Hace unos meses nuestra experiencia con las Vision Pro planteó una forma mucho más inmersiva de ver espectáculos deportivos. Ahora una empresa ofrece ese tipo de contenidos, pero sin necesidad de unas gafas de realidad mixta. Es una evolución del cine tradicional, pero orientado precisamente a esos eventos.
Cosm. Así se llama la empresa que ya tiene dos "cines" en Dallas y Los Ángeles, en EEUU. En estas salas se ofrece una experiencia inmersiva que es una evolución de la que plantean por ejemplo las salas IMAX esféricas —Madrid tiene la sala Spherium con tecnología IMAX 3D, por ejemplo— que están especialmente diseñadas para retransmitir eventos deportivos que vemos casi como si estuviéramos en primera fila.
La perspectiva lo es todo. Las salas Cosm cuentan con tres zonas de asientos que están preparados para ofrecer esa experiencia inmersiva gracias a una enorme pantalla curva que parece meterte dentro del evento deportivo. La clave está en la perspectiva y el punto en el que se colocan las cámaras de los eventos, que por ejemplo están en la zona de touchdown de los partidos de fútbo americano o tras las canastas de los partidos de baloncesto. Esa perspectiva no siempre es útil claro, pero para ver el resto del partido hay también retransmisión desde las cámaras de televisión convencionales.
Del planetario a los deportes. La firma Cosm tiene como CEO a Jeb Terry, exjugador profesional de fútbol americano y que decidió replantear las salas de cine y tecnología de pantallas de los planetarios. En las salas Cosm también se siguen ofreciendo experiencias inmersivas típicas de un planteario con documentales de ciencia y espacio, pero lo que ha empezado a causar furor en redes sociales son esas retransmisiones de eventos deportivos de todo tipo, desde fútbol americano a baloncesto pasando por fútbol, tenis o UFC.
El centro Cosm en Dallas, EEUU.
Pantalla gigante. La pantalla LED de estas salas ofrece una calidad espectacular gracias a su resolución de más de 12.000 píxeles en horizontal y 10.000 en vertical. Su tamaño es de cerca de 27 metros de diagonal y la tecnología LED permite que sea hasta 150 veces más brillante que la de un planteario estándar y hasta diez veces más brillante que la de los cines con pantallas planas tradicionales. Hay también un componente curioso: la inclusión de soporte para el motor Unreal Engine de Epic, que se alimenta de un sistema de procesado en la nube para emitir esas retransmisiones.
Pero no es nada barato. Disfrutar de esta experiencia es caro: las butacas suelen rondar los 100 dólares, lo que en muchos casos no es muy distinto de ir directamente a disfrutar de dichos partidos allí donde se celebran físicamente. Las salas Cosm, eso sí, forman parte de centros en los que existen zonas de restauración y en los que hay otras áreas para disfrutar de estos eventos deportivos desde grandes pantallas planas con una perspectiva tradicional.
¿Es este el futuro de las retransmisiones deportivas? Es lo mismo que nos preguntábamos cuando asistimos alucinados a las demos inmersivas de las Vision Pro. Por ahora lo cierto es que Apple no ha aprovechado demasiado ese concepto y no ha habido apenas eventos deportivos (o de otro tipo) que aprovechen la tecnología de las Vision Pro. Puede que propuestas como las de Cosm sirvan para que estas gafas y sus futuras competidoras se conviertan en una alternativa real para disfrutar de ese tipo de contenidos de una forma inmersiva y realmente espectacular.
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