Netflix tiene 223 millones de suscriptores en todo el mundo. Sin embargo, según sus cálculos más recientes, unas 100 millones de personas utilizan el servicio sin pagar. ¿Cómo es posible esto? Gracias a la posibilidad de compartir las cuentas, una práctica que también ha sido adoptada por usuarios de otras plataformas de streaming.
Durante mucho tiempo, pese a que sus términos y condiciones indicaban lo contrario, Netflix ha permitido que los usuarios compartieran sus cuentas sin ningún tipo de limitación, pero el gigante del streaming se está preparando para acabar con la fiesta y el año próximo es el elegido para poner en marcha su nueva estrategia.
Netflix le dirá adiós al uso compartido de cuentas
En un documento dirigido a sus inversionistas, Netflix anunció este año que sus esfuerzos para monetizar el uso compartido de cuentas empezarían a implementarse de manera amplia en 2023. Recordemos que la compañía probó durante unos tres meses la opción “agregar casa” en algunos países de América Latina.
Si bien Netflix cesó su experimento de cobrar a los usuarios que compartían sus cuentas en algunos países en octubre de este año, el movimiento no debe ser entendido como un cambió de opinión en los planes de la compañía. Al contrario, ahora está trabajando en un “método más sencillo” para su implementación el año que viene.
Originalmente, durante las pruebas en Argentina, Honduras, Guatemala, El Salvador y República Dominicana, el servicio de streaming puso en funcionamiento el concepto “Hogar Netflix” para evitar que usuarios que vivieran fuera de la casa principal pudieran utilizar el servicio con una contraseña compartida y sin pagar.
Para determinar la ubicación de los usuarios que se conectaban para utilizar el servicio, la compañía recurría al historial de las cuentas, sus direcciones IP y los identificadores de dispositivos. Además, estableció un sistema de verificación para cambiar de hogar en caso de que los usuarios de la casa principal se encontraran de viaje.
Como consecuencia, se cerraba la puerta a todos aquellos usuarios que utilizaban el servicio desde otras casas con contraseñas compartidas. A menos que pagaran, claro. En este sentido, la plataforma habilitó la posibilidad de pagar un poco más para permitir usuarios externos con su propio perfil y contraseña.
Hasta aquí, toda la información oficial de Netflix. Lo que no sabíamos, es qué había aprendido la compañía con sus pruebas en América Latina. Según The Wall Street Journal, descubrió una serie de inconvenientes que debería subsanar de cara al año que viene, momento en el que volverá a la carga con la guerra de las contraseñas.
Uno de los problemas a los que se enfrentó la compañía es que no fue tan fácil determinar con precisión la ubicación de los suscriptores, una parte elemental para que funcione el sistema. Además, empezó a contemplar formas de abordar los escenarios en los que los suscriptores utilizan el servicio en movimiento desde sus móviles.
Se desconocen, de momento, cuáles serán los cambios que Netflix implementará en su próxima propuesta. Tampoco hay detalles sobre la fecha exacta o los países en la que empezará a desplegarse. Solo sabemos que se tratará de un despliegue, posiblemente en varias regiones, que comenzará “a principios de 2023”.
Cabe señalar que Netflix es el primer actor importante de la industria en abordar las cuentas compartidas. Sin embargo, de acuerdo al mencionado periódico estadounidense, no sería extraño que otras plataformas importantes también consideren movimientos similares, aunque esto no está confirmado.
El giro en la estrategia de Netflix, acertado o no, debe entenderse en el contexto actual de la industria del streaming. El servicio codirigido por Reed Hastings ya no es el rey indiscutible de los contenidos bajo demanda, título que ostentó durante mucho tiempo. Ahora hay otros gigantes con gran presupuesto buscando su parte del pastel.
Un claro ejemplo de esta realidad es que, a principios de este año, Netflix perdió usuarios por primera vez en una década, caída que se repitió en el segundo trimestre de 2022. Esto impulsó una serie de cambios que iban más allá de la inversión en contenidos originales: planes con anuncios, el fin de las cuentas compartidas y más.
La estrategia del gigante del streaming busca, sin lugar a dudas, recuperar su posición de liderazgo sin dejar de lado las ganancias. Pese a que sus últimos movimientos han recibido una avalancha de críticas, en el tercer trimestre de este año Netflix volvió a crecer sumando 2,4 millones de usuarios de pago.
Aunque la última alza no le sirvió para perder el trono frente a Amazon Prime Video, la compañía proyecta agregar otros 4,5 millones de nuevos suscriptores en el último trimestre de 2022. Con el paso de los meses sabremos si el giro que ha dado Netflix consigue materializarse en una victoria en la industria del streaming.
Imágenes: Netflix | CardMapr.nl
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 175 Comentarios