Cinco meses han pasado desde que Boeing decidió pausar la producción de su ya histórico Boeing 737 MAX. Con toda la flota en tierra y sin aerolíneas que los compren pararon su producción hasta que las cosas se aclararan. Aún no están aclaradas y sigue sin permiso para volar, pero la fábrica del Boeing 737 MAX ha comenzado a operar de nuevo.
Tal y como han anunciado en un comunicado oficial, la planta de Renton en Washington ha comenzado a funcionar de nuevo. La producción ha comenzado a un ritmo más bajo del habitual para centrarse en "más de una docena de iniciativas enfocadas en mejorar la seguridad en el lugar de trabajo y la calidad del producto". A lo largo de este año aumentarán de forma gradual la producción del Boeing 737 MAX.
La fábrica se cerró en enero de este año después de que la compañía lo anunciara en diciembre de 2019. Debido a que los aviones no pueden volar las aerolíneas han dejado de comprarlos temporalmente, por lo que Boeing simplemente estaba acumulando Boeing 737 MAX en el almacén. Afortunadamente los empleados no fueron despedidos para poder disponer de ellos de nuevo una vez la producción se reanudara.
Más de dos años con el Boeing 737 MAX en tierra
Fue en marzo de 2018 cuando todos los Boeing 737 MAX a lo largo y ancho del mundo perdieron el permiso para volar. Esto se debió a dos accidentes fatales que acabaron con la vida de 346 pasajeros y miembros de la tripulación. Desde entonces numerosas investigaciones por parte de la agencia federal de aviación estadounidense han detectado varios errores en el diseño del avión.
El principal fallo que provocó los dos accidentes se encontraba en el sistema de control de vuelo MCAS, pero aparte de eso varios errores de software están provocando que el avión pase por un control más exhaustivo. Tanto es así que Boeing hasta tiene que cambiar todo el cableado de los 737 MAX.
Hasta que no esté todo solucionado y el avión pase las pruebas de la agencia estadounidense (respectivamente la europea y las de otras áreas del mundo), los Boeing 737 MAX no podrán volver a volar. Y por supuesto, tendrán que ser modificados todos y cada uno de ellos para corregir los errores existentes.
Boeing ya avisó que no esperaban que el Boeing 737 MAX volviese a volar hasta al menos mediados de 2020. Esta fecha probablemente se vea atrasada aún más debido a la situación actual de confinamiento global por el COVID-19. Por suerte para Boeing, el COVID-19 también ha disminuido la demanda de aviones por parte de las aerolíneas. Finalmente, merece la pena destacar que Boeing anunció recientemente el despido de alrededor de 7.000 empleados por el COVID-19.
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