Si haces deporte con frecuencia y exiges a tu cuerpo para mejorar progresivamente, es bastante probable que en algún momento te plantees comprar un reloj con GPS para analizar tus entrenamientos. Sí, en el mercado hay smartwatch, pulseras de actividad y relojes deportivos con GPS que pueden registrar más o menos lo que hacemos, pero quienes buscan precisión y métricas avanzadas suelen decantarse por estos últimos. ¿Qué reloj GPS comprar?
Como vas comprobar en este artículo, dependerá de varios factores comenzando por contestar a la siguiente pregunta: ¿qué deporte practicas y con qué frecuencia?
| 👇 Nuestro favorito | 👇 El mejor en calidad precio | 👇 El más económico |
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| Garmin Fēnix 7X Solar | Suunto Race | Fitbit Versa 4 |
| Modelo | Lo positivo | Lo negativo | Precio | |
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| Polar Ignite 3 | Cuenta con una buena construcción y permite diseñar nuestros propios entrenos | No es resistente al agua | |
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| Fitbit Versa 4 | Es compatible con Always On Display e integra altavoz y micrófono | Su autonomía es algo justita | |
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| Suunto Race | Cuenta con gráficas en tiempo real y dispone de un buen número de sensores para monitorizar la actividad física | Se echa en falta un pequeño extra de autonomía | |
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| Garmin Forerunner 255 | Tiene una buena autonomía y permite pagar mediante Garmin Pay | Es un modelo muy justito si lo comparamos con otros relojes de la marca | |
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| Suunto 7 | Es bonito y elegante, cuenta con WearOS y permite utilizar Spotify sin conexión | Su precio es algo elevado | |
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| Garmin Fēnix 7X Solar | Cuenta con carga solar y, en general, es un reloj muy completo | Su precio es muy elevado |
Nuestra selección de smartwatch, de un vistazo
- Polar Ignite 3, con función SleepWise y GPS dual integrado.
- Garmin fēnix 7X Solar, con carga solar.
- Fitbit Versa 4, con pantalla de buena resolución y un tamaño adecuado.
- Suunto Race, un modelo muy atractivos en la gama media.
- Garmin Forerunner 255, que permite pagar con Garmin Pay y seleccionar más de 30 perfiles de actividad.
- Suunto 7, con mapas y música sin conexión y con la posibilidad de realizar pagos mediante Google Pay.
Qué mirar a la hora de comprar un reloj deportivo con GPS
Mientras que las pulseras de actividad sobresalen por su sencillez y ligereza, los relojes de GPS ofrecen en general unas métricas más exhaustivas gracias a la integración de una sensórica más completa para monitorizar nuestros entrenamientos. A cambio, nos encontramos ante un dispositivo más voluminoso y técnico que en algunos casos no es apto para cualquier muñeca.
Si tienes esto claro, lo siguiente a tener en cuenta es para qué lo quieres. O lo que es lo mismo, qué deportes quieres monitorizar, con qué exhaustividad y con qué frecuencia. Y es que en el mercado encontramos relojes especializados para diferentes deportes, que ofrecen más o menos parámetros y por supuesto, con una horquilla de precios dispares.
En este sentido, es habitual que los relojes más sencillos se destinen a disciplinas como el atletismo en sus diferentes modalidades. Subiendo un peldaño se abren las puertas a modelos más o menos multideporte que monitorizan y llegan a personalizar entrenos. Y lo que es más interesante si practicas disciplinas combinadas como el triatlón, algunos son capaces de saltar de una actividad a otra dentro del mismo entreno.
Por cuestiones de interés general, nos centraremos en los modelos multideporte que proporcionan cobertura de deportes típicos, aunque si practicas un deporte más específico como el golf o el buceo, existen relojes deportivos GPS diseñados para tal fin.
¿Cómo determina la posición?
Aunque para interiores un acelerómetro puede ser suficiente para estimar nuestro movimiento, si nuestros entrenamientos van a realizarse en el exterior apostaremos por dispositivos con sistemas de posicionamiento mediante satélite que nos permitan determinar dónde nos encontramos.
El más popular es el GPS o sistema de posicionamiento global, que logra mediante un conjunto de satélites posicionados por sobre la Tierra y la trilateración, localizando la latitud, longitud y altitud.
El GPS nos proporciona nuestra localización – y por ende, la ruta seguida – con una precisión aproximada del 1 al 3%, si bien existen obstáculos como árboles, edificios o incluso las propias nubes que pueden afectar a la exactitud.
Otros instrumentos que ayudan a controlar nuestro movimiento y que sirven como apoyo al GPS y el acelerómetro son los podómetros para los pasos y los sensores de cadencia.
Si estamos interesados en realizar deportes en montaña, como senderismo, ciclismo o trail, es interesante que el GPS se complemente con un altímetro barométrico para determinar la altura a la que nos encontramos y el histórico de altitud mediante la presión atmosférica.
No obstante, también es interesante que ofrezcan otros sistemas de localización alternativos como Galileo, el sistema europeo de radionavegación y posicionamiento por satélite desarrollado por la Unión Europea y Agencia Espacial Europea, el GLONASS, el sistema de geolocalización creado por la antigua URSS, o el japonés Quasi-Zenith.
De mapas y tracks
La integración del GPS en ciertos relojes deportivos no solo sirve para determinar nuestra situación exacta, sino también para poder visualizar dónde estamos y cuál es la trayectoria que hemos seguido. Incluso aportando información adicional como los accidentes geográficos, carreteras, térmicos para saber qué ruta es la más transitada.
En caso de que estés pensando en un reloj con GPS para actividades outdoor, es interesante escoger un modelo que permita tanto visualizar mapas desde el propio dispositivo como seguir tracks, de modo que podamos introducirlos antes de salir de casa y poder seguirlos durante la actividad para no perdernos y ceñirnos al recorrido planificado.
Batería: el GPS determina la autonomía...y el presupuesto
Si ya tenemos claro qué instrumentos y sistemas de localización requerimos para controlar nuestros entrenamientos, el paso siguiente es saber la duración de nuestros entrenamientos. Y es que no es lo mismo preparar un ultra trail que dar una vuelta por el monte de vez en cuando.
Los sistemas de posicionamiento por satélite devoran la batería, por lo que antes de decantarnos por un modelo u otro, nos aseguraremos de que la orientación aportada por el fabricante, generalmente optimista, sea más que suficiente para cubrir nuestros entrenamientos. Después de todo, el uso real difiere de las estimaciones.
La autonomía proporcionada por un reloj con el GPS activado marca la diferencia en cuanto a prestaciones y precio, encontrando los más sencillos para deportistas ocasionales y los más completos para aquellos deportistas más exigentes en cuanto a entrenamientos.
Qué miden: frecuencia cardiaca, cadencia, VO2 Max...
Si nos tomamos el deporte y los entrenamientos en serio, entonces seguramente nos interesará saber cómo ha respondido nuestro cuerpo a la actividad física para poder aprender y optimizar nuestro trabajo en próximos entrenos. Es aquí donde se abre un mundo de posibilidades. Sin detenernos a profundizar en la respuesta de nuestro cuerpo al ejercicio o el funcionamiento de la sensórica, los parámetros más habituales son:
La frecuencia cardiaca, para establecer límites saludables a nuestro corazón que nos permitan seguir mejorando. En los relojes deportivos (y en muchas pulseras de actividad) se valen pulsómetros integrados en la muñeca, si bien si buscamos un plus de precisión es recomendable apostar por aquellos que nos permitan conectar (Bluetooth o ANT+) una banda al pecho para monitorizarlo. Es frecuente que estos modelos lleven el apellido "HR".
Derivada de la medida del pulso se establecen zonas de entrenamiento y valores máximos a alcanzar para maximizar nuestro esfuerzo sin entrar en zonas críticas.
La capacidad aerobia es cantidad máxima de oxígeno que el cuerpo puede proporcionar a los músculos, también conocida como VO2 Max. Cuanto mayor sea el VO2 máximo, mayor será la capacidad cardiovascular.
El umbral de lactato o umbral anaeróbico, que hace referencia a la zona de intensidad del ejercicio donde hay una demanda brusca de energía, lo que se traduce en fatiga y pérdida de rendimiento.
El tiempo de recuperación tras un entrenamiento hasta volver a la normalidad.
Relacionado con el anterior, el consumo de oxígeno extra de nuestros músculos fruto de un entrenamiento, conocido como EPOC.
En caso de que practiquemos una disciplina relacionada con el running – no obstante, es la práctica más común en los relojes, especialmente de gamas baja y media –, también encontraremos datos para saber si corremos bien: cadencia – número de pasos/minuto –, la longitud de la zancada, la oscilación vertical al correr o el tiempo de contacto con el suelo.
Diseño, materiales y resistencia
Aunque los modelos actuales nos permiten visualizar cómodamente nuestra actividad desde el móvil, lo bueno de estos relojes es poder ver cómo está yendo el entreno sobre la marcha, simplemente mirando la pantalla.
Mientras que en la gama más baja (especialmente si son modelos antiguos) encontramos paneles monocolor que sufren en escenarios de alta luminosidad como los días soleados, en cuanto subimos un peldaño las pantallas crecen, ganan en calidad y pasan a color, un recurso que mejora la experiencia de uso por lo intuitivo que es verlo todo con recursos gráficos y cromáticos.
Volvemos a acordarnos de las pulseras de actividad porque mientras que estas son ligeras y pequeñas, los relojes deportivos en general no son aptos para muñecas pequeñas: es la cara B de esa pantalla grande en la que verlo todo. Es habitual que el punto de partida sean esferas de 40 milímetros, si bien algunos modelos se comercializan en diferentes tamaños.
Lo bueno es que en general los fabricantes, especialmente en las gamas medias y altas, apuestan por materiales y diseños lo más ligeros y compactos. Y hablando de materiales y diseño: estamos ante dispositivos para usar en exteriores y practicando deportes, por lo que han de ser resistentes, hipoalergénicos y cómodos.
Estéticamente reina lo deportivo, aunque en la franja noble también se busca un plus en diseño y en el empleo de materiales. Después de todo, un reloj es un complemento de moda más para llevar en nuestro día a día.
Si queremos llevarlo a situaciones extremas como la escalada o deportes de nieve, también hay modelos que pueden acomparñarnos en esas tesituras. Mención especial merece la resistencia al agua: todos ellos pueden de un modo u otro soportarla, pero no es lo mismo usarlo en la ducha y para darnos un chapuzón que quererlo para nadar en aguas abiertas o para buceo en profundidad.
En este sentido, mientras que algunos especifican la profundidad máxima, otros se refieren a la resistencia al agua mediante atmósferas: con 5 ATM podrás nadar y hacer snorkel, en las 50 ATM también podrás llevarlo haciendo deportes acuáticos a alta velocidad y con el estándar EN13319 podrás llevarlo a bucear.
Del reloj a la nube: plataformas
Otro de los rasgos distintivos de los relojes deportivos con GPS son sus servicios de visualización de datos y actividades. No solo permiten analizar el histórico y la evolución, sino también compartirlos y analizar estadísticas desde nuestro teléfono, tablet u ordenador.
Es deseable una interfaz clara e intuitiva, que sean multiplataforma para visualizarlos desde diferentes dispositivos y que se puedan sincronizar con aplicaciones de terceros como por ejemplo navegadores o servicios de música en streaming.
Polar dispone de Polar Flow, una herramienta multiplataforma para planificar y realizar seguimiento de tus entrenamientos, actividad y sueño
La finlandesa Suunto tiene su aplicación homónima (anteriormente Movescount) desde la que ver resúmenes de entrenamiento, actividad y sueño, personalizar notificaciones y conectarse con servicios como Strava, Endomondo, TrainingPeaks, Relive, entre otros.
Garmin cuenta con Garmin Connect, una aplicación para Windows, iOS y Android con tarjetas coloridas, servicio de entrenamiento mediante Garmin Coach, panel informativo, estadísticas, conexión con otros usuarios y competiciones, entre otros.
Modelos destacados de relojes deportivos con GPS
Polar Ignite 3
En la gama de entrada encontramos el renovado Polar Ignite 3 (239,99 euros) que destaca por lo intuitivo de su interfaz y que además es moderadamente compacto, estando disponible en varios colores.
En este caso se trata de un reloj multideporte que cubre disciplinas como gimnasio, natación, running, ciclismo y caminata. Con él es posible diseñar tus propios entrenos y ver la recuperación
Polar Ignite 3 - Reloj Inteligente de Actividad y Bienestar con GPS, Análisis del sueño, Pantalla AMOLED, Registro 24/7, Frecuencia cardíaca, Entrenamiento Personalizado e Indicaciones por Voz
Fitbit Versa 4
El último modelo que se conoce de esta gama, Fitbit Versa 4 (177,74 euros) cuenta con un formato cuadrado, con pantalla AMOLED y compatible con Always On Display, incluyendo el sensor óptico multirruta de frecuencia cardíaco.
Dispone de otros sensores como temperatura cutánea, escáner EDA, luz ambiental o giroscopio. Con altavoz y micrófono para llamadas, su batería puede llegar casi a la semana completa.
Fitbit Versa 4, el smartwatch que te ayuda a ponerte en forma con GPS integrado, hasta 6 días de batería y compatible con iOS 15 & Android OS 9.0, Negro/Aluminio grafito
Suunto Race
Uno de los modelos más atractivos en la gama media es este Suunto Race (449 euros), con pantalla AMOLED de 1,43 pulgadas que ofrece un equilibrio entre un diseño ligero y compacto, métricas avanzadas para multideporte con muchas disciplinas deportivas y unas cifras nada desdeñables de autonomía con hasta 40 horas con el GPS activado. Para que sea más fácil de manejar e intuitivo, muestra gráficas en tiempo real de la actividad.
SUUNTO Race Reloj Deportivo - Smartwatch Exteriores, Pantalla AMOLED Brillante De 1,43" Con Cristal De Zafiro, Corona Cómoda y Botones De Control, GPS De Doble Frecuencia, Larga Duración De La Batería
Garmin Forerunner 255
El Garmin Forerunner 255 (261,99 euros) también permite pagar con Garmin Pay e incluye más de 30 perfiles de actividad.
Sube un peldaño en cuanto a autonomía, alcanzando los 14 días de uso, por supuesto dispone de GPS y permite planificar las sesiones de entrenamiento diarias recomendadas o personalizar las nuestras propias.
Garmin Forerunner 255, Reloj Inteligente para Correr con GPS, Garmin Pay, Autonomía de hasta 14 Días, Azul Oscuro
Suunto 7
Los cuatro años que lleva en el mercado ha posibilitado que este Suunto 7 (779,72 euros) pueda encontrarse notablemente más barato que su precio de partida. Dispone de GPS, pero uno de los puntos más interesantes es que cuenta con WearOS de Google.
Es especialmente interesante es para deportes en de montaña, con mapas sin conexión, dispone de compatibilidad con Spotify (permite guardar música para escucharla sin conexión), permite realizar pagos con Google Pay y viene con un buen surtido de sensores para monitorizar la actividad física.
Suunto 7 Smartwatch con aplicaciones versátiles y Wear OS de Google
Garmin fēnix 7X Solar
La versión con carga solar del fēnix 7X (749 euros) integra una pantalla táctil de 1,4 pulgadas y, en este caso, cuenta con una carcasa de 51 mm. Viene repleto de sensores para que no echar en falta nada cuando salgamos a hacer deporte, como son el acelerómetro, barómetro, altímetro, termómetro, sensor de frecuencia cardiaca, monitorización de la respiración y del oxígeno en sangre SpO2, del estrés y muchos otros.
Con WiFi y GPS, dispone de una batería que alcanza los 37 días en modo inteligente, de 120 horas en modo GPS y de 139 días con el modo GPS Expedition.
Garmin fēnix 7X Solar, Reloj GPS multideporte con carga solar, pantalla táctil, linterna LED, frecuencia cardíaca, mapas y música, Negro
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| Polar Ignite 3 | Fitbit Versa 4 | Suunto Race | Garmin Forerunner 255 | Suunto 7 | Garmin Fēnix 7X Solar |
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