Google no quiere quedarse atrás en el campo de la inteligencia artificial. La compañía de Mountain View, que hace aproximadamente un mes declaró un “código rojo” por el avance de ChatGPT, está preparando una veintena de aplicaciones basadas en IA para hacer frente al chatbot viral de OpenAI del que todos hablan.
Es que durante décadas el gigante de las búsquedas se ha beneficiado de tener una competencia prácticamente insignificante en ese sector. Pero el dominio casi absoluto de un mercado puede no ser para siempre. Ya lo hemos visto con Netflix, que ahora lucha por mantenerse en el podio de las plataformas de streaming.
Google quiere seguir siendo Google
Dicen los más avezados directores ejecutivos que una de las formas de mantenerse en la cima es adaptarse a los cambios. No hacer una metamorfosis lo suficientemente rápido suele ser la receta perfecta para el fracaso. OpenAI, según la información compartida por New York Times, parece haber despertado a un gigante dormido.
Han saltado las alarmas en Google a tales niveles que los propios fundadores de la compañía, Larry Page y Sergey Brin, se han aparecido por las oficinas para mantener una serie de reuniones con distintos equipos. Sundar Pichai, ha sido quien los ha convocado en el marco de una situación “de urgencia” dentro de varias divisiones.
Se cree que la compañía tiene suficiente músculo en el campo de la inteligencia artificial, gran parte de él gracias a la compra de la firma de investigación DeepMind en 2014. Sin embargo, hasta ahora había sido escéptica en demostrar públicamente sus avances, relegando sus nuevas tecnologías principalmente a pruebas de laboratorio.
Pero Sam Altman puso en jaque los planes de Google con una jugada estelar. En noviembre de 2022 lanzó al público y sin restricciones de acceso, ChatGPT. En cuestión de horas, el bot conversacional se convirtió en un fenómeno viral y muchos empezaron a hablar de su gran capacidad.
Incluso, la conversación sobre este nuevo programa de inteligencia artificial pivotó rápidamente hacia una pregunta muy concreta: ¿qué pasaría si ChatGPT estuviera conectado a Internet? Recordemos que el bot ha sido entrenado con enormes conjuntos de datos y que sus “conocimientos” llegan hasta 2021.
Con los rumores del futurible lanzamiento de GPT-4, un modelo de lenguaje autorregresivo de próxima generación y el sucesor de GPT-3.5, el que utiliza ChatGPT, Google no quiere perder el tiempo. Precisamente, uno de sus objetivos es lanzar una versión de prueba de un chatbot que funcione con su motor de búsqueda.
El chatbot que se alimentará de Google Search llegará tan pronto como este año en versión de prueba, según el mencionado periódico. Y no lo hará solo. En la clásica conferencia de desarrolladores de mayo, el gigante podría presentar un generador de imágenes llamado Image Generation Studio y una nueva generación de AI Test Kitchen.
AI Test Kitchen es una herramienta muy importante en la estrategia de Google. Esta se alimenta de las interacciones de los usuarios para mejorar las capacidades de LaMDA, el modelo de lenguaje que es capaz de mantener conversaciones con humanos y que, recordemos, estuvo en el centro de la polémica cuando un ingeniero de Google dijo que creía que tenia conciencia.
Se desconoce el nombre o las características de todas las herramientas que Google tiene planificadas para este año. Sin embargo, algunos proyectos, de acuerdo a diapositivas vistas por NYT, hablan de una función de pantalla verde para YouTube, un creador de fondos de pantalla para dispositivos Pixel y una app llamada Maya que visualiza zapatos en 3D.
Google también parece haberse inspirado en GitHub Copilot. La hoja de ruta de la compañía para el 2023 indica la presentación de Colab + Android Studio, una solución que facilitará la creación de apps para Android sugiriendo código a los desarrolladores.
Imágenes: Arkan Perdana | Javier Marquez (DALL·E 2)
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