedia se está quedando atrás en cuanto al formato vídeo, lo que no quiere decir que el texto y las fotografías no sean útiles, pero hoy día hay un cierto público, quizás el más joven, que busca algo rápido, un vídeo resumen, y no se lo estamos dando”, explica Santiago Navarro, presidente de Wikimedia España, a Xataka.
Los problemas que plantea el formato vídeo a Wikipedia son varios, pero el principal tiene que ver con su filosofía y forma de funcionamiento. La enciclopedia fundada por Jimmy Wales y Larry Sanger se ha basado desde sus orígenes en el aporte de miles de voluntarios, que han redactado más de 56 millones de artículos en 288 idiomas diferentes en menos de 20 años, y de colaboradores vinculados a Wikimedia que se han encargado de editarlos e ir mejorando su calidad y veracidad.
El formato vídeo, sin embargo, es mucho más difícil de gestionar mediante esta filosofía. “El problema es que los artículos van cambiando continuamente, y cambiar el formato vídeo conlleva un gran trabajo. Además, no todo el mundo sabe editar vídeos, es más laborioso y los voluntarios a veces no tenemos las herramientas necesarias a nuestra disposición”, señala Navarro.
Y, aunque en Wikipedia son conscientes de todos estos contratiempos, no hay un plan para solventarlos. “Todo el mundo sabe que las dificultades técnicas son importantes, pero este es un asunto que no se está abordando realmente en Wikimedia”, señala Navarro.
Los vídeos que sí tiene Wikipedia
Pese al mea culpa que entonta el director de Wikimedia España, lo cierto es que Wikipedia dispone de casi 150.000 vídeos, una cantidad que Navarro considera “bajísima” en comparación con los 57 millones de fotografías alojados en Wikimedia Commons, la plataforma que almacena al contenido multimedia de la enciclopedia libre.
Además, esos vídeos sirven, en su mayoría, como mero acompañamiento de los artículos, pero no resumen la información de los textos, que es a lo que están tendiendo las grandes plataformas, los medios de comunicación y la Enciclopedia Británica con su contenido audiovisual.
“En Wikipedia hemos hecho algunos vídeos promocionales así, de forma profesional, pero los realizaron voluntarios. Y con voluntarios es imposible hacer un vídeo de todos o de muchos de los artículos que hay en la enciclopedia”, explica Esteban Zárate, administrador de Wikimedia Commons.
Por lo demás, la mayoría de los vídeos alojados en Wikimedia Commons son animaciones sin audio o breves grabaciones hechas y subidas por los voluntarios. Contribuciones que Zárate agradece porque “si el vídeo tiene buena resolución, aunque esté hecho con un móvil, toda aportación es bienvenida”, pero que Navarro considera insuficiente para una plataforma de la entidad de Wikipedia: “Si no damos a los usuarios el vídeo resumen que necesitan se van a ir a otra parte y vamos a perder a ese público”.
Dificultades técnicas
Además de los problemas derivados de la filosofía del contenido libre y del trabajo voluntario, la introducción del vídeo también conlleva dificultades técnicas importantes para Wikipedia. “Hay muchos formatos de vídeo que son privativos y no se pueden subir a Commons, algo parecido a lo que pasaba hace poco con el audio en MP3, que no era libre, aunque sus autores les hubiesen otorgado licencias Creative Commons”, explica Navarro.
Zárate, además, apunta a la falta del hardware y del equipamiento necesario para poder hacer y editar vídeos en grandes cantidades y con un estándar de calidad aceptable: “Al ser voluntarios no nos dan dinero para comprar el equipamiento, todo tiene que salir de nuestros bolsillos, y eso lo complica todo porque cualquiera no puede hacer ese desembolso”.
Asimismo, Navarro señala que la modificación de los vídeos es mucho más compleja que la de los textos, pues implica la descarga de la pieza, su edición y vuelta a cargar al completo. Y todo ello procurando mantener la coherencia interna de la información que contienen y la misma calidad en los diferentes cortes.
Sin respuestas de la Fundación Wikimedia
Wikipedia no tiene un plan para el vídeo. Los responsables de Wikimedia España se muestran desorientados ante las preguntas sobre el futuro del vídeo en la plataforma. Saben cuáles son los problemas del formato y se plantean multitud de cuestiones en torno a él, pero el silencio de la Fundación al respecto hace que no tengan ninguna respuesta clara sobre las posibles soluciones.
“Ahora mismo estamos inmersos en un proceso global en Wikimedia para redefinir nuestra estrategia, en el que se están revisando tanto Wikipedia como los 11 proyectos hermanos. Estamos hablando de qué pasa en las comunidades y cómo acceden las personas a los contenidos ahora”, explica Virginia Díez, responsable de Comunicación y Comunidad en Wikimedia España.
Pero en esa revisión el vídeo no parece ser prioritario. “Me gustaría tener una solución, pero ahora mismo la Fundación Wikimedia no se está moviendo en ese sentido. La estrategia que estamos redefiniendo es de cara a 2030, y en ella el vídeo debería estar, pero no se está avanzando en ese sentido y nos estamos quedando atrás”, admite Santiago Navarro.
Cabe recordar que la Fundación Wikimedia es la organización matriz de Wikipedia, web que gestiona junto a otros 11 proyectos como Wikinoticias o Wikimedia Commons. Por lo tanto, Wikimedia es el colectivo que administra Wikipedia.
A su vez, Wikimedia España es una organización local independiente asociada a la Fundación Wikimedia, que tiene carácter global. Este tipo de ‘capítulos locales’, así denominados desde Wikimedia, comparten los objetivos de la organización matriz y su misión es apoyarla en la región a la que se adscriben, pero no tienen capacidad de decidir por sí solos en las políticas que afectan a Wikipedia a nivel mundial, como en el uso de los vídeos.
Posibles soluciones
Ante el silencio de la Fundación Wikimedia, los responsables de Wikimedia España aventuran algunas posibles soluciones, pero lo hacen con carácter extraoficial como meras opiniones personales.
“Wikipedia podría organizar cursos de formación abiertos a cualquier voluntario que quiera aportar vídeos, pero no lo está haciendo. Se podrían conseguir alianzas con otras instituciones, con otros proyectos. Se me ocurren colaboraciones educativas, por ejemplo, con estudiantes de comunicación audiovisual, diseño o traducción que contribuyan a mejorar la enciclopedia en su ámbito, pero la Fundación tampoco está trabajando en ese sentido”, explica Navarro.
Zárate, por su parte, apunta que la solución pasa por más medios y más colaboradores: “Necesitamos tiempo y, sobre todo, más voluntarios. Aunque es más complicado procesar vídeos y lleva más tiempo que subir un texto, ahora mismo la posibilidad existe, cualquiera puede editar los vídeos de Wikipedia”.
Sin embargo, Navarro se muestra escéptico con el planteamiento de su compañero de Wikimedia Commons, ya que “esperar que una persona voluntaria vaya a aprender a editar vídeos de forma profesional es quizás esperar mucho”.
¿Cambio de filosofía con los vídeos?
Todas las dificultades, técnicas y relacionadas la idiosincrasia de Wikipedia, llevan a preguntarse si la enciclopedia libre estaría dispuesta a cambiar su filosofía de colaboración y voluntariado en el formato vídeo con el fin de seguir cumpliendo su mayor objetivo: que todas las personas tengan acceso libre al conocimiento.
Ante esta cuestión, los responsables de Wikimedia España se muestran contrarios al cambio. “Si optamos por cerrar la edición del vídeo estamos perdiendo la esencia del proyecto, porque Wikipedia es un proyecto colaborativo y libre que cualquiera puede modificar”, dice Santiago Navarro. Una opinión que secunda Esteban Zárate :“Eso iría en contra de la filosofía de Wikipedia, ya no sería contenido libre porque restringiría que la gente participe, y Wikipedia no es así”.
Virginia Díez, por su parte, señala que “el objetivo número uno es que todas las personas tengan acceso al conocimiento, por lo que si dejan de leer y se acercan más al vídeo tendremos que adaptarnos para conseguirlo. Hablar de lo que va a pasar de aquí a diez años es complicado. Además, al ser un proyecto colaborativo estas decisiones se toman en comunidad, no dependen sólo de nosotros”. A pesar de ello, también se muestra contraria a cualquier cambio en la filosofía de Wikipedia.
Otras enciclopedias online
Las demás enciclopedias online que existen tampoco marcan un posible camino a seguir para Wikipedia, ya que la filosofía de la enciclopedia libre se aleja mucho del funcionamiento de estas obras, ya digitales pero que se siguen rigiendo por parámetros convencionales.
“Son enciclopedias que ya tenían su versión en papel y que se acaban volcando a la web, y aún así no hemos visto que hayan hecho mucho. La ventaja que tienen es que los vídeos que suben estas enciclopedias no se van a modificar, nadie espera que ese contenido se pueda editar”, explica el presidente de Wikimedia España.
De las varias enciclopedias que existen en internet, la que mejor parece haberse adaptado al formato vídeo es la Enciclopedia Británica, que sí acompaña muchos de sus artículos con vídeos de resumen de entre dos y ocho minutos.
Pero esta enciclopedia, como apunta Navarro, cuenta para el apartado audiovisual con las ventajas de estar impulsada por una empresa privada, Encyclopædia Britannica, Inc. y de tener una plantilla de editores profesionales, motivo por el que no es gratuita y su contenido no está disponible para todo el mundo. Además, no tiene versión en español.
Por lo demás, hay pocas alternativas online a la Wikipedia en castellano. Existen portales de difusión de conocimientos de multitud de universidades, como Dialnet, y páginas de información especializada en determinadas materias concretas, como ArteHistoria, pero ninguna plataforma llega a la ingente cantidad de información que maneja Wikipedia.
Así pues, aunque algunos usuarios prefieran consultar determinada información en otras webs en formato vídeo, como YouTube, Vimeo o prensa digital, la ausencia de competidores de sus mismas características hace difícil que sus problemas audiovisuales vayan a suponer un problema serio para mantener la hegemonía mundial del conocimiento libre.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 23 Comentarios