LG Optimus Pad, nuestro análisis (I)

Tras analizar los cuatro primeros tablets con Android HoneyComb en España, toca hablar del modelo más diferente de todos los que ahora mismo hay disponibles en nuestro país, con permiso del Transformer de Asus.

El LG Optimus Pad es un tablet que llega con Android HoneyComb pero con dos detalles interesantes, uno más que otro: la pantalla de 8.9 pulgadas que nos ha parecido muy manejable aunque el formato panorámico nos confunde, y la posibilidad de grabar y reproducir 3D pero no en la propia pantalla del tablet.

Pasemos inmediatamente a nuestro análisis del LG Optimus Pad.

LG Optimus Pad y sus 8.9 pulgadas

Además de con el modo 3D, que analizaremos detenidamente más adelante, el LG Optimus Pad juega ante todo la baza de su tamaño de pantalla para competir aparte de los tablets Android de 10.1 pulgadas.

Hasta que llegue el esperado modelo de Samsung con la misma diagonal, es el único que ofrece unas manejables e interesantes 8.9 pulgadas con resolución de 1280 × 768 píxeles es el Tab de LG, cuya proporción de pantalla de 15:9 juega muy bien con dos posibilidades: formato alargado para poder arrarrarlo con una sola mano y formato panorámico para disfrutar de los vídeos de forma más óptima.

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El uso, el Pad me ha resultado muy cómodo. Hay que admitir que la diferencia con una pantalla de 10.1 pulgadas se nota menos de lo que pensaba, y lo que ganamos en manejabilidad queda perfectamente compensado. Sin embargo, el formato apaisado nos ha resultado extraño, pues es como tener un teléfono gigante – en este caso como el LG Optimus 2X superdotado -, aunque LG nos propone por las conexiones y la colocación del logo en la parte superior, que usemos el tablet en vertical cuando tenemos solo una mano disponible, y en apaisado cuando deseamos navegar o reproducir contenido, además de tomar fotos y vídeos en 3D. Esto lleva a una confusión por ejemplo con el control de volumen, que en formato apaisado aumenta o disminuye en sentido contrario de como lo hace en vertical.

En cuanto a la calidad de la pantalla, está en la línea de otros tablets del mercado. Es brillante, tiene resolución destacada para su tamaño y la respuesta táctil es perfecta, además de que es especialmente “cuidadosa” con la suciedad de nuestros dedos. O quizás esta semana de uso he sido yo más cuidadoso con mi “higiene de apéndices“, pero me decanto por la primera opción, que creo que es lo que os interesa.

Un último detalle que hay que conocer, porque aunque LG lo deja claro, puede llevar a que más de un consumidor se equivoque, la pantalla del LG Optimus 3D no es capaz de reproducir las imágenes tridimensionales con o sin gafas. Las siglas 3D y todo el software incluido para la reproducción de ese contenido está enfocado en que lo saquemos vía HDMI, momento en el que será compatible con cualquier televisor, ya sea con gafas activas o pasivas.. Esta idea nos quedó muy clara cuando LG nos envió un flamante modelo de televisor Cinema 3D como accesorio del tablet Pad.

LG Optimus Pad, características

Más allá de la pantalla, no hay sorpresas en las posibilidades de este Pad de LG. En su interior encontramos el ya clásico procesador Nvida Tegra 2 acompañado de 1 GB de memoria RAM y almacenamiento que de momento en España solo puede ser de 32 GB.

El rendimiento del LG Optimus Pad no esconde sorpresas, y cumple con lo que promete y ya hemos visto en otros tablets con la combinación Android 3.0 y Nvidia Tegra 2. En el apartado de la autonomía, su batería es de 6400 mAh, que unido a su tamaño de pantalla, nos ha dado sin problemas más de nueve horas de navegación y reproducción multimedia, siempre dependiendo del brillo de la pantalla, la conectividad 3G y WiFi activa o apagada, y el trabajo que le demos al procesador. El rendimiento es el mismo que con el Motorola Xoom, hasta ahora el mejor tablet Android en autonomía.

El aspecto exterior es como el de un LG Optimus 2X pero en grande. El acabado es de plástico, nada de metal pese a que la parte trasera pudiera indicar lo contrario a primera vista, pero de muy buena calidad.

Con una pulgada y como menos de tamaño de pantalla, el peso se permite estar por debajo de los 650 gramos pero el grosor no es ninguna maravilla: 12.8 mm.

Como conectividad destacada nos debemos fijar en que es un tablet Wifi+3G, con salida HDMI (y cable incluído, una gran alegría), puerto miniUSB pero sin ranura para tarjetas de memoria microSD. Como detalle debes saber que para introducir la tarjeta SIM hay que destapar la zona superior del tablet. Es sencillo y le da al LG Optimus Tab esa idea de pocas conexiones que está azotando a los tablets con Android.

Minimalismo llevado al extremo

Es tal la reducción que LG ha querido hacer de los botones físicos que creo que se le ha ido de las manos. Sino fuera por el logo de LG que nos invita a coger el tablet de forma vertical, sería misión imposible (si no miramos claro), coger de la manera correcta el tablet. Aunque seguro que me diréis que con acelerómetro y giro de pantalla automática ese es algo que no hace falta, serán manías mías pero me gusta saber la posición correcta del dispositivo que estoy usando.

Esto es así por la ausencia de los botones físicos de Android pero también por la miniaturización de los pocos controles físicos, a saber, el botón de encendido, que es ridículamente minúsculo, y el de control de volumen, también demasiado pequeño a nuestro parecer. Un simple botón de Home que nos oriente y permita el “encendido” del tablet nos haría muy felices.

El resto de conexiones que manchan el diseño cuidado del LG Optimus Pad son los altavoces situados en los laterales, la salida de auriculares y los puertos miniHDMI y miniUSB.

Hemos dejado separado conscientemente el conector de corriente, que de nuevo en un tablet Android 3.0 y a nuestro parecer de forma incorrecta, es propietario, no permitiendo que el tablet se cargue vía USB.

(En la siguiente entrega nos centraremos en el apartado multimedia, del sistema operativo y el modo 3D de este LG Optimus Pad)