Es una de las películas más influyentes y demoledoras del cine de superhéroes, y se adelantó a la eclosión de Marvel y DC

No sé vosotros, pero yo le tengo auténtica devoción a las películas de superhéroes que funcionan en los márgenes de Marvel, DC y demás gigantes del género. A veces adelantándose a sus propuestas (como 'Push,0 una cosita trotona e infravalorada protagonizada por un Chris Evans pre-Capitán América, o la fantástica 'Jumper'), a veces rodeándolas y sugiriendo vías alternativas para el género, como la fabulosa 'Lucy' o esta 'Chronicle' (que puedes ver en Disney+ y Netflix).

Rondaba 2012, es decir, el año del estreno de 'Vengadores': habíamos visto 'Iron Man' y 'El increíble Hulk', pero el auténtico bombazo del MCU estaba por llegar. Y de esa forma desafiante que solo se puede rubricar desde los márgenes y el bajo presupuesto, Josh Trank (sí, el mismo que luego destrozó su carrera con su infausta versión de 'Los Cuatro Fantásticos') facturaría esta singularísima propuesta. Una película de superhéroes con estética found footage, efectos especiales caseros pero muy efectivos y sin disfraces o máscaras.

En una onda similar a 'Jumper' pero mucho más verosímil, 'Chronicle' se pregunta (y nos pregunta) qué haríamos cualquiera de nosotros con superpoderes. No, pero de verdad. Es lo que tienen que decidir tres amigos de Seattle expuestos a una misteriosa sustancia que les da increíbles poderes como mover objetos con la mente o volar. Los problemas llegarán pronto, pero no desde las fuerzas del orden o alguna némesis superpoderosa, sino de ellos mismos y cómo deciden emplear sus habilidades.

El resultado es una película cruda y áspera, que plantea cuestiones que funcionan a la perfección en una película de superhéroes (cuántas aventuras hemos leído que son básicamente héroes curtiéndose el lomo antes de darse los buenos días), pero que también se extrapolan fácilmente a cuestiones como los límites de la amistad y las traiciones y desencuentros dentro de las relaciones íntimas. Y reforzada por una estética cámara en mano que le da un baño de realismo y contundencia a todo. Una refrescante vuelta de tuerca a un tema manido pero con mucho potencial.

En Xataka | He revisado la peor película de la historia de Marvel y he llegado a la conclusión de que tampoco merece tanto odio