TSMC

Samsung está lidiando con una etapa delicada. Extremadamente delicada.

Esto no lo esperábamos. TSMC, el mayor fabricante de circuitos integrados del planeta, está siendo investigado por el Departamento de Comercio de EEUU.

A mediados del pasado mes de septiembre la cadena CNBC desveló que Intel se está planteando escindir su negocio de diseño de circuitos integrados de sus fábricas de semiconductores.

ASML ha disfrutado unos años de bonanza espectaculares, pero todo acaba algún día.

TSMC va a cerrar el año 2024 por todo lo alto.

TSMC, y Taiwán por extensión, son una potente fuente de inspiración. Lo son, al menos, para Vietnam.

Los retrasos de las tres fábricas de semiconductores que está construyendo TSMC en Arizona (EEUU) le están dando infinitos dolores de cabeza.

TSMC está haciendo las cosas bien. Sus cifras la respaldan.

El Consejo Nacional de Ciencia de Taiwán se ha pronunciado acerca del grado de desarrollo de la industria de los circuitos integrados en China y Taiwán.

Intel ha puesto sus mejores huevos en una única cesta. La cesta del nodo 18A.

El río está sonando. Y lo están haciendo sonar, ni más ni menos, The Wall Street Journal (TWSJ) y Reuters, dos medios de comunicación que tienen una credibilidad contrastada.

La polémica planta de semiconductores conocida como Fab 21 que tiene TSMC en las proximidades de Phoenix (Arizona) ya está fabricando chips.