Neandertales

Durante las últimas décadas, los trastornos del espectro autista han ido ganando visibilidad ante el público. Sin embargo, como tantas otras dolencias similares, es muy poco lo que sabemos de estos.

Que los humanos llevamos en nuestros genes una buena cantidad de información legada por los neandertales no es ya ningún misterio. Lo que implica esto, sigue siéndolo en parte.

La vida siempre es más compleja de lo que parece. La convivencia entre sapiens y neanderthales, también.

La historia de un amor (genéticamente) imposible es la historia de por qué estamos solos en el planeta

Dicen que a quien madruga dios le ayuda, pero este no debió de ser el caso de los neandertales.

Prácticamente desde el descubrimiento de los primeros huesos de los neandertales en el valle alemán que da nombre a esta especie, el Homo neanderthalensis ha sido considerado como una especie individual, distinta a la nuestra.

Que el aporte genético de los neandertales es sustancial no es ya ningún misterio. Sin embargo todavía no sabemos del todo cómo afecta ese legado genético a nuestras personas, aunque vamos averiguándolo poco a poco.

Es la desextinción molecular, y entre sus primeros objetivos está crear antibióticos a partir de genes neandertales.

Se trata del primer grupo de neandertales que sabemos conectado por lazos de sangre. Lo que nos cuenta este estudio firmado entre otros por el último Nobel de medicina va mucho más allá de la genética.

Nunca un cambio tan pequeño pudo significar tanto (al menos, para nosotros)

En una lejana cueva siberiana, acabamos de descubrir el primer ser humano que nació del cruce de dos subespecies humanas distintas

La imagen que va descubriendo la arqueología no puede estar más lejos de la imagen rudimentaria y embrutecida que teníamos de nuestros primos los neandertales.