Con la gala de los Óscar 2018 aún en nuestras retinas, no es raro que a alguien se le haya despertado el gusanillo de convertirse en director de cine. Por suerte, no hace falta tener un completo equipamiento profesional para grabar nuestro primer corto y hacerlo con unos resultados excepcionales. De hecho, podemos valernos de un smartphone de gama media y una serie de accesorios para que la grabación sea de película.
Si además el móvil incorpora características que hasta hace poco se circunscribían a los modelos premium, mejor que mejor. Es el caso de todos los nuevos modelos que ha presentado Alcatel en el MWC, que exhiben de serie pantallas con una relación de aspecto 18:9 para potenciar la sensación de inmersión que siempre viene bien para el Séptimo Arte.
Una buena idea, esencial
Es cierto que suelen ser las grandes producciones cinematográficas las que triunfan, tanto en taquilla como en las galas de premios. Pero, tampoco es menos cierto que la historia está plagada de grandes éxitos que nacieron con un bajo presupuesto y por los que, quizá, nadie daba un euro.
Uno de los mejores ejemplos es El proyecto de la bruja de Blair, con rodaje en 16 mm. Se trata de un título que supuso una verdadera revolución, tanto en su género (terror) como en el del cine en general. Por un lado, por su realismo extremo y, por otro, por los temblores de la cámara.
Pero no es la única película que triunfó con un presupuesto limitado. Cintas como Mad Max, La noche de Halloween o La Matanza de Texas son otros ejemplos de gran recaudación en taquilla contra todo pronóstico.
Todo ello demuestra que lo importante en muchas ocasiones es tener una buena idea, incluso más que las posibilidades reales de llevarla a cabo.
Grabando a pleno rendimiento
A partir de ahí, por supuesto es aconsejable tener unos buenos productos para que el resultado final sea fetén. No obstante, sobre todo para hacer nuestros primeros pinitos, nuestro móvil puede ser nuestro mejor aliado.
El hecho de que los smartphones integren cada vez mejores cámaras nos ayudará a explorar gran parte de nuestra creatividad con niveles de calidad más que aceptables. Asimismo, suelen incluir varias opciones de grabación, como cámara lenta (slow motion video) o rápida, disponibles para aportar un efecto Matrix a las filmaciones. En todo caso, no está de más que echemos un vistazo a los ajustes de vídeo del móvil y probar cuál se adecua mejor a nuestras preferencias.
Por otro lado, no es preciso disponer del terminal más caro del mercado, propuestas como el nuevo Alcatel 5 ─el buque insignia del fabricante chino en los lanzamientos de este año─ cumplirán con creces. Este modelo, además, integra doble cámara frontal para hacer selfies grupales con súper gran angular.
Y, gracias a su pantalla de visión completa de 5,7 pulgadas y sin marcos que mencionábamos al inicio de este artículo, la experiencia de visionado será cinematográfica. Eso sí, no debemos olvidar filmar en horizontal.
Otras recomendaciones genéricas pasan por tener la precaución de no tapar el micrófono accidentalmente durante la filmación si pretendemos capturar el sonido ambiente y mantener limpia la lente para conseguir una imagen nítida. En función de la atmósfera que deseemos crear, tendremos que prestar atención a la iluminación e intentar evitar el uso/abuso del zoom. Es preferible acercarse al objeto o persona que deseemos filmar.
No hay nada como probar las técnicas de grabación profesionales y ver cómo nos encajan en nuestros propósitos: jugando con distintos tipos de planos (panorámico, medio, americano) y ángulos (picado, contrapicado, cenital, normal). Un último consejo: para impedir que las notificaciones arruinen una toma perfecta, activaremos el Modo Avión para aislarnos de cualquier comunicación inalámbrica.
Aplicaciones complementarias
Tanto si tenemos un smartphone que incorpore algunas de estas opciones como si no, en la Play Store de Google puedes encontrar muchas aplicaciones que nos pueden ayudar a filmar nuestro primer cortometraje.
Entre ellas, podemos mencionar Videoshop, que permite añadir todo tipo de efectos, como cámara lenta o ultrarrápida. Además, es posible editar también los vídeos que ya tengamos grabados y guardarlos. Obviamente, el resultado no es igual que si lo hubiéramos grabado directamente con estos efectos, pero puede ayudar.
Otra herramienta interesante es EnjoyMobi, con la que no solo cabe la opción de controlar la velocidad, sino también de aplicar más de 30 filtros distintos. Una de sus principales virtudes es que no tiene límite de tiempo en los vídeos que se van a editar.
Por su lado, VivaVideo es una de las aplicaciones de edición de vídeo más descargadas de la tienda de Google. Con ella, podemos recortar y combinar clips, añadir textos, filtros o transiciones y modificar la velocidad. También nos brinda la oportunidad de incluir música, 200 efectos especiales distintos y otros que modifican la imagen.
Algunos accesorios vitales
Sin duda, la imagen es una de las partes más importantes del éxito de nuestro corto, al margen de la idea, por supuesto. En consecuencia, siempre podemos destinar algo de nuestro presupuesto a mejorar las lentes del smartphone.
Por ejemplo, Xcsource DC264B es un kit de lentes para móviles. Con este accesorio, se abre la posibilidad de introducir imágenes grabadas con ojo de pez de 180 grados, o perspectivas de gran angular. Tampoco se perderá detalle de algunos aspectos gracias a su lente macro.
Tenemos otras opciones que no solo contemplan lentes especiales, sino también trípodes. Con ellos, es factible dejar el móvil grabando y aparecer en escena o garantizar que la imagen se captura de forma estable.
Si lo que preferimos es un estabilizador que, además, tenga un buen micrófono, Video Rig Mouriv puede ser una alternativa.
El retoque final
Por último, deberíamos hacernos con un buen programa de edición de vídeo que nos permita combinar todas nuestras grabaciones, añadir efectos, transiciones, textos, cortinillas de entrada y salida, etc. con el fin de darle un toque final a nuestra producción.
La mayoría de los ordenadores personales vienen equipados con algunos de estos programas, aunque también es posible encontrar en el mercado otras opciones de pago o gratuitas que añaden más utilidades y posibilidades. Por mencionar algunas solventes y sin coste alguno, os proponemos VideoPad o Lightworks. Y ahora... silencio, se graba.
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