Hay aspectos de la seguridad o componentes de un coche del futuro más próximo que es inevitable y lógico que se adapten a las posibilidades de la tecnología. Como nos muestra Nissan, el retrovisor debe ser uno de ellos. ¿Qué sentido tiene seguir con las limitaciones de un espejo para ver lo que ocurre detrás nuestro cuando una sencilla cámara puede darnos un campo de visión mayor y más fiables?
Pues una mezcla de ambas tecnologías, lo antiguo y lo más actual, se dan cita en un retrovisor llamado Smart que Nissan va a poner en el mercado japonés el próximo año. Con un simple gesto podemos cambiar la vista de espejo tradicional del espejo retrovisor por el amplio campo que nos proporciona una cámara de 1.3 megapíxeles situada en la parte trasera del coche.
Las ventajas asociadas al uso de una cámara no hay que buscarlas solamente por la mejor visión, sino que Nissan incluye una serie de ayudas como la eliminación o compensación de destellos o la luz solar directa que sufriríamos en un espejo de tipo tradicional casi con toda seguridad.
Con este sistema tan sencillo, podemos alternar entre una visión completa pero exclusiva de la carretera en la parte posterior del coche, o mantener también bajo control lo que ocurre en los asientos traseros.
Vía | Wired.
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