Que le pregunten a cualquier gamer: tanto HDMI como DisplayPort son dos de los puertos de conexión más populares hoy en día. Ambos pueden enviar video y audio digital de alta definición desde un dispositivo fuente a una pantalla. ¿En qué se diferencian?
El estándar de interfaz de audio/video HDMI ha tenido un gran éxito. De hecho, HDMI es la conexión digital más común que encontrará en televisores, decodificadores, reproductores de Blu-ray, receptores A/V, consolas de juegos, videocámaras y cámaras digitales. También lo encontrarás en ordenadores y portátiles.
Los conectores HDMI tienen 19 pines y se ven generalmente en tres tamaños: Tipo A (estándar), Tipo C (mini) y Tipo D (micro), siendo el primero el más común.
DisplayPort está en muchas tarjetas de video, así como en portátiles pero más para el segmento profesional. Tienen 20 pines y están disponibles en dos tamaños: DisplayPort y Mini DisplayPort.
HDMI es, bueno, un estándar omnipresente. Aparecerá en casi cualquier televisor que vayas a comprar y en todas las pantallas de ordenador orientadas al consumidor. También debería estar presente en la mayoría de las tarjetas de video, en portátiles y PC de sobremesa.
Los mejores monitores y PC admitirán DisplayPort además de HDMI. Los portátiles, en cambio, tienen menos posibilidades para los conectores, por lo que suelen apostar por HDMI.
Ampliar tu campo de visión
En función del dispositivo que tengas, cuando quieres conectarlo a un monitor necesitarás un adaptador a HDMI o a DisplayPort.
En el mercado puedes encontrar varios tipos de adaptadores y cables. En uno de los extremos está el puerto de tu elección y, en el otro, la variedad es amplia: USB, DisplayPort, VGA, HDMI y todas las variantes de estos.
Eso sí, recuerda que cuanto más adaptadores uses, más podrá degradadarse la señal y que un adaptador o cable VGA es solo para vídeo, por lo que el audio se reproducirá desde el equipo original.
También debes tener en cuenta que la mayoría de los cables HDMI son cortos (un metro o dos), por lo que si los equipos que quieres conectar están a una distancia larga, es posible que necesites usar un amplificador de señal o un cable "activo" que amplifique la señal en sí.
Así, por ejemplo, con conversores HDMI a DisplayPort puedes conectar una fuente de vídeo equipada con HDMI, como un reproductor Blu-ray, una cámara, una consola de videojuegos o un ordenador, a un monitor o proyector DisplayPort.
La mayoría de estos adaptadores no requieren ningún tipo de configuración por tu parte, ya que son plug-and-play. Es decir, basta enchufarlos a los dos equipos para que funcionen correctamente, sin necesidad de instalar software ni controladores.
¿Por qué conformarte con una sola pantalla?
Generalmente se suele utilizar una pantalla por ordenador. Pero añadir monitores adicionales permite ampliar tu escritorio, obteniendo más espacio en pantalla para los programas abiertos. Windows hace que sea muy fácil configurar monitores adicionales.
El doble de monitores significa más espacio, mejor visión y menos agobios
Conectando varios monitores a un ordenador puedes mover el ratón hacia adelante y hacia atrás, arrastrando programas entre los monitores como en un escritorio extra grande. Más espacio, mejor visión, menos agobios.
Es cierto que en un principio se adoptó este sistema a aquellos entornos laborales en los que la persona necesitaba ver algo mientras hacía sus tareas: ver una página web mientras escribe un correo electrónico, ver otro documento mientras escribe algo, o trabajar con dos hojas de cálculo grandes y tener ambas visibles a la vez.
Pero los jugadores que quieren ver más del mundo de su título favorito, extendiendo el juego a través de múltiples pantallas, son otro tipo de usuarios, aquellos que más partido pueden sacar a estas posibilidades —incluso para ver un video en una pantalla mientras hacen otra cosa en la otra—.
Es cierto que con un solo monitor también se puede usar la función Ajustar para colocar rápidamente varias aplicaciones de Windows. Pero la utilidad de esta función depende del tamaño y la resolución de su monitor.
Cómo conectar un segundo (o tercer) monitor
Mientras, conectar un monitor adicional a un ordenador es una cosa muy sencilla gracias a estos puertos. La mayoría de los PC de sobremesa vienen con más de un puerto para un monitor, ya sea DisplayPort, DVI, HDMI, el puerto VGA anterior o una combinación.
Basta conectar un monitor al puerto DisplayPort, DVI o HDMI del ordenador para que Windows permita usar tanto la pantalla integrada del ordenador como el monitor externo.
Todo esto depende, claro, de los puertos que tenga el PC y de cómo se conecte su monitor. Si tienes un monitor VGA viejo y un portátil moderno con conectores DVI o HDMI, necesitarás un adaptador-conversor para enchufar el cable VGA del monitor.
Ahora imagínate que puedes conectar varios monitores y que, además, estos son curvos, lo que proporciona una sensación de profundidad con la que tener experiencias más realistas e inmersivas en tus juegos.
Esto es básicamente lo que permite Asus ROG Strix XG32VQ, un monitor curvo QHD de 32 pulgadas que, gracias a los 144 Hz de frecuencia de refresco y la tecnología Adaptive-Sync (FreeSync), elimina los tirones y evita que las imágenes se entrecorten. La tecnología ASUS Aura Sync permite sincronizar su iluminación con el resto de dispositivos compatibles a fin de dotar a tu equipo de gaming de más personalidad.
Otra ventaja la encontramos en su marco ultrafino, lo que le convierte en el compañero de juegos ideal para agrupar varios monitores y jugar en multidesk.
El objetivo de la línea de monitores ROG de Asus es ofrecer las mejores experiencias de juego. Por eso se incluye la tecnología GamePlus, que tiene varias ventajas para rendir al máximo en los juegos. Estas herramientas se han desarrollado conjuntamente con gamers profesionales para que puedan practicar y mejorar habilidades. No olvidemos que el monitor ROG Strix XG32VQ o el ROG SWIFT PG348Q incluyen puertos DisplayPort 1.2, HDMI, Mini-DisplayPort, salida de auriculares y USB 3.0. El pack completo.
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