Recuerdo que el paso a los reproductores de DVD en casa de mis padres se dilató más de lo debido por el tema del alto precio y que no se usaba mucho. Por sentido común con los nuevos formatos pasará lo mismo, y cuando el precio de los reproductores baje, su cuota de mercado será mayor, si no se empeñan los fabricantes en introducirlos con calzador a la fuerza.
El caso es que tras anunciar que lanzaría un Bluray de bajo coste, y por eso Sony entiende los 600 euros, la misma compañía estaría planeando reducir el precio de sus unidades lectoras hasta los 300 dólares este mismo año.
Esto tiene todo el sentido del mundo porque si lo hacen, tendrán un reproductor integrado en una consola con gran penetración y un mercado doméstico con un equipo a un precio más asequible. Lo que no tiene ni pies ni cabeza es lo de ahora.
Vía | Gizmodo.
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