Guía de compra de protectores de pantalla del móvil: tipos y cómo ponerlos

¡Qué bonitas son los smartphones recién sacados de su caja y cómo nos duele cubrirlos! Sin embargo, la protección mediante fundas y otros accesorios son la mejor forma para prolongar su vida y conservar el atractivo aspecto de su primer día. En esta guía de compra de protectores de pantalla repasamos las principales alternativas del mercado, así como sus puntos fuertes y debilidades para ayudarte a elegir el que mejor se adapte a ti y tu teléfono.

Elegir un protector de pantalla para teléfono móvil

A la hora de elegir un protector de pantalla para nuestro teléfono móvil valoraremos las siguientes características:

Resistencia frente a golpes, caídas y arañazos. En los protectores de pantalla es frecuente encontrar una cifra que haga referencia a la dureza empleando la escala de Mohs, ojo porque es un concepto engañoso a la hora de valorar su resistencia en el día a día.

Sin ir más lejos, en esa escala el diamante es el rey, un material extremadamente duro pero al mismo tiempo muy frágil. Una recomendación práctica para cuidar la pantalla del teléfono es acompañar el protector con una funda de bordes lo suficientemente gruesos como para protegerla frente a impactos laterales.

El grosor del protector es una diferencia notable entre los diferentes tipos del mercado. En general, nos moveremos entre los 0,2 milímetros y los 0,45 milímetros. Que un protector sea más grueso no implica necesariamente que sea más resistente, ya que también entran en juego los materiales, su diseño o la estructura interna que lo conforma.

Eso sí, lo grueso que sea un protector sí que tiene importancia a nivel estético y de tacto, al apreciarse más por los bordes que uno que sea delgado.

Otro aspecto importante es el grado de transparencia, especialmente para aquellos protectores con una estructura multicapa. En el mercado encontramos protectores por encima del 95% de transparencia.

El cristal está de moda en los smartphones, habiendo saltado desde los paneles hacia las carcasas, confiriéndole unos efectos al paso de la luz muy atractivo. Pero tienen una cara B: son auténticos imanes para las huellas. Lo mismo sucede con las pantallas. En este sentido, es interesante apostar por protectores de pantalla con capa oleofóbica.

La experiencia táctil del terminal es determinante. En general, todos los protectores responden bien ante un toque con un solo dedo, pero la cosa cambia cuando nos valemos de la experiencia multitáctil, ya que no todos responden igual por ejemplo al intentar hacer zoom con dos dedos.

Finalmente, existen protectores de pantalla que incorporan funcionalidades adicionales como filtros de privacidad — dificultando la lectura si no nos encontramos justo de frente a la pantalla —, con superficies anti reflejos gracias a un recubrimiento mate o con resistencia extra frente a las manchas.

Tipos de protectores de pantalla

Aunque el primer paso para acertar eligiendo un protector de pantalla es elegir uno que sea compatible con nuestro modelo de smartphone, lo siguiente será determinar de qué tipo lo queremos, o lo que es lo mismo, de qué material está fabricado. De esta elección dependerán sus características, sistema de colocación y la inversión a realizar.

PET

Es el típico protector de pantalla que solemos denominar coloquialmente "de plástico", porque de hecho es un plástico, muy común en el envasado de alimentos y botellas.

Los protectores de pantalla de PET ofrecen fundamentalmente protección frente a arañazos que pueden producirse al entrar en contacto con llaves, uñas o monedas.

Entre las ventajas de los protectores de pantalla de PET se encuentran su ligereza, lo finos que son y su precio, ya que suelen ser los más baratos, además de venir en packs.

El protector de pantalla de PET tiene un tacto suave y es algo rígido, lo que constituye una limitación si queremos adherirlo en pantallas con bordes curvados.

En general, marcas conocidas como Tech Armor ofrecen protectores de buena calidad con unos cortes que se ajustan con precisión al diseño del terminal, así como una mayor claridad y transparencia. Eso sí, con el paso del tiempo es habitual que todos vayan perdiendo nitidez fruto de los rayos solares y la grasilla de los dedos.

Si tienes un teléfono barato o antiguo, es una opción de protección para la pantalla a tener en cuenta.

TPU

Al subir un escalón en protección nos topamos con el poliuretano termoplástico o TPU que, al adherirlo a la pantalla, queda con un aspecto que recuerda bastante al de la piel de naranja.

El TPU es un plástico que destaca por su propiedades elásticas, su flexibilidad, la resistencia frente a los arañazos, y también al deterioro originado por la grasa y aceites.

A causa de su naturaleza elástica, tiene cierta capacidad de "curar" pequeños arañazos en un corto periodo de tiempo, al absorber esos impactos manteniendo su estructura.

Los protectores de pantalla de TPU son en general más caros que los fabricados de PET. Entre las marcas más interesantes con este tipo de protectores se encuentran Spigen, IQ Shield o Zagg.

Cristal (o vidrio) templado

No tienen la capacidad de recuperación del TPU, pero en términos de resistencia, son más duros y soportan mejor las caídas e impactos que los anteriores, así como el efecto de los arañazos de la arena. Asimismo, también ofrecen un alto grado de transparencia.

Este tipo de protección está compuesta por varias capas formando una especie de sándwich: de silicona para absorber golpes, con cobertura oleófoba, con propiedades antiglare y también de cristal templado, todas ellas montadas para no ocupar más de medio milímetro de grosor.

Existen protectores de pantalla con un 8 o incluso 9 en la escala de Mohs, pero no son infalibles, especialmente con impactos laterales, su kryptonita particular. De ahí que sea fundamental acompañar su protección con una funda con bordes prominentes

Los cristales templados son los protectores de pantalla más caros, si bien siempre tendremos que realizar un desembolso muy superior sustituyendo el panel de nuestro teléfono. Algunas marcas a tener en cuenta son Nillkin H+Pro, J&D, InvisibleShield, Armorz, Stillersafe, Ultimate Shield o SANMIN.

Nanolíquido

Otro tipo de protectores de pantalla de menor popularidad consiste en aplicar una solución sobre la pantalla del teléfono cubriendo todo el panel.

Esta capa es extremadamente delgada, lo que repercute en que son apenas imperceptibles, pero a cambio los arañazos más graves pueden alcanzar la pantalla.

Otro hándicap de este tipo de protectores es que no pueden retirarse como los anteriores, sino que van desapareciendo progresivamente, por lo que es muy difícil confiar en su protección con el paso del tiempo.

Cómo poner un protector de pantalla

Existen dos formas de instalar un protector de pantalla: en seco y en húmedo. En la caja del protector encontraremos a cuál de ellas se corresponde, así como las herramientas necesarias para su montaje.

Poner un protector de pantalla en seco

Para el método en seco se emplea electricidad estática, sin necesidad de adhesivos adicionales. Para que el protector quede correctamente adherido es necesario que la superficie se encuentre completamente libre de polvo. En estos casos es habitual que el kit incluya una toallita húmeda y otra seca, para limpiar correctamente el panel y dejarlo completamente seco, listo para fijar el protector.

El paso siguiente será alinear el protector adecuadamente y posarlo sobre la superficie. Aquí es donde comienzan los problemas.

Una buena idea para aquellos con un pulso poco firme es apostar por kits de instalación fácil que incluyen un marco. Este marco se ajusta a los bordes del teléfono, de modo que podamos situar un lado y dejar caer suavemente el resto, estirando cuidadosamente con el paño seco hacia los bordes para extraer las burbujas que pudieran quedar.

Con este método existe la posibilidad de retirar el protector y volverlo a fijar, si bien es fácil que se vaya depositando polvo. Algunos kits también incluyen bandas electrostáticas para retirarlo.

Poner un protector de pantalla en mojado

La opción húmeda incluye un sistema de fijación del protector con pegamento. Aquí la necesidad de precisión es extrema porque una vez adherido, despegarlo será complicado, deteriorando las propiedades del protector de pantalla.

Como en el sistema anterior, deberemos limpiar y secar la pantalla con las toallitas y, aunque hay kits que incluyen el marco para la instalación fácil, será necesaria una gran dosis de pulso. En el lado bueno, al adherirse firme y rápidamente desde el principio, suelen producirse menos burbujas y atrapan menos polvo.

Puedes estar al día y en cada momento informado de las principales ofertas y novedades de Xataka Selección en nuestro canal de Telegram o en nuestros perfiles de Twitter, Facebook y la revista Flipboard.