Muy poco se sabía de 'Crucible' hasta ahora mismo. El anuncio de su desarrollo, la reciente confirmación de su fecha de salida, y poco más. Casi nada más allá de los constantes retrasos y problemas en la puesta a punto de Amazon Game Studios, que ya cumple ocho años. La apuesta de Amazon en el terreno de los competitivos multijugador, subvariante MOBA, llega ahora dispuesta a conquistar un terreno especialmente nutrido de un tiempo a esta parte (el reciente y comentadísimo 'Valorant' tiene apenas un mes). ¿Será capaz de comerle terreno a los ya muy asentados 'League of Legends' y 'DOTA 2'?
El resultado, debido al largo tiempo que ha estado en desarrollo, ha husmeado en una serie de referencias muy distintas. Es obvio su parecido estético, propio de dibujos animados, con éxitos desde hace unos años como 'Overwatch', aunque en un tono más cercano a la fantasía que a la ciencia-ficción. Es decir, cercano a un 'League of Legends' en la ambientación, pero mucho más luminoso y colorido. Esta mixtura de referencias es lo que le da personalidad, y vamos a intentar desgranar algunas de ellas.
'Crucible' como cúmulo de influencias
Básicamente, 'Crucible' es un hero shooter, una variante del género donde los jugadores se dividen en equipos y adoptan apariencias, atributos y armas de "héroes" predefinidos. Son juegos en los que se anima a colaborar entre los miembros del equipo, y básicamente todo el género se ramifica a partir del mítico (y aún muy jugado) 'Team Fortress 2' de Valve. Algunos de los títulos más significativos del género, y de los que bebe 'Crucible', son 'Overwatch', 'Apex Legends' o 'Quake Champions'.
Al decir que estéticamente tiene mucho en común con los hero shooters, no nos referimos solo al diseño de los personajes. Por ejemplo, una de las formas de monetización de 'Crucible' es su tienda de personalización de los héroes, y que está clarísimamente inspirada en las de 'Apex Legends' y 'Overwatch'. Por cierto, estéticamente también mira a otro juego que intentó ligar MOBA y hero shooters, el ya semiolvidado 'Battleborn' de Gearbox.
Sin embargo, los modos de juego de Crucible lo acercan a otro tipo de juegos, los MOBA como 'League of Legends' o 'DOTA 2', de donde bebe no en estética, pero sí en planteamiento y ambiciones, con mecánicas orientadas claramente a los e-sports. Básicamente, en un MOBA se enfrentan equipos de jugadores, pero con la intención de destruir una estructura ajena. Los MOBA suelen contar también con unidades que controla la IA del juego. Todo ello bebe de la influencia de la estrategia en tiempo real, aunque el paso del tiempo ha llevado a que en juegos como 'Paragon' hayan impactado mecánicas de género como el RPG o la acción pura.
El juego, por lo que se ha podido ver y analizar hasta ahora, funciona como una mezcla de ambos géneros, porque hay varios modos de juego, unos más orientados a la acción que otros. En el modo más importante, Heart of the Hives, hay que capturar tres objetivos (monstruos que se defienden al estilo de los dragones del 'LOL', y a los que se puede abordar antes o después de haber acabado con el equipo rival) y que hereda la parte más estratégica y con trabajo en equipo de 'DOTA 2' o 'LOL'.
Por otra parte, hay algo de la acción más desenfadada y el test de habilidad puro de competidores más juveniles como 'Overwatch'. Y hay otro modo, Alpha Hunters, que plantea un estilo de battle royale, como mandan los cánones de un inalcanzable de la acción multiugador, 'Fortnite'.
La macedonia puede parecer compleja, pero no hay que olvidar un detalle importante: aunque a estas alturas parece complicado aspirar, con un juego primerizo, a alcanzar el nivel estratégica y la complejidad de las partidas de LOL, Amazon tiene claro que hay que mirar al terreno de los e-sports, donde estos juegos reinan. El motivo está claro: Twitch es de su propiedad, y hay que aprovechar esa circunstancia.
La importancia de la estrategia
De este modo, Crucible plantea una visualización de la acción a ras de suelo y en la que prácticamente el jugador solo ve lo que ve su personaje, y eso nos acerca a 'Fortnite', 'Overwatch' y 'Valorant' (que también, curiosamente, es una mezcla de géneros, esta vez de los hero shooters, pero con la exigencia de precisión y trabajo en equipo de 'Counter Strike'). La característica perspectiva cenital y aérea de 'LOL', que permite elaborar estrategias complejas y ver una amplia porción del mapa, está ausente aquí.
Sin embargo, la mecánica se acerca a los MOBA: la velocidad a la que se mueven los héroes (distribuidos en dos equipos de cuatro jugadores), por ejemplo, es esencial para elaborar estrategias, permanecer en equipo y decidir cómo recoger elementos que mejores a los personajes. Es esencial planificar bien los encuentros y las rutas para que encajen con las características de los jugadores: como suele ser habitual, el tanque del equipo, Earl, es tan resistente como lento, y para compensar tenemos a un personaje capaz de teletransportarse, pero a quien le conviene no enzarzarse en demasiadas peleas.
También el desarrollo de los combates tienen más que ver con los MOBA tradicionales que juegos más orientados a la acción pura como 'Fortnite', donde la estrategia pasa a segundo plano. En 'Crucible', los combates no se zanjan tanto por la habilidad que hay que tener en la acción en sí, sino por lo bien que se hayan mejorado y preparado los guerreros previamente, aniquilando rivales menores controlados por la IA, lo que permite mejorar a nuestros personajes... todo para intentar partir en los a menudo confusos y caóticos combates de una posición ventajosa.
Ese es otro aspecto que acerca al juego a 'LOL' y 'DOTA 2': los personajes, diez distintos entre sí, tienen cada uno características muy definidas y es importante que los equipos estén equilibrados con las distintas características de cada uno (del movimiento rápido al uso de armas de larga distancia). Un equipo en el que abundan los tanques o los personajes rápidos pero poco resistentes (las clases no se denominan de forma clásica, pero se adhieren fácilmente a las tipologías habituales) puede dar al traste con el juego, como saben de sobra los jugadores curtidos en títulos donde es patente la influencia rolera.
Otros modos de juego
Y luego, para dejar claro que 'Crucible' mira en varias direcciones, están los mencionados modos más orientados a la acción. Está el battle royale para 16 jugadores, Alpha Hunters. En él, se enfrentan ocho equipos de dos jugadores. Y luego está un deathmatch tradicional titulado Harvester Command, este con dos equipos de ocho jugadores, donde se ganan puntos por controlar zonas, hasta llegar a cien puntos. Dos estilos de juego que todos conocemos a fondo porque los hemos visto en decenas de otros títulos, y que están claramente inclinados a la acción multijugador más directa.
Entre las quejas que se han leído de las primeras partidas del juego están la escasez de mapas o lo poco amigable que resulta para jugadores no curtidos en este tipo de títulos. Son cuestiones que habrá que analizar a partir de ahora, cuando este batiburrillo de estilos de Amazon llegue a Steam, en exclusiva para Steam y en modo free-to-play.
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