La estrella de Nokia en este 3GSM es el Nokia N95, y eso que no ha habido presentación oficial. Pero muchas de las aplicaciones que se mostraban allí, como smart2go o el reproductor de música, lo hacían sobre este terminal. Y la verdad es que no me extraña, porque Nokia ha conseguido casi la cuadratura del círculo, un terminal pequeño y ligero pero con una buena pantalla y una gran potencia.
Lo que más sorprende es su tamaño y peso que, por la fotografías, imaginábamos mucho más grande. Pero en la mano se siente realmente ligero y tiene pinta de caber perfectamente en el bolsillo sin miedo a que le pase nada.
Se nota su potencia en las aplicaciones, sobretodo en los juegos en 3D que, aunque tampoco era muy complicado gráficamente, se movía con perfecta fluidez, igual que el software de navegación.
Realmente poco más se le puede pedir. Tal vez un teclado QWERTY completo, pero probablemente eso sería ya pedir un imposible.
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