Interesante la propuesta de Sharkoon, a la que han denominado Flexi-Drive S2S. Se trata de un accesorio con el que se puede “construir” un disco de estado sólido a partir de varias memorias SDHC.
Funciona de la siguiente forma: el Flexi-Drive S2S, de 2.5 pulgadas y con interfaz SATA2, tiene en su interior una placa con seis slots, huecos, para seis memorias SDHC. El usuario puede introducir en esos seis huecos seis tarjetas diferentes, con la posibilidad de no rellenar todos los huecos. La capacidad total del disco será lógicamente la suma de todas las capacidades de almacenamiento de cada tarjeta SDHC.
La solución es muy interesante y, según el fabricante, utilizando memorias SDHC Class 6 se pueden lograr tasas de transferencia de datos de hasta 140 MB/s, alcanzadas sólo por los discos SSD más veloces del mercado. Lo bueno para el usuario es que puede adaptar la capacidad total a sus exigencias, añadir más si lo necesita, eliminar algún módulo…
Las tarjetas deben ser SDHC, ya que el Flexi-Drive S2S no es compatible con el estándar SD, o al menos eso comentan en la información oficial. Teóricamente, SDHC es retrocompatible con SD.
Teniendo en cuenta que una SDHC actual alcanza fácilmente los 16 GB por unos 50 euros (una de clase 6), un SSD de 96 GB nos podría salir por 300 euros sólo en memorias, y luego habría que añadirle el precio del Flexi-Drive S2S, 80 euros (aunque lo acabo de ver en una tienda online española por 60). Es algo más caro que un SSD normal (que ronda los 120 GB por 350 euros), pero para determinadas circunstancias puede resultar muy interesante.
Vía | TechPowerUp.
Más información | Sharkoon.