Con la alta definición formando ya prácticamente parte de nuestro vocabulario de sobremesa de café y estando ya integrada en la familia, el cine en 3D y la holografía acaparan ahora nuestra atención. El cine es el que debe reinventarse, pues la comodidad de las descargas de contenidos y las mejoras en los equipos audiovisuales caseros, les están forzando a buscar la mejor manera de arrastrarnos del sillón y las palomitas y refrescos económicos hasta la sala de cine situada a las afueras, para lo cual debemos coger el coche y soportar saturaciones en las circunvalaciones de las ciudades. Y luego el precio alto y los extras por las nubes.
Pero creo que estaba hablando de las holografías. En la Universidad de Arizona parece que han dado el paso casi definitivo para que sea una realidad. Lo han hecho con la creación de la primera pantalla que dispone de memoria para escribir y borrar imágenes holográficas en poco tiempo. Hasta ahora, cuando se lograba un holograma, éste se quedaba allí para siempre.
De momento es un buen paso adelante, pero no está todo hecho. El prototipo es una pantalla de 4 pulgadas monocromática, pero las bases están asentadas. Lo próximo será llegar a los tres colores y al tamaño de pantalla que al menos valga para un ordenador.
La llegada de esta tecnología de una forma más o menos comercial no está prevista hasta al menos un periodo de 5-10 años, que conociendo un poco el mundo de la electrónica significa que algunos más o directamente que no la veremos pues habrá otra mejora que centre nuestra atención y la de los fabricantes.
Vía | CNN.