Sony Xperia XZ3, análisis: espectáculo multimedia que ahora sí se sostiene en una gran cámara

El teléfono de referencia de Sony para la última parte de 2018, que es el momento álgido para los fabricantes de smartphones, es el nuevo Sony Xperia XZ3, teléfono que estrena una espectacular pantalla OLED curvada y donde la cámara toma un protagonismo que por fin es lo que uno espera del fabricante de los mejores sensores del mercado.

Sony Xperia XZ3: review en vídeo y ficha técnica

Tras el Sony Xperia XZ2 que conocimos a principios de año y el modelo Premium que llegó tras el verano, ya tenemos a la venta el nuevo Sony Xperia XZ3, modelo de importancia para Sony porque estrena la tecnología OLED en su pantalla.

Sony era de los pocos fabricantes de la gama alta que permanecía fiel a los paneles IPS para sus terminales. Pero si quería avanzar en algunos aspectos principalmente relacionados con el diseño, era necesario un cambio que ha sido para bien en todos los sentidos.

De la ficha técnica del nuevo Sony Xperia XZ3 destaca sin duda la pantalla, una OLED de 6 pulgadas con HDR y las tecnologías habituales de Sony para sus paneles. No falta tampoco el cuidado sonido, tanto vía altavoces como con auriculares (bluetooth o con adaptador, pues no hay entrada de 3,5 mm clásica), completando así un protagonismo de la parte multimedia que Sony ha hecho marca de la casa.

Sin embargo en la ficha técnica sorprende que se mantenga una sola cámara o que la combinación de memoria RAM / interna sea "solo" de 4 GB / 64 GB sin más posibilidades de elección. Lo hace porque no podemos olvidar que estamos hablando de un terminal de 799 euros en un mercado de dura competencia a nivel de especificaciones puras y duras. Pero analicemos con calma cómo se comporta en realidad el Sony Xperia XZ3.

Fuera marcos, bienvenidas las curvas

El Sony Xperia XZ3 es el primer smartphone de Sony que por primera vez no podemos identificar claramente con solo un vistazo a su frontal. El Xperia XZ2 que estrenaba lenguaje de diseño ya nos hacía intuir este radical cambio, pero con el Xperia XZ3 hemos confirmado esa pérdida de identidad que siempre hemos alabado de los terminales de la firma japonesa.

Pero los beneficios que recoge el Sony Xperia XZ3 bien merecen esa pérdida. En las mismas dimensiones que el Xperia XZ2 Premium cabe una diagonal mayor, de 6 pulgadas, pesando además algo menos y con un grosor de 9,9 mm que, pese a no estar entre los más destacados en ese apartado, supone una mejora considerable respecto a las generaciones anteriores. En mano se agradece mucho. Y visualmente también.

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La pérdida de personalidad del Xperia XZ3 es debida a una ligera reducción de marcos y la llegada de la tecnología OLED a la pantalla, lo que le permite una curvatura que protagoniza todo su frontal. Apagado no podemos negar que nos recuerda bastante a los Samsung Galaxy S con doble curvatura de la pantalla.

Esa doble curvatura trasera y frontal, que es simétrica, le queda estupendamente a nivel estético al Xperia XZ3, además de que provoca una reducción del marco de aluminio. Este diseño hace el terminal muy agradable al tacto y sensación en mano, al tiempo que gana algo de agarre, aunque hay que seguir teniendo precaución pues se mantiene como un teléfono con tendencia a escaparse de las manos.

Doble curvatura con "trucos"

La tecnología OLED y la doble curvatura del Sony Xperia XZ3 no llega con las manos vacías a su diseño. La marca japonesa le ha proporcionado un truco a imagen y semejanza de otras compañías con esta peculiaridad en los laterales del teléfono.

El sensor lateral funciona como imaginas: doble toque en uno o ambos lados y entonces nos aparece disponible un menú lateral con aplicaciones para usar directamente.

Hay que agradecer a Sony que dé la oportunidad de que se pueda configurar casi todo, desde las aplicaciones presentes hasta la sensibilidad del doble toque o del desplazamiento lateral. Gracias a ello uno puede ajustar el funcionamiento de este "truco" a su manera de manejar el terminal.

En nuestro caso hemos acabado usándolo más de lo esperado y con bastante éxito pese a algunos falsos positivos al coger el terminal. Me ha resultado bastante útil para el manejo con una sola mano tanto lanzando aplicaciones directamente desde ese menú lateral y sobre todo para moverme hacia atrás en webs o aplicaciones al deslizar en el lateral. Con un poco de práctica se consigue fallar poco si previamente lo has ajustado a tu manera de interaccionar con esa parte del terminal.

De hecho prefiero este tipo de ayudas a las que reducen la pantalla, opción que también está disponible en este Xperia XZ3 y a la que se accede de manera sencilla y efectiva deslizando el dedo por los controles virtuales de Android.

A vueltas con la situación del lector de huellas trasero

Todas las buenas sensaciones con el nuevo diseño que estrena el Xperia XZ3 quedan algo empañadas por la insistencia de Sony de mantener el lector de huellas demasiado centrado. Es inevitable, incluso con días de uso, poner el dedo sobre la cámara cuando buscamos identificarnos.

En esta semana en la que el Sony Xperia XZ3 se ha convertido en mi teléfono de uso diario no nos ha dado tiempo a cambiar el chip para asociar esa peculiar posición que solo defiende Sony, y que puede acabar desesperando a algunos usuarios. Tan solo cuando se recoge el terminal de una mesa, por ejemplo, uno puede admitir que la posición del sensor es adecuada.

Al menos queda la tranquilidad de saber que pese a que acabemos poniendo más de la cuenta el dedo sobre la lente de la cámara, es muy difícil dejar huella, habiendo hecho ahí un trabajo excelente Sony. Pero nuestra preferencia sigue siendo que haya un movimiento global de los elementos de la parte trasera para mejorar la ergonomía en la identificación biométrica por huella dactilar.

Una posible solución a la situación de lector de huellas queda introducido por Smart Lock, una serie de alternativas de protección que incluyen desde detección corporal (mantiene el terminal desbloqueado mientras lo llevamos por ejemplo en el bolsillo o la mano, y no lo dejamos sobre algún sitio) hasta dispositivos de confianza (pulseras cuantificadoras o smartwatches) o reconocimiento facial.

Tras probar varias combinaciones de estos sistemas, finalmente configuré el reconocimiento de rostros en busca de una solución que funcionara para mi. Si hay buena luz, el sensor de rostros es igual de rápido que la huella dactilar (sobre todo con el retraso que se introduce mientras buscas el sensor en la parte trasera), pero de manera global no acaba de convencerme la estrategia de Sony con el sistema de reconocimiento biométrico, apartado que todavía tiene que afinar y reconducir.

Sony por fin se pasa a la tecnología OLED

Como es habitual en Sony, la pantalla sigue siendo el elemento más cuidado y de más nivel de su terminal de gama alta. En este Sony Xperia XZ3 todavía queda más reforzada esa idea gracias al paso a la tecnología OLED.

Las 6 pulgadas de su pantalla son espectaculares a la vista, tanto por la continuidad que transmite el tener menos marcos como especialmente por la curvatura en los laterales o por la calidad global de la misma. No falla ni en contraste ni en la profundidad de los negros o reproducción del color.

Aunque la legibilidad en exteriores del Xperia XZ3 es muy buena, el brillo queda algo por debajo de la mejor competencia, pero es algo que no afecta al día a día. Estamos ante una pantalla donde predomina el equilibrio y la buena ejecución, con el extra siempre bienvenido de las propias tecnologías de Sony (Triluminos, X Reality o Dynamic Contrast Enhacer), las cuales dan lo mejor del sector cuando reproducimos contenidos multimedia. También estamos ante un panel compatible con la tecnología HDR (HDR10).

Respecto a la resolución, la pantalla del Sony Xperia XZ3 pasa con alta nota la prueba gracias a sus 2880x1440 píxeles, dejándonos una nitidez a la que no se puede poner pegas.

Otro aspecto destacado en la pantalla del Xperia XZ3 es la posibilidad de personalizar la experiencia, ajustándola a nuestro gusto personal o necesidades. Hay tres modos de trabajo (profesional, estándar y super vívido), siendo el que más nos gusta el estándar.

Cada uno de ellos podemos combinarlos con el balance de blancos, que admite 3 modos y uno extra que podemos personalizar completamente.

De la pantalla OLED del Sony Xperia XZ3 solo tengo una pega relevante: el sensor de luminosidad. Sony sigue calibrándolo demasiado bajo y resulta incómodo tener que variarlo a mano varias veces al día cuando pasamos de exterior a interior, que es cuando más nos ha ocurrido. Este detalle esperamos que quede resuelto en la versión final del software, que llegará a mediados de octubre. La unidad que nosotros hemos probado todavía no contaba con la versión final que llevarán los dispositivos que se pongan a la venta para el consumidor.

Modo Always On a lo bestia

Con la instauración de la tecnología OLED en la pantalla del Sony Xperia XZ3, el usuario gana una funcionalidad siempre bienvenida como es la "pantalla Always On", la cual Sony bautiza como Pantalla Ambiente.

La entrada de esta funcionalidad en la gama de teléfonos Sony ha sido espectacular y es una de las más completas del mercado por posibilidades. Por ahora, según nuestras pruebas, no hay una reducción apreciable ni significativa de autonomía por tener esta opción activada que justifique renunciar a sus ventajas.

La configuración de la misma puede variar según el uso que queramos darle. Tenemos la posibilidad de dejarla siempre activada (o desactivada), que se encienda cuando cogemos el teléfono o mi preferida, que sea una activación basada en la llegada de notificaciones, al sacar el terminal del bolsillo o cuando hacemos doble toque sobre la pantalla.

La pantalla ambiente permite disponer de diferente información de un vistazo aunque la pantalla esté bloqueada. Podemos configurar varios estilos de reloj, notificaciones (tanto nuevas como mantener las que van acumulándose), información útil como la batería e incluso ir más allá y disponer de fotos o pegatinas que, aunque llamativos, ya recomendamos menos por su limitada utilidad.

Vibración para mejorar la experiencia multimedia

La experiencia multimedia con el Xperia XZ3 no acaba curiosamente con la pantalla sino con otro truco de Sony. Lo han llamado Vibración dinámica y es una especie de respuesta vibratoria del terminal que acompaña al cierto contenido multimedia o apps compatibles como Spotify.

Lo hemos estado probando con algunos títulos de cine y algo de música y puede pasar como anécdota o para ciertos momentos, pero no deja de ser algo curioso y sin utilidad real que marque diferencias.

Si con la vibración nos hemos quedado como algo anecdótico, el sonido ya nos ha convencido más.

Los altavoces estéreo que ha incluido Sony en el Xperia XZ3 suenan con gran potencia y mucha claridad, algo apreciable especialmente en las voces cuando reproducimos cine, música o series. No hace falta pasar de más de la mitad del recorrido del control de volumen para obtener un sonido que llena completamente nuestro espacio personal y, como hemos dicho, con una nitidez muy buena.

La colocación de los altavoces en los marcos superior e inferior es lo que hace que no se reduzcan más los mismo, y en este caso creo que merece la pena este sacrificio en dimensiones si solemos usar mucho el terminal para reproducir contenidos.

En cuanto al sonido con auriculares, aquí Sony se mantiene plenamente fiel a sus usuarios y no defraudará a quienes buscan gran calidad de sonido (que no potencia sonora) vía auriculares (DSEE HX para música comprimida) o incluso de manera inalámbrica (dispositivos LDAC o apto HD).

Entre esos controles para personalizar el audio no faltan dos muy recomendables: el normalizado dinámico y el ClearAudio+, el cual el usuario puede "sustituir" por un ecalizador más clásico y comprensible.

Rendimiento a la altura de los mejores pese al aprobado en ficha técnica

Que el Sony Xperia XZ3 es un terminal de gama alta queda claramente refrendado por el acabado, el precio y por supuesto por la inclusión de un procesador como el Snapdragon 845. Pero echando un vistazo a su ficha técnica, hay detalles que se nos quedan algo abajo para los tiempos que corren y donde gamas media de menor precio vienen apretando desde hace tiempo.

Nos referimos a la memoria RAM e incluso a la capacidad de su memoria interna. La combinación de 4 GB de RAM y 64 GB de interna, por mucha microSD que admita, parece un dato débil para aquellos usuarios que tienen muy en cuenta estos datos a la hora de valorar la relación calidad/precio de un terminal.

Esa apreciación solo hay que hacerla fijándose en las cifras de la ficha técnica (y quizás en el desempeño a futuro). Sin embargo, en este momento, el redimiendo tanto en el día a día como en los benchmarks dejan claro que el Sony Xperia XZ3 está entre los smartphones más potentes del mercado, marcando cifras muy altas.

El Sony Xperia XZ3 se estrena en el mercado con Android 9 de serie, personalizado con la habitual capa de Sony. Es un valor que tampoco debe dejarse de lado.

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Lo que encontramos en la capa de software de Sony nos es conocido. Manteniendo su personalidad y algunas de sus propias aplicaciones (por suerte cada vez menos), la experiencia es muy satisfactoria, pudiendo obtener lo mejor de Android 9 con un toque que, si eres usuario de Sony, ya conoces muy bien. Por ejemplo la galería, uno de los mejores valores de su ecosistema.

La mayoría de las novedades a nivel de interfaz o servicios están asociadas a la pantalla, como hemos visto, pero también a la cámara, donde hay interesante mejoras.

Recuperando terreno perdido en autonomía

Personalmente llevo un par de generaciones esperando que la fama de Sony a nivel de autonomía regresara alguna vez. Pues bien, con este Xperia XZ3 hay un hilo del que empezar a tirar.

Con una batería de 3330 mAh y sus siempre agradecidos modos de ahorro de energía para situaciones peliagudas, el Sony Xperia XZ3 nos ha ofrecido una autonomía media que siempre ha aguantado de sobra el día de uso intensivo. En los días de gran desempeño llegábamos al final de la jornada con más del 35% de carga y un uso de 3 horas de pantalla. Agotada la batería, el uso de pantalla se situó de media en las 4,5 horas.

La batería del Sony Xperia XZ3 admite carga inalámbrica Qi pero no carga rápida de Qualcomm. Los modos de ayuda que Sony asocia con su batería para que se desgaste menos penalizan la carga rápida. Tener completos los más de 3000 mAh ocupa casi 3 horas de nuestro tiempo.

Respecto a los modos de ahorro, ahí tenemos el modo Stamina, el cual podemos activar en cualquier momento o hacer que se ponga en marcha con un porcentaje concreto de batería. También hay avisos basados en nuestro historial de uso del terminal con el tiempo.

Una sola cámara pero más preparada que nunca

La esperanza de que con el Xperia XZ3 viéramos una doble cámara tras su estreno en el Sony Xperia XZ2 Premium estaba ahí. Pero Sony ha decidido que por ahora es una exclusividad que deja a su primer espada. Al Sony Xperia XZ3 le toca conformarse con un solo sensor trasero pero que viene con sorpresas.

La cámara es una Motion Eye de 19 MP Exmor RS, con sensor de tamaño 1/2,3" para conseguir un tamaño de fotoreceptores de 1,22 μm. Junto con la lente G f2.0 de 25 mm estamos ante una combinación prometedora sobre el papel. Como casi siempre con los smartphones de Sony.

Esa combinación que el fabricante japonés ya tenía en el Xperia XZ2 trae sin embargo una mejora sustancial donde llevábamos unas generaciones viendo avances pero demasiado tímidos: el procesamiento de la imagen BIONZ.

En escenas con buena luminosidad y sin excesivo contraste, el Sony Xperia XZ3 mantiene sus valores en la resolución de 19 MP que permite obtener mucho detalle en las fotografías, con una reproducción de color y balance de blancos sin problemas. A falta de conocer el rendimiento de la cámara con el software final, en algunas escenas, especialmente con árboles, nos hemos vuelto a encontrar un efecto acuarela bastante evidente.

En las escenas con mucho rango dinámico el HDR automático actúa sin que el usuario tenga nada de control. Apenas se puede apreciar su efecto. Si queremos controlarlo nosotros hay que optar por el modo manual, donde tampoco hay una diferencia grande entre tomas, aunque suficiente para recuperar zonas quemadas, como en el ejemplo siguiente.

A la izquierda, modo HDR desactivado. A la derecha, activado en modo manual

Hasta ahí no hemos encontrado muchas novedades en la cámara del Xperia XZ3 respecto a generaciones anteriores. El paso adelante de consideración lo da en las escenas con poca luz, donde el procesador de imagen ahora sí que acompaña al tamaño del sensor y no juega en su contra.

El Sony Xperia XZ3 es capaz de no arruinar el detalle de una escena con poca luz para que el ruido no haga acto de presencia. Todavía, en ciertas circunstancias aparecen figuras de personas, detalles concretos o letras algo difuminados, pero es un buen paso adelante.

De la cámara del Sony Xperia XZ3 hay que hablar por fin de una interfaz que sigue avanzando y que facilita el cambio de modo entre foto y vídeo, así como el control de elementos importantes de la fotografía. También admite un paso rápido al modo que hemos usado justo antes de pasar de nuevo a modo automático.

Una novedad de la interfaz asociada a la cámara del Sony Xperia XZ3 se llama Smart Launch y permite que cuando sacamos la cámara del bolsillo (no funciona cuando cogemos el terminal de encima de una mesa) y ponemos inmediatamente el terminal en modo apaisado, se lance la interfaz de cámara.

Funciona la mayoría de veces, solo tienes que acordarte de que está ahí para ser usada. En todo caso preferimos la siempre acertada inclusión del botón físico para la cámara.

¿Y la cámara secundaria? Aquí Sony recurre a un sensor de 13 MP con f1.9 que ofrece mucha luminosidad y detalle, siempre que el enfoque no falle. Hay modo bokeh por software que permite desenfocar ligeramente el fondo para un mejor resultado.

Vídeo 4K, HDR y con estabilización OIS

Del apartado técnico de la cámara del Sony Xperia XZ3 seguimos echando en falta el estabilizador óptico. En su lugar Sony sigue insistiendo en su tecnología SteadyShot con 5 ejes de estabilización. Su mejor papel lo hace con el modo de vídeo, donde Sony sigue siendo referencia tanto por calidad como por esa estabilización.

Los modos que ofrece el nuevo Xperia XZ3 no hay sorpresas. Tenemos vídeo con calidad 4K y 1080p a 60 fps como elementos destacados, ofreciendo mucho detalle cuando la luz es suficiente y buenos resultados también cuando la misma escasea.

No falta en el Xperia XZ3 el modo de cámara lenta a 960 fps, con bastante calidad (1080p) también pero con un control poco intuitivo para el usuario. Su efecto dura menos de un segundo en tiempo real y acertar al activar ese modo para obtener la escena a cámara lenta justo en el punto que buscábamos no es nada sencillo. Pero sí muy "resultón".

Sony Xperia XZ3, la opinión y nota de Xataka

Muy poco a poco Sony ha ido adaptándose a los tiempos actuales y, sin caer en una eliminación total de los marcos, ha actualizado la apariencia de su último terminal a lo que más predomina en el mercado. Cierto es que el Sony Xperia XZ3 pierde personalidad pero por otro lado gana relevancia en los escaparates y unas dimensiones más acordes a la gama alta.

Con el cambio de línea de diseño llega la tecnología OLED a la pantalla del Xperia XZ3. O más bien cabría decir justo lo contrario. Esa curvatura de la pantalla es posible por la tecnología OLED, reforzada visualmente y enfatizando el apartado en el que siempre ha brillado más Sony: el multimedia.

Las mejores noticias llegan del lado de la autonomía y de la cámara. En ambos lados hay una mejora sustancial que pone a Sony donde debería estar por ficha técnica, aunque en ese punto haya algo de debilidad frente incluso a la gama media. No hablamos de rendimiento bruto sino de lo que ofrece por el precio que pide Sony por el terminal.